Dos mujeres en las noches franquistas
Una noche Ava Gardner y Beppo se encontraron en el Oliver. No se hablaron, ni siquiera se miraron
Escritor y periodista. Ganador, entre otros, de los premios de novela Alfaguara y Nadal. Como periodista empez¨® en el diario 'Madrid' y las revistas 'Hermano Lobo' y 'Triunfo'. Se incorpor¨® a EL PA?S como cronista parlamentario. Desde entonces ha publicado art¨ªculos, cr¨®nicas de viajes, reportajes y daguerrotipos de diferentes personalidades.
Una noche Ava Gardner y Beppo se encontraron en el Oliver. No se hablaron, ni siquiera se miraron
Cuando el museo cierra sus puertas, los personajes salen de los cuadros, se saludan unos a otros y hablan de sus cosas
Al cumplir los siete a?os, empez¨® a pensar que el bien y el mal estaban atados con un mismo nudo
Eugenio Pacelli, el papa P¨ªo XII, siempre ser¨¢ aquel por el que mi padre, por fin, se compr¨® una m¨¢quina el¨¦ctrica de afeitar
El turismo tan beneficioso en otro tiempo est¨¢ a punto de convertirse en una amenaza, est¨¢ creando una sensaci¨®n de angustia, muy pr¨®xima al p¨¢nico
Tras las pasadas elecciones a los independentistas catalanes les espera la realidad, la vida vulgar y heroica de cada d¨ªa
En el parador de Bayona, por una deferencia del director, ocup¨¦ la ¡®suite¡¯ principal, en la que hab¨ªan dormido el rey Juan Carlos, el pr¨ªncipe Felipe, Charles de Gaulle, varios monarcas destronados y tambi¨¦n el General¨ªsimo Franco
El rechazo que produce la matanza fr¨ªa y sistem¨¢tica en Gaza que estamos obligados a digerir junto con la sopa en el telediario ha encendido por fin la c¨®lera de los estudiantes en Europa y en Norteam¨¦rica
La fiesta taurina, ya en plena agon¨ªa, ha sido asumida por la derecha castiza como un arma de ataque y resistencia pol¨ªtica a cara de perro
En el mundo de hoy es toda una aventura adivinar si est¨¢s en el bando que te conviene
El que uno no recuerde ni un ¨¦xito, ni un fracaso, ni una suerte, ni una desgracia, es precisamente la felicidad
Pedro S¨¢nchez es un pol¨ªtico al que hacen grande sus enemigos. Tal vez solo por ellos pasar¨¢ a la historia
El vendedor de cuadros Ambroise Vollard fue el primero en darse cuenta de que Paul C¨¦zanne, objeto de chanzas en aquel entonces de sus propios colegas impresionistas, hab¨ªa revolucionado el mundo del arte
Si yo fuera un gur¨² californiano, dir¨ªa que nuestro cuerpo es un r¨ªo que al nacer recibe las aguas de un manantial puro y al final de la vida las devuelve al mar limpias o contaminadas, seg¨²n el comportamiento de cada uno
Me tocas, te toco, luego existo: he aqu¨ª una certeza insoslayable, cosa que no se puede decir del resto de los sentidos
Un autor llega a la inmortalidad cuando convierte su vida en una ruta dentro de un paisaje
Solo el arte a lo largo de la historia ha dejado una huella perenne
Los recuerdos m¨¢s felices que permanecen sumergidos pueden salir tambi¨¦n de su sepulcro para volver a la vida de cada d¨ªa y esa ser¨¢ la forma m¨¢s perfecta de resurrecci¨®n
Para despedirme del verano ped¨ª una ginebra con hielo, la fui degustado a sorbos que apenas me mojaban los labios y me fui quedando absorto con la mirada perdida en el oleaje
El espect¨¢culo de masas m¨¢s genuino y salvaje que he presenciado en mi vida fue ver c¨®mo se comportaban los ¡®hooligans¡¯ del Liverpool en el tren camino a Manchester
El espectador echa de menos que al final de las sesiones del Congreso no suene una cisterna para que se lleve hacia la alcantarilla este detritus cargado de odio ib¨¦rico que les sale del alma a algunos padres de la patria
La vida convulsa y bohemia de un artista, adornada de perversiones, suele ser muy atractiva
Cada historia particular, por muy vulgar y anodina que sea, est¨¢ formada con un mill¨®n de nudos a merced del azar
Cualquier crimen contra la humanidad participa en tu dieta diaria y en tus ejercicios de respiraci¨®n. ?Acaso no queda un poco de belleza en este mundo en la que refugiarse?
Los fil¨®sofos de la escuela estoica o c¨ªnica ya nos dejaron la f¨®rmula de una eternidad de andar por casa sin pasar por el quir¨®fano. No pensaban nunca en el futuro
Durante un tiempo anduve metido en ese laberinto que me permiti¨® descubrir lo m¨¢s extra?o y parad¨®jico que uno lleva dentro cuando se enfrenta a los naipes duros: los pliegues del alma humana
Pens¨¦ en lo que hab¨ªa dejado al emprender este viaje. Atr¨¢s hab¨ªa quedado la mesa del caf¨¦ Gij¨®n que daba al primer ventanal a trav¨¦s del cual hab¨ªa visto pasar la vida durante tantos a?os
Mi generaci¨®n lleva en el subconsciente asimilada la seducci¨®n de las grandes estrellas de la pantalla
En las afueras de Tumaco (Colombia) se levantaba un conglomerado de palafitos en estado de extrema ruina donde malviv¨ªan 540 campesinos desplazados por la guerrilla o los paramilitares
Desde el momento en que le advirtieron de que el sexo era pecado, ese ni?o comenz¨® a tener la mirada sucia
Hoy la cultura la constituyen millones de seres an¨®nimos cuyo iPhone les sirve para proyectar su pensamiento inane o su imagen de pelanas hasta m¨¢s all¨¢ de las esferas celestes de Plat¨®n
El campo del c¨®lera estaba compuesto de varios pabellones de madera donde agonizaban y al mismo tiempo par¨ªan decenas de mujeres
No tendr¨ªa inconveniente en seguir el ¡®carpe diem¡¯ de Horacio siempre que ese d¨ªa al que hay que agarrarse se me permitiera fabricarlo a mi gusto
Me gustan los peces voladores y aquellos delfines que sal¨ªan a recibirte en la traves¨ªa a Ibiza. Odio los leones de los escudos y banderas y tambi¨¦n los del circo
A veces un largo recorrido ha quedado reducido a una sensaci¨®n, a una instant¨¢nea, fugaz pero imborrable
El ni?o recordaba la primera vez que vio los ra¨ªles que se perd¨ªan entre los ¨¢rboles. Imaginaba que m¨¢s all¨¢ de esa curva exist¨ªa una ciudad maravillosa en la que viv¨ªan sus h¨¦roes de los tebeos
Poco importa que Espa?a se rompa o no si al final la crispaci¨®n pol¨ªtica te rompe el diafragma
Durante el banquete todos juntos cantaban y re¨ªan, se hac¨ªan promesas de amor y de paz. Terminada la fiesta la gente continu¨® mat¨¢ndose como si se tratara de un oficio ordinario
Queda por ver el precio emocional que nuestro inconsciente va a pagar a la hora de metabolizar las im¨¢genes de ni?os destrozados mientras suenan canciones de navidad
La Noche de Reyes fue el fundamento de todas mis creencias m¨¢s arraigadas, que se basan en la ficci¨®n