Horno y microondas

Se puede cocinar en casa sin tener un horno? La respuesta es s¨ª. Si prescindimos del placer de hacernos una pizza, del pollo asado del domingo y de una dorada a la sal, es posible. Pero hay que reconocer que para las familias numerosas, o para cuando tenemos invitados, el horno es un buen aliado. En mi caso, aunque tengo un horno en casa, lo enciendo muy pocas veces. Sea como sea, si usted decide tener un horno, piense que en el mercado hay infinidad de variedades, desde los m¨¢s b¨¢sicos hasta los m¨¢s ultramodernos, que se limpian tan solo con apretar un bot¨®n. ?Consejos para utilizar el horno? Uno ser¨ªa que muchas veces el grill del horno sustituye perfectamente al horno propiamente dicho. Es lo que en cocina profesional llamamos gratinadora o salamandra, que sirve para muchas m¨¢s cosas que gratinar o tostar pan. Por ejemplo, para cocer finas l¨¢minas de pescado. El m¨¢s importante de los consejos es que es vital que la temperatura del horno, cuando introduzca cualquier producto, sea la ¨®ptima, por lo que habr¨¢ que tener la previsi¨®n de encenderlo unos minutos antes de cocinar. En cuanto al microondas, estamos ante un aparato al que tenemos por marciano y que a veces tiene mala prensa, aunque no s¨¦ muy bien por qu¨¦. A pesar de que ya hace a?os que nos ayuda en la cocina, pienso que al microondas a¨²n no se le ha sacado todo su partido, ya que sirve para muchas cosas, aparte de calentar la leche o de deshacer chocolate. Lo ¨²ltimo en restauraci¨®n es el aparato mixto horno-microondas, que sin duda acabar¨¢ llegando a todas las casas. Una curiosidad: me han explicado que en Jap¨®n se est¨¢ elaborando uno de estos aparatos que conseguir¨¢, en la delicada cuesti¨®n del asado del pollo, una cocci¨®n distinta para el muslo y para la pechuga. No es ciencia ficci¨®n. Es el futuro pr¨®ximo.

Lo ¨²ltimo en restauraci¨®n es el aparato mixto horno-microondas, que acabar¨¢ llegando a todas las casas

- COMER EN LA PLAYA. Lo m¨¢s recomendable cuando a uno se le ocurre ir a comer a la playa es no complicarse la vida y ser racional. Lo sencillo, sin embargo, no tiene por que ser aburrido. Por ejemplo, una opci¨®n muy buena es la de llevarse un aguacate. Es limpio de comer y no requiere preparaci¨®n. Si le a?adimos un peque?o bote con la vinagreta ya preparada, podemos tener un buen primero. Otra posibilidad, facilitada por los ¨²ltimos progresos, es la de beberse un buen gazpacho. Antes lo ten¨ªamos que preparar y nos pod¨ªa dar pereza, pero ahora los hay de preparados. Esto, junto a una bolsa de ensaladas, nos puede solucionar el primer plato. Una idea divertida, si tiene usted pr¨¢ctica, es la de llevarse palillos para comer la ensalada. Los bocadillos son la siguiente opci¨®n. Una primera idea ser¨ªa hacerlo con mozarella, tomate y anchoas, que es algo as¨ª como una pizza fr¨ªa. Otra opci¨®n es la de llevarnos un rosbeef, o sea, una carne asada, generalmente entrecot, cortada muy fina, que con mostaza puede ser deliciosa. Para acabar, la fruta es el recurso c¨®modo. Una buena macedonia, a la que habremos dado un toque con hinojo fresco, ser¨¢ un buen final. Otra soluci¨®n, por supuesto, es la de ir a un chiringuito.

- MEL?N. Con el mel¨®n se pueden hacer muchas m¨¢s cosas de las que parece a primera vista. Por ejemplo, se puede hacer una sopa con tres cuartas partes de mel¨®n y una cuarta parte de pomelo. Se pasa por la batidora, se a?ade menta picada y ya tenemos una excelente sopa fr¨ªa. Otra idea que puede sorprender es la del mel¨®n a la brasa. Se envuelve el mel¨®n en papel de plata, se pone en la barbacoa y al cabo de poco ya est¨¢ listo para comer. Un helado, por ejemplo de canela, ser¨¢ el complemento ideal. Si a alguien le suena raro lo del mel¨®n a la brasa, s¨®lo tiene que pensar en una calabaza al horno. Una tercera idea es la de una ensalada de mel¨®n con langostinos. Cortamos el mel¨®n en cubos de dos por dos, sazonamos con menta, sal, pimienta, lim¨®n y aceite de oliva y encima ponemos los langostinos hervidos y pelados, sazonados con salsa rosa. Por ¨²ltimo, una versi¨®n del mel¨®n con jam¨®n ser¨ªa la de hacer cubos de mel¨®n, envolverlos en tocino ib¨¦rico e insertar los trozos en una brocheta. Se puede comer fr¨ªa, o ligeramente pasada por la sart¨¦n. (Con la colaboraci¨®n de Xavier Moret).