El ingenio teatral de Barrie Kosky se desborda en ?msterdam con ¡®Il trittico¡¯ de Puccini
El australiano combina el m¨¢ximo teatral con el m¨ªnimo esc¨¦nico, en su conmemoraci¨®n del centenario de la muerte del compositor, en la ?pera Nacional de los Pa¨ªses Bajos, junto a un preciosista Lorenzo Viotti en el foso y un gran reparto
La clave del ¨¦xito para Giacomo Puccini consist¨ªa en hacer llorar al p¨²blico. Se lo confes¨® a su libretista Luigi Illica por carta, en octubre de 1912: ¡°?Pero crees que es f¨¢cil? Es terriblemente dif¨ªcil¡±. El compositor de Lucca buscaba temas para un viejo proyecto, quiz¨¢ inspirado por Los cuentos de Hoffmann, de Offenbach: crear un organismo oper¨ªstico en tres partes que combinase lo tr¨¢gico, lo sentimental y lo c¨®mico.
Ley¨® a Daudet, a Gorki y a Mirbeau, sin olvidar nunca a Dante. Al final se decant¨® por la tragedia naturalista La houppelande, de Didier Gold, para Il tabarro. Y encontr¨®, en el dramaturgo Giovacchino Forzano, al colaborador id¨®neo para la vidriera sentimental de Suor Angelica y la macabra comedia de Gianni Schicchi, inspirada en Dante. El resultado fue heterog¨¦neo y dif¨ªcil de bautizar; ¡°tr¨ªptico¡± surgi¨® tras descartar otras opciones previas desde ¡°tr¨ªpode¡± y ¡°tri¨¢ngulo¡± hasta ¡°trinidad¡± y ¡°tritono¡±.
Los directores de escena suelen buscar nexos para conectar las tres caras de Il trittico, cuando no combinan una de sus partes con otra ¨®pera breve. En la ¨²ltima producci¨®n vista en Espa?a, en noviembre de 2022, Lotte de Beer teji¨® su r¨¦gie en torno a la muerte y la mentira, en el Liceu de Barcelona. Ese mismo a?o, Christof Loy opt¨® por reforzar su unidad, en el Festival de Salzburgo, con Gianni Schicchi al principio. Pero Barrie Kosky, en su nueva producci¨®n para la ?pera Nacional de los Pa¨ªses Bajos, estrenada el pasado viernes, 3 de mayo, ha optado por individualizar estas tres peque?as ¨®peras de Puccini. ¡°Como si fueran los tres platos de una comida¡±, reconoc¨ªa en el programa de mano.
Era la tercera y ¨²ltima producci¨®n del r¨¦gisseur australiano, en ?msterdam, como parte de la conmemoraci¨®n del centenario de la muerte de Puccini. Y, tras convertir Tosca en un violento psicodrama con aires de Tarantino, o representar Turandot con la protagonista siempre oculta, se preve¨ªa algo igualmente iconoclasta para Il trittico. Pero Kosky ha confiado m¨¢s que nunca en su infalible direcci¨®n de actores para conseguir el m¨¢ximo teatral con el m¨ªnimo esc¨¦nico. Una sencilla escenograf¨ªa intemporal de Rebecca Ringst reducida a una pared con esquina como fondo, la magn¨ªfica iluminaci¨®n de Joachim Klein y un preciso dise?o de vestuario de Victoria Behr.
Al principio de Il tabarro vemos la gabarra de Michele por el Sena convertida en un andamio. Despu¨¦s ser¨¢ un pasillo y hasta un opresivo habit¨¢culo para reflejar la tensi¨®n con su esposa Giorgetta. El ambiente de los estibadores parisinos, al que pertenece su amante Luigi, es reducido al m¨ªnimo, aunque se perfile cada personaje secundario, con una sensacional creaci¨®n de Frugola. Y opta por un final grand guignol donde Michele mata a su esposa tras apu?alar a su amante y ocultarlo con su tabardo. No obstante, el mayor problema proviene de las voces fuera de escena que son pr¨¢cticamente inaudibles.
Ese inconveniente se resolvi¨®, en Suor Angelica, con una escalera invisible tras la pared. Otra vez, el mundo conventual se limita al m¨¢ximo, con un sencillo vestuario morado y un carrito de plantas como ¨²nico atrezo, aunque terminemos diferenciando casi a cada una de las monjas. La escena con La zia principessa fue uno de los mejores momentos de la noche, junto al suicidio de Suor Angelica, despu¨¦s de rociarse con las cenizas de su hijo muerto.
Un postre c¨®mico
Pero, tras el plato principal, fue en el postre c¨®mico de Gianni Schicchi donde el ingenio teatral de Kosky literalmente se desborda. El australiano opta por a?adir una escena, previa al inicio de la m¨²sica, donde vemos la muerte de Buoso Donatti durante una celebraci¨®n familiar. La acci¨®n es tan hilarante como grotesca y la m¨²sica arranca entre las carcajadas del p¨²blico. Y la chispa no decaer¨¢ en el resto de la ¨®pera con otra magistral direcci¨®n de actores y gui?os al cine de Bu?uel.
