Las casas pasivas reviven con la pandemia por su gran eficiencia energ¨¦tica
En el ¨²ltimo a?o ha aumentado la demanda de estas viviendas, ideadas por un f¨ªsico alem¨¢n hace tres d¨¦cadas
La pandemia ha evidenciado lo deficientes que son muchas de las viviendas que se han construido en Espa?a durante d¨¦cadas. Millones de almas han pasado los meses de confinamiento en coladeros de energ¨ªa, pisos con problemas de ventilaci¨®n y filtraci¨®n y una mala calidad del aire interior.
Sin embargo, hay otra forma de hacer casas. Han pasado tres d¨¦cadas desde que Wolfgang Feist, f¨ªsico y astr¨®nomo alem¨¢n, construyera la primera vivienda pasiva del mundo en 1991, la suya, en la ciudad de Darmstadt, Alemania. Hoy es uno de los expertos m¨¢s reconocidos del mundo en construcci¨®n eficiente. Feist se dio cuenta de que m¨¢s de un tercio del consumo de energ¨ªa proced¨ªa de la calefacci¨®n. Y se puso manos a la obra: estudi¨® la distribuci¨®n de calor, las ventanas, techos y sistemas de ventilaci¨®n... Su casa logr¨® consumir un 87% menos de energ¨ªa que una convencional.
Las viviendas pasivas tienen un alto grado de aislamiento de la envolvente sin puentes t¨¦rmicos y una buena estanqueidad del aire exterior que consigue garantizar la m¨ªnima demanda energ¨¦tica. ¡°Es sorprendente que lo que los vir¨®logos recomiendan ahora sea casi exactamente lo que hemos estado diciendo durante 30 a?os. Siempre tuvimos en mente la salud y el bienestar de los ocupantes en los primeros pasos del desarrollo¡±, contesta Feist por correo electr¨®nico desde su casa en Darmstadt, en la que reside con su familia.
Para el fundador del Passive House Institute y del est¨¢ndar internacional (y voluntario) con el que se certifican los inmuebles que cumplen su predicado, hay paralelismos entre la covid-19 y la crisis clim¨¢tica que se cierne sobre el mundo. Uno es que es innegociable la eficiencia energ¨¦tica en los edificios.
En eso trabaja la Uni¨®n Europea desde 2012, cuando desarroll¨® una directiva que obliga a que todas las nuevas construcciones residenciales sean de consumo de energ¨ªa casi nulo desde enero de 2021. Tambi¨¦n en Espa?a. Esto est¨¢ contribuyendo a despertar un mayor inter¨¦s por este tipo de viviendas pasivas y por certificados como el de Feist, aunque hay que recordar que no es el ¨²nico que existe y al que pueden recurrir arquitectos y promotores.
Poniendo el foco en el sello del f¨ªsico alem¨¢n, en el mundo hay m¨¢s de 29.000 inmuebles certificados, lo que representa una superficie de casi 2,7 millones de metros cuadrados. Aqu¨ª se incluyen viviendas, escuelas, guarder¨ªas y oficinas. En Fr¨¢ncfort se est¨¢ construyendo el primer hospital pasivo.
En Espa?a, la primera passivhaus (del alem¨¢n casa pasiva) se edific¨® en Moraleda de Zafayona (Granada) en octubre de 2010. Desde entonces, ¡°hay un n¨²mero creciente de proyectos y muchos arquitectos e ingenieros comprometidos en Espa?a que est¨¢n haciendo un muy buen trabajo¡±, se?ala Feist.
¡°En los ¨²ltimos dos a?os se ha certificado la misma superficie que en los ocho anteriores y se duplicar¨¢ en los dos a?os siguientes¡±, dice Bruno Guti¨¦rrez Cuevas, presidente de la Plataforma de Edificaci¨®n Passivhaus, la segunda asociaci¨®n por n¨²mero de socios (m¨¢s de 800) en el mundo, solo por detr¨¢s de la alemana. Con la pandemia, ¡°muchas personas han descubierto que existen formas de construir que permiten ahorrar energ¨ªa y aseguran un mayor confort interior y por este motivo recibimos m¨¢s consultas que tiempo atr¨¢s¡±, a?ade Guti¨¦rrez. Aunque avisa de un incremento en los fraudes por parte de empresas que ofrecen passivhaus sin que se cumplan los requisitos.
