Una Vuelta buc¨®lico-paisaj¨ªstica

Un ciclista solo es ciclista verdadero fuera del pelot¨®n, en las contrarrelojes, solo, o en la monta?a alta, donde ir a rueda apenas concede ventaja. Dec¨ªan las leyes del ciclismo que se mamaban antes que hab¨ªa dos tipos de campeones de grandes vueltas, escaladores ligeros, reyes de la relaci¨®n vatios/kilos, que se defendieran bien en las contrarreloj y contrarrelojistas grandotes, los de los altos vatios absolutos, que aguantaran en la monta?a. El ciclismo bailaba entre pericos e induraines. El segoviano gan¨® un Tour, el de 1988, en el que hab¨ªa 98 kil¨®metros contrarreloj individual, mientras que en el primero de sus cinco Tours, el de 1991, el navarro super¨® a los escaladores en el Tourmalet y en Alpe d¡¯Huez, y luego cont¨® con 135 kil¨®metros de contrarreloj.

El siglo XXI, y las capacidades t¨¦cnicas para retransmitir las etapas con m¨²ltiples c¨¢maras y planos, ha a?adido a la ensalada otro ingrediente, el valor de los paisajes, que no siempre van ligados a la dureza, y ha restado peso a los valores cl¨¢sicos, la monta?a extrema, las contrarrelojes ¨¦picas. Despu¨¦s del Giro (26 kil¨®metros de contrarreloj individual) y el Tour (53), ya presentados, la tendencia la exhibe tambi¨¦n la Vuelta prevista para 2022, cuyo recorrido muy rendido a la tendencia buc¨®lico-paisaj¨ªstica, tan amada por los neocl¨¢sicos para los que solo la naturaleza domesticada e idealizada ten¨ªa valor, y los nuevos campeones del ciclismo de alma eslovena y car¨¢cter mixto, todoterrenos, Roglic y Pogacar, se dio a conocer el jueves. Con los 31 kil¨®metros contrarreloj que aporta la ronda espa?ola, y cuesta abajo (Elche-Alicante, d¨¦cima etapa. 30 de agosto), entre las tres grandes del calendario sumar¨¢n solamente 110 kil¨®metros de contrarreloj individual, menos entre todas que en uno solo de los Tours que ganaban Indurain, LeMond o Hinault.

La ronda espa?ola de 2022, que partir¨¢ junto a la casa Schr?der, un Mondrian en tres dimensiones, en Utrecht (Pa¨ªses Bajos), el viernes 19 de agosto con una contrarreloj por equipos, profundiza en la monta?a su gusto reci¨¦n descubierto por el redondeo y el limado de extremidades, el abandono de su piel salvaje. De los Pa¨ªses Bajos, una de la grandes patrias de la bicicleta, la tierra de Jan Janssen, el gafitas del Bic, y Zoetemelk, los dos ¨²nicos neerlandeses que han ganado la Vuelta (y tambi¨¦n los dos ¨²nicos que han ganado el Tour) sale la Vuelta por segunda vez, 13 a?os despu¨¦s del inicio en el circuito de Assen, la catedral del motociclismo, y antes de llegar a Breda, en la tercera etapa, y volar a Espa?a, pasar¨¢ por Hertogenbosch, o Bolduque, como recomienda la Fund¨¦u que se diga en castellano, la ciudad del Bosco del Jard¨ªn de las Delicias y la ciudad lluviosa en la que Indurain comenz¨® a perder el Tour de 1996, que de all¨ª parti¨®.

Aunque sobre el mapa y los perfiles de las 21 etapas se aprecian repetidas asperezas y hasta nueve finales en alto en in¨¦ditos lugares ex¨®tico-tur¨ªsticos como el Pico Jano (Cantabria), el Collau Fancuaya y Les Praeres (Asturias), Pe?as Blancas, Pandera y Sierra Nevada (Andaluc¨ªa), Tentud¨ªa y Piornal (Extremadura), y Navacerrada (entre Madrid y Segovia), solo uno de ellos, el viejo conocido de Sierra Nevada, alcanza la categor¨ªa especial y supera los 2.000 metros (2.510 para ser precisos). La Vuelta amable y calurosa de agosto se hace amiga de la moderaci¨®n y renuncia a las subidas extremas que le hicieron ganar dura fama las ¨²ltimas d¨¦cadas, al Angliru, al Gamoniteiru, Velefique y hasta a Lagos, y renuncia tambi¨¦n a dibujar una etapa verdaderamente reina: ninguna tendr¨¢ m¨¢s de dos puertos de primera; ninguna, ni llana (seis) ni de media monta?a (seis), ni de monta?a (siete), alcanzar¨¢ los 200 kil¨®metros de recorrido.

Si los kil¨®metros totales (3.280, 156 de media por etapa) no son para nada salvajes, s¨ª que lo son los m¨¢s de 2.500 kil¨®metros de traslados en autob¨²s o avi¨®n previstos, con tres tramos gigantescos para comerse los d¨ªas de descanso: 1.312 kil¨®metros entre Breda, en el Brabante neerland¨¦s, final de la tercera etapa y escenario de famoso ¨®leo, y Vitoria, de donde partir¨¢ la cuarta hacia Laguardia; 870 entre Oviedo, final de la novena etapa, y Elche, inicio de la d¨¦cima, y 306 entre Granada, descendiendo de Sierra Nevada tras la etapa 15?, y Sanl¨²car de Barrameda, de donde saldr¨¢ la 16? hacia Aracena, camino de Extremadura, en Huelva, que ser¨¢ as¨ª la octava de ocho provincia andaluza tocada en el civilizado recorrido.

Como un cruce de Perico e Indurain, un mixto con propiedades ¨²nicas tambi¨¦n, el ciclismo espa?ol de este siglo dio a luz a Alejandro Valverde, quien, con 42 a?os, colgar¨¢ la bici despu¨¦s de llegar a Madrid el 11 de septiembre. Un Valverde de hace 10 a?os ser¨ªa el gran favorito de un recorrido como el del 22. Con Mikel Landa decidido a correr Giro y Tour, para el ciclismo espa?ol, si en los primeros meses del a?o no se produce la explosi¨®n espectacular de alg¨²n talento oculto o la maduraci¨®n hermosa y definitiva de Enric Mas, el murciano que se agota seguir¨¢ siendo el nombre de referencia, tambi¨¦n en su oto?o.

Puedes seguir a EL PA?S DEPORTES en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.