La brillante direcci¨®n musical de Lorenzo Viotti ha contribuido al incuestionable ¨¦xito de esta producci¨®n. Un preciosismo sonoro admirable, al frente de la Nederlands Philharmonisch Orkest, aunque con extremos din¨¢micos radicales que no siempre aportaron tensi¨®n dram¨¢tica y a veces tapaban las voces. El maestro suizo, que visitar¨¢ Espa?a en junio al frente de la Filarm¨®nica de Viena, extrae de la partitura de Puccini toda su modernidad, si bien a costa de parte de su italianit¨¤.
Lo comprobamos en el inicio de Il tabarro. Con el tema del Sena, que abre la obra y son¨® a Debussy y, poco despu¨¦s, con el vals levemente disonante del organillo que son¨® a Alban Berg. Su direcci¨®n de Suor Angelica se benefici¨®, no obstante, de planos sonoros exquisitos. Pero fue, en Gianni Schicchi, donde mejor conjug¨® su estilo personal con la acci¨®n dram¨¢tica. Y tambi¨¦n donde m¨¢s sentido cobraron las largas pausas que hizo en varios calderones de la partitura.
Poder¨ªo femenino
El inmenso reparto vocal para satisfacer las tres ¨®peras fue excelente. El ¨¦xito se decant¨®, no obstante, hacia los papeles femeninos. En Il tabarro sobresali¨® el poder¨ªo dram¨¢tico de la soprano afroamericana Leah Hawkins, como Giorgetta, en sus d¨²os con Luigi y Michele, si exceptuamos una descuidada pronunciaci¨®n del italiano.
Su marido fue el bar¨ªtono hispanoamericano Daniel Luis de Vicente, que exhibi¨® buen tono y musicalidad, en el mon¨®logo Nulla! Silencio!, aunque adoleci¨® de suficiente entidad dram¨¢tica para dar vida al patr¨®n asesino. Fue superior en el registro c¨®mico como un n¨ªtido y fluido Gianni Schicchi.
Lo mismo le sucedi¨® al tenor mexicano-estadounidense Joshua Guerrero. Su Luigi, en Il tabarro, son¨® escaso de contraste din¨¢mico y algo engolado en los agudos. Pero su voz funcion¨® mejor como Rinuccio, en Gianni Schicchi, donde brill¨® en Avete torto!.
La mezzosoprano afroamericana Raehann Bryce-Davis elev¨® el personaje secundario de Frugola, en Il tabarro, aunque su mejor momento lo escuchamos como La zia principessa, en Suor Angelica. Una voz grande, intensa y oscura que se combin¨® con la poderosa interpretaci¨®n de Elena Stikhina, como la monja suicida, que conform¨® uno de los momentos estelares de la noche. Esta soprano rusa brind¨® una ideal evoluci¨®n dram¨¢tica del personaje de Suor Angelica con exquisitos matices, en la conmovedora aria Senza mamma, y un valiente ascenso al do sobreagudo en pian¨ªsimo, en Ah, lodiam!.
Otra de las cantantes m¨¢s aplaudidas fue la soprano Inna Demenkova, tambi¨¦n l¨ªrica rusa de exquisito timbre, que exhibi¨® en el personaje de Suor Genovieffa, en Suor Angelica. Pero su Lauretta, en Gianni Schicchi, le permiti¨® disfrutar de la ¨²nica interrupci¨®n con aplausos de la noche: la popular aria O mio babbino caro, que cant¨® con el moh¨ªn perfectamente calculado.
Es lo que pretend¨ªa Puccini al parodiar aqu¨ª tantas arias para sus hero¨ªnas tr¨¢gicas. ¡°Deseo re¨ªr y hacer re¨ªr¡±, le espet¨® por carta a su amiga Sybil Seligman al final de su vida, y a?adi¨®: ¡°Nunca har¨¦ una opereta, pero s¨ª una ¨®pera c¨®mica: una especie de Rosenkavalier, m¨¢s divertido y org¨¢nico¡±. Por desgracia, su inesperada muerte, el 29 de noviembre de 1924, convaleciente de un c¨¢ncer de laringe, nos ha privado de m¨¢s corrosivas comedias puccinianas.
¡®Il trittico¡¯ (¡®Il tabarro¡¯, ¡®Suor Angelica¡¯ & ¡®Gianni Schicchi¡¯)
Música de Giacomo Puccini. Libreto de Giuseppe Adami (‘Il tabarro’) & Giovacchino Forzano (‘Suor Angelica’ & ‘Gianni Schicchi’). Daniel Luis de Vicente, barítono (Michele en ‘Il tabarro’ & Gianni Schicchi en ‘Gianni Schicchi’), Joshua Guerrero (Luigi en ‘Il tabarro’ & Rinuccio en ‘Gianni Schicchi’), Leah Hawkins, soprano (Giorgetta en ‘Il tabarro’), Raehann Bryce-Davis, ‘mezzosoprano’ (Frugola en ‘Il tabarro’ & La zia principessa en ‘Suor Angelica’), Elena Stikhina, soprano (Suor Angelica en ‘Suor Angelica’), Inna Demenkova, soprano (Suor Genovieffa en ‘Suor Angelica’ & Lauretta en ‘Gianni Schicchi’), entre otros. Coro De Nationale Opera. Nederlands Philharmonisch Orkest. Dirección musical: Lorenzo Viotti. Dirección de escena: Barrie Kosky. Het Muziektheater, 3 de mayo. Hasta el 19 de mayo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.