La nueva ley facilitar¨¢ que el cliente pueda llevarse su hipoteca a otro banco

El texto de la nueva ley hipotecaria encara su recta final. Este jueves se aprueba en el Congreso. Desde ah¨ª se remitir¨¢ al Senado, donde se cuenta hasta marzo para a?adir enmiendas. Luego volver¨¢ a la C¨¢mara Baja, en la que se votar¨¢ si se aceptan o no los cambios del Senado.?

En esta nueva normativa, las entidades ya no podr¨¢n retener al cliente hipotecario contra su voluntad. En 2007 se reescribi¨® la legislaci¨®n para que si el banco igualaba la oferta de otra entidad, el cliente tuviese forzosamente que permanecer y no pudiese subrogar la hipoteca. De poco importaba que estuviese a disgusto con el trato que le dispensaba el banco. Ahora, gracias a una enmienda de Ciudadanos introducida con el apoyo del resto de partidos y la abstenci¨®n de PSOE y Podemos, el cliente podr¨¢ irse de todas formas.

Una vez aceptada la subrogaci¨®n por el consumidor, la entidad acreedora tendr¨¢ siete d¨ªas naturales para certificar el importe que se ha de subrogar. A partir de ah¨ª habr¨¢ un plazo de 15 d¨ªas naturales en los que la entidad que tiene la hipoteca pueda contraofertar. Transcurrido ese periodo, se podr¨¢ otorgar la escritura de subrogaci¨®n.

¡°En la redacci¨®n de 1994 el deudor era el que ten¨ªa la iniciativa. Si decid¨ªa que quer¨ªa irse con la hipoteca a otra parte el banco pod¨ªa intentar convencerle por las buenas, pero en ning¨²n caso ten¨ªa medios legales para impedirlo¡±, reza la justificaci¨®n de la enmienda. Y a?ade que en 2007 se ¡°arrebat¨® al deudor el derecho a decidir y se le dio a su banco¡±.

¡°Ciudadanos present¨® esta enmienda para aumentar la competencia entre las entidades, lo que redundar¨¢ positivamente en los ciudadanos porque bajar¨¢n los tipos de inter¨¦s que las entidades cobran¡±, sostiene Rodrigo G¨®mez Garc¨ªa, diputado de Ciudadanos y uno de los ponentes de la ley.

Examen de solvencia

La ley incluye, adem¨¢s, la obligaci¨®n de que la entidad haga un examen de solvencia del cliente para evitar los excesos. De esta forma, se busca que no se abuse de los avales o de hipot¨¦ticos incrementos de los precios de la vivienda para relajar las condiciones en las que se prestan. La responsabilidad del cr¨¦dito pasa as¨ª al banco. Lo cual no significa que el hipotecado no pueda impagar por algo sobrevenido como una situaci¨®n de paro. Pero se trata de que se identifique en el momento de la contrataci¨®n si ya era evidente que el prestatario no pod¨ªa devolver el cr¨¦dito. Sin embargo, a pesar de que PSOE, Podemos y Ciudadanos ten¨ªan enmiendas que fijaban sanciones para la entidad si no evaluaban bien la solvencia, estas al final se han omitido.

¡°La crisis se origin¨® en el cr¨¦dito irresponsable. Sin embargo, se insiste en centrar la atenci¨®n en los abusos en la contrataci¨®n bancaria y no se centra en el aspecto clave de la evaluaci¨®n de la solvencia y las sanciones contractuales por su contravenci¨®n¡±, explica la catedr¨¢tica Matilde Cuena.

Por otra parte, esta legislaci¨®n abaratar¨¢ los reembolsos anticipados de la hipoteca; facilitar¨¢ el cambio del tipo variable al fijo; rebajar¨¢ los intereses de demora, y pondr¨¢ condiciones m¨¢s dif¨ªciles para el inicio del embargo. Tambi¨¦n busca que notarios y registradores aseguren la transparencia y eviten la inclusi¨®n de cl¨¢usulas abusivas. Proh¨ªbe que la banca retribuya a sus trabajadores en funci¨®n del n¨²mero de hipotecas concedidas. Limita la venta de productos vinculados al cr¨¦dito hipotecario. Y se establece que el banco sufrague todos los costes del pr¨¦stamo salvo la tasaci¨®n.