Estrasburgo da la raz¨®n a un grupo de mujeres y condena a Suiza por su falta de acci¨®n frente al cambio clim¨¢tico

El empleo de los tribunales para forzar a los gobiernos a aplicar medidas m¨¢s contundentes contra el cambio clim¨¢tico no ha recibido el rotundo espaldarazo que muchos activistas aspiraban a lograr este martes. Pero s¨ª obtuvo una victoria parcial cuyas repercusiones podr¨ªan ser importantes. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), con sede en Estrasburgo, ha concedido una de cal y otra de arena. Por un lado, los magistrados han desestimado la demanda que seis chicos portugueses hab¨ªan presentado contra 32 gobiernos europeos a los que acusaban de no hacer lo suficiente contra la crisis clim¨¢tica. Los jueces entienden, entre otras cosas, que no han agotado todas las v¨ªas jur¨ªdicas disponibles en su pa¨ªs. Pero, en otro caso tambi¨¦n clim¨¢tico, el TEDH ha condenado al Gobierno suizo por incumplir sus propios objetivos de reducci¨®n de emisiones de efecto invernadero. Entienden los magistrados que Suiza ha contravenido as¨ª varios art¨ªculos del Convenio Europeo de Derechos Humanos. Alrededor de 2.000 mujeres se asociaron para llevar a su Gobierno ante el tribunal porque afirmaban que su falta de acci¨®n les pone en riesgo de morir, por ejemplo, durante una ola de calor.

Es la primera vez que este tribunal se pronuncia sobre la falta de acci¨®n de las autoridades estatales frente al calentamiento global. El Convenio Europeo de Derechos Humanos no recoge ning¨²n derecho a un medio ambiente sano como tal. Pero el TEDH ha dictado varias sentencias en esta materia medioambiental al entender que el ejercicio de determinados derechos del convenio puede verse menoscabado por la existencia de da?os al entorno y la exposici¨®n a riesgos medioambientales. Esa es la v¨ªa empleada por los denunciantes, que han recibido el apoyo de organizaciones ecologistas, para llegar ante este tribunal internacional.

Tres casos se han analizado y sentenciado este martes. El de los chicos portugueses; la demanda de una asociaci¨®n suiza de mujeres jubiladas preocupadas por la crisis clim¨¢tica contra su gobierno; y otro, contra el Gobierno franc¨¦s, presentado por un alcalde del municipio de Grande-Synthe, quien acusaba a su Ejecutivo tambi¨¦n de no tomar medidas suficientes para prevenir el calentamiento global. Esta ¨²ltima demanda tampoco ha prosperado.

En el caso de la Asociaci¨®n Suiza de Mujeres Mayores por el Clima (Verein KlimaSeniorinnen Schweiz, en alem¨¢n), el tribunal ha explicado a trav¨¦s de una nota que el Gobierno de este pa¨ªs ¡°ha incumplido sus obligaciones¡± en virtud de la convenci¨®n ¡°en relaci¨®n con el cambio clim¨¢tico¡±. ¡°Ha habido graves deficiencias en el proceso de establecimiento del marco normativo nacional pertinente¡±. Adem¨¢s, el TEDH explica que ¡°Suiza no ha cumplido sus objetivos¡± de ¡°reducci¨®n de emisiones de gases de efecto invernadero¡±. ¡°Las autoridades suizas no actuaron de manera oportuna y adecuada para concebir, redactar y aplicar la legislaci¨®n y las medidas pertinentes¡±, a?aden los magistrados. Por ello, la gran sala de este tribunal concluye ¡ªpor 16 votos contra uno¨D que se ha violado el art¨ªculo 8 de la convenci¨®n, el que protege el derecho a la vida privada y familiar. Adem¨¢s, por unanimidad, se condena tambi¨¦n a Suiza por incumplir el art¨ªculo 6, que consagra el derecho a un proceso judicial equitativo.

Porque en el caso de la asociaci¨®n suiza, s¨ª se habr¨ªan agotado esas v¨ªas judiciales. De hecho, no se les hizo caso en sus reclamaciones. El TEDH ha explicado que ¡°los ¨®rganos jurisdiccionales suizos no han explicado de manera convincente las razones por las que consideraron que no proced¨ªa examinar el fondo de las alegaciones de la asociaci¨®n demandante¡±. ¡°Esos tribunales no tuvieron en cuenta los datos cient¨ªficos indiscutibles relativos al cambio clim¨¢tico y no tomaron en serio las denuncias formuladas¡±, a?ade el tribunal europeo en lo que se puede considerar un aviso a navegantes para futuros pleitos en las cortes nacionales.

