Copa del Am¨¦rica: Team New Zealand roza la perfecci¨®n y se sit¨²a a un punto de hacer historia

Tras las dudas, lleg¨® la reacci¨®n. ?Y qu¨¦ respuesta! El Team New Zealand apabull¨® este viernes a Ineos Britannia tras el mi¨¦rcoles negro (sufri¨® dos derrotas) que ajust¨® la final de la Copa del Am¨¦rica. Los kiwis no quisieron m¨¢s sorpresas y se mostraron extremadamente contundentes en la quinta jornada del Match definitivo. Dos victorias m¨¢s en un bolsillo para empezar a poner la Jarra de las Cien Guineas en el otro. Con el 6 a 2 en el marcador, los kiwis se encuentran a un ¨²nico triunfo de levantar el t¨ªtulo por tercera vez consecutiva y convertirse este s¨¢bado en la sexta jornada de Barcelona en un equipo leyendario. Nunca antes un mismo equipo ha ganado tres ediciones seguidas en 173 a?os de competici¨®n.

La competici¨®n tuvo un ingrediente extra porque la meteorolog¨ªa prepar¨® una inc¨®moda sorpresa a los AC75. El viento sopl¨® inicialmente de poniente, de oeste a este, en un escenario poco habitual en esta edici¨®n. Al proceder el viento de tierra, este es m¨¢s irregular porque la orograf¨ªa de la propia ciudad genera turbulencias que acaban llegando a alta mar. Y en una competici¨®n en la que los tripulantes viven de encontrar las buenas rachas de viento, la irregularidad e¨®lica fue inc¨®moda para navegar. ¡°En algunos momentos naveg¨¢bamos con rachas de ocho nudos, y en otros, de 13¡å, explica Nathan Outteridge, timonel del Team New Zealand. El reglamento permite que la competici¨®n se dispute con entre 6,5 y 21 nudos, y los kiwis captaron en todo momento d¨®nde se escond¨ªan los tramos con buena presi¨®n.

El sue?o brit¨¢nico de la remontada acab¨® pronto. Tras vencer las dos carreras del mi¨¦rcoles y convertir un doloroso 4 a 0 en un digno 4 a 2, los aficionados del Ineos Britannia apelaban al esp¨ªritu de San Francisco (Estados Unidos), ciudad donde Ben Ainslie, timonel y l¨ªder del conjunto brit¨¢nico, consigui¨® en 2013 dar la vuelta a un 1 a 8 para vencer la final de la Copa del Am¨¦rica por 9 a 8 en una de las mayores remontadas de la historia del deporte de alta competici¨®n.

Pero en Catalu?a no existen los sue?os americanos porque Barcelona no es San Francisco, y los deseos se desvanecieron en las poco m¨¢s de 1,5 millas n¨¢uticas de longitud del campo de regatas. Con solo recorrer el primer tramo de las dos regatas (la primera se disput¨® a seis tramos y la segunda, a ocho), el Team New Zealand ya hab¨ªa desaparecido del radar de Ainslie, incapaz de recortar una diferencia que iba ampli¨¢ndose poco a poco. Nada que hacer.

La diferencia final entre ambos equipos super¨® el minuto en la primera prueba y se qued¨® en 55 segundos en la segunda, una distancia sideral en una final de la mayor competici¨®n de vela del mundo. ¡°Ha sido una regata perfecta, sin errores; estamos navegando como nunca¡±, admit¨ªa Ray Davis, entrenador neozeland¨¦s en la conexi¨®n televisiva durante la regata final. El s¨¢bado, la historia les espera.