Sin sanci¨®n

Esta condena no acarrea una sanci¨®n para el pa¨ªs incumplidor, pero abre una interesante v¨ªa para que los activistas clim¨¢ticos sigan presionando a los gobiernos para que sean m¨¢s ambiciosos en sus recortes de emisiones. ¡°La sentencia de hoy contra Suiza sienta un precedente hist¨®rico aplicable a todos los pa¨ªses europeos¡±, ha valorado Gerry Liston, uno de los abogados de Global Legal Action Network que ha llevado el caso de los chicos portugueses, que, seguramente, ha sido el m¨¢s medi¨¢tico y el que ten¨ªa m¨¢s alcance por el n¨²mero de naciones denunciadas. Seis chicas y chicos portugueses, de entre 12 y 26 a?os ahora, hab¨ªan denunciado a 32 pa¨ªses por su responsabilidad en un cambio clim¨¢tico que tiene y tendr¨¢ graves impactos sobre sus vidas, su bienestar, su salud mental y su disfrute pac¨ªfico de sus hogares. Entre esos 32 pa¨ªses estaban los 27 miembros de la Uni¨®n Europea ¨DEspa?a, entre ellos¡ª y otros como Noruega, Rusia, Suiza, el Reino Unido y Turqu¨ªa. En la sentencia conocida este martes, los magistrados adem¨¢s de argumentar que los chicos no han agotado las v¨ªas jur¨ªdicas dentro de su pa¨ªs, sostienen que tampoco existen motivos para entender que en este caso haya una responsabilidad extraterritorial que permita condenar a los 32 Estados demandados. Este fallo ha sido adoptado por la unanimidad de los 17 jueces.

Los seis j¨®venes decidieron emprender esta carrera judicial tras los terribles incendios en Portugal de 2017. En junio de aquel a?o un pavoroso fuego estall¨® en un bosque de Pedr¨®g?o Grande, una localidad del centro de Portugal, cerca del municipio en el que resid¨ªan algunos de los chicos denunciantes. Murieron 64 personas, 30 de ellas atrapadas en sus coches cuando trataban de huir por carretera, y nadie ha sido condenado por aquel siniestro. Aquel episodio, como otros tantos de los eventos extremos que han vivido en los ¨²ltimos a?os vinculados a la crisis clim¨¢tica, se les han quedado grabados y son los que han esgrimido ante el TEDH para pedir que se condene a esos 32 gobiernos por no hacer lo suficiente contra el calentamiento global. ¡°Realmente esperaba que gan¨¢ramos contra todos los pa¨ªses, as¨ª que obviamente estoy decepcionada de que esto no suceda. Pero lo m¨¢s importante es que la corte ha dicho en el caso de las mujeres suizas que los gobiernos deben reducir m¨¢s sus emisiones para proteger los derechos humanos¡±, ha sostenido este martes Sofia Oliveira, de 19 a?os, y una de los seis demandantes portugueses. ¡°Por lo tanto, su victoria es una victoria para nosotros tambi¨¦n y una victoria para todos¡±, ha a?adido.

El pasado 27 de septiembre los j¨®venes comparecieron ante la gran sala del TEDH, algo bastante inusual. Porque ¡°alrededor del 85% de los casos¡± que se presentan ante este tribunal se desestiman casi de inmediato, recordaba la semana pasada en un encuentro con medios internacionales Gerry Liston. Y del 15% restante solo una peque?a parte consigue llegar a la gran sala. Tambi¨¦n el caso de la asociaci¨®n suiza, que s¨ª ha prosperado en parte, tambi¨¦n llego hasta esa gran sala, formada por 17 magistrados.

Durante la vista celebrada en Estrasburgo, los chicos se enfrentaron a un ej¨¦rcito de m¨¢s de 80 abogados en representaci¨®n de 32 pa¨ªses demandados que coordinaron sus defensas. El principal argumento que esgrimieron se bas¨® en la inadmisibilidad de este caso al destacar que la lucha internacional contra el cambio clim¨¢tico se rige por el Acuerdo de Par¨ªs y no por la Convenci¨®n Europea de Derechos Humanos. Adem¨¢s, las defensas de los Estados sostuvieron que los demandantes no hab¨ªan agotado las v¨ªas nacionales antes de acudir al TEDH. Por ¨²ltimo, aseguraron que no estaba clara la relaci¨®n causal entre el cambio clim¨¢tico y los da?os que los chicos sostienen que sufren.

Est¨¢ por ver, y analizar, las repercusiones que tendr¨¢ la sentencia sobre Suiza, ya que s¨ª confirma que no actuar contra el cambio clim¨¢tico s¨ª puede contravenir los derechos humanos. Sobre los efectos que habr¨ªa tenido una condena contra los 32 pa¨ªses demandados, Liston explicaba la semana pasada que una condena podr¨ªa suponer el avance ¡°legal m¨¢s significativo sobre el cambio clim¨¢tico para Europa desde la firma del Acuerdo de Par¨ªs, en 2015¡å. Porque lo que buscaban es que tenga el mismo efecto que ¡°un tratado regional legalmente vinculante¡± para todos los demandantes para obligar a los gobiernos ¡°a reducir r¨¢pidamente sus emisiones¡±, pero tambi¨¦n para que hagan lo mismo las grandes empresas.

En cualquier caso, opinaba Liston, ¡°el efecto pr¨¢ctico m¨¢s significativo¡± residir¨ªa en el importante impacto que puede tener en los pleitos clim¨¢ticos que en muchos pa¨ªses activistas de todo tipo han presentado para que sus gobiernos aumenten los recortes de emisiones. ¡°Hemos visto un aumento masivo en el n¨²mero de casos sobre cambio clim¨¢tico en los ¨²ltimos a?os¡±, advert¨ªa este letrado. Y una sentencia del TEDH es munici¨®n de gran calibre para esos litigios. En algunos casos, como en Pa¨ªses Bajos, los activistas han tenido la fortuna de ver refrendadas sus demandas. En otros, como en Espa?a, el Tribunal Supremo dio la raz¨®n en julio de 2023 al Gobierno frente a los ecologistas en el primer litigio clim¨¢tico de este tipo que llegaba tan lejos.

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