En Espa?a hay m¨¢s de 158.000 metros cuadrados certificados repartidos en 150 proyectos. La previsi¨®n para los pr¨®ximos dos a?os es alcanzar m¨¢s de 387.000 metros y 307 inmuebles. De entre todos ellos destaca una vivienda en el municipio de Sant Andreu de la Barca (Barcelona). Dicen de ella que es la m¨¢s sostenible de Europa al tener la certificaci¨®n Passivhaus Premium (del Passive House Institute) y el sello 5 hojas Verde (del Green Building Council Espa?a). En la actualidad solo existen 19 viviendas en el mundo certificadas con el primero y un prototipo del segundo.
¡°Dentro de sus cuatro paredes el ruido de los coches es imperceptible, no hay corrientes de aire y la temperatura no var¨ªa de una habitaci¨®n a otra. Es una casa con una temperatura interior constante de entre 22 y 24 grados en la que siempre reina el silencio y en la que ni siquiera se escucha el ruido de la lluvia o la tormenta¡±, explica Stefano Carlo Ascione, arquitecto y especialista en construcci¨®n pasiva de la empresa Arquima. La casa, hecha con un sistema industrializado, genera cuatro veces m¨¢s energ¨ªa de la que necesita para funcionar gracias a placas fotovoltaicas. ¡°Tiene un ahorro energ¨¦tico de m¨¢s del 90% respecto a viviendas construidas seg¨²n el C¨®digo T¨¦cnico de Edificaci¨®n (CTE) de 2006 y del 50% con la actualizaci¨®n del CTE del 1 de enero¡±, seg¨²n Jos¨¦ Antonio Gonz¨¢lez, fundador de Arquima.
Viviendo en coladeros
Aunque el verdadero reto en Europa est¨¢ en lo que ya se ha construido, en millones de viviendas demasiado ineficientes desde el punto de vista energ¨¦tico. El 75% del parque de la UE lo es. Esto es precisamente lo que est¨¢ investigando Feist estos d¨ªas en su casa de Darmstadt. ¡°Estamos estudiando la aplicaci¨®n de la tecnolog¨ªa de eficiencia energ¨¦tica, especialmente para la modernizaci¨®n de edificios existentes. Hay un enorme potencial para mejorar la eficiencia en este campo¡±.
En Espa?a, el Gobierno tiene previsto invertir 5.300 millones de euros de los fondos europeos en rehabilitar el parque inmobiliario espa?ol. La tarea es ingente. Los propietarios espa?oles han puntuado con un 6,8 sobre 10 la calidad de vida en sus viviendas en 2020, seg¨²n el estudio Quiero Vivir Mejor, elaborado por la Asociaci¨®n Nacional de Distribuidores de Cer¨¢mica y Materiales de Construcci¨®n (Andimac). No es un suspenso, pero evidencia que el grado de satisfacci¨®n de los espa?oles con sus viviendas es insuficiente. Cerca del 40% de las viviendas espa?olas no ayudan al bienestar de sus moradores.
A Andimac no le sorprende este descontento, dado el envejecimiento del parque espa?ol ¡ªse deteriora a un ritmo anual del 2%, mientras la rehabilitaci¨®n afecta solo al 0,15% del mismo¡ª. El 83% de las viviendas tiene m¨¢s de 18 a?os, lo que tiene su reflejo en t¨¦rminos de confort y bienestar. Las categor¨ªas peor valoradas han sido el confort ac¨²stico y el t¨¦rmico y la salubridad. ¡°Son los factores cuyo valor se sit¨²a por debajo de la media¡±, dicen en la asociaci¨®n. Despu¨¦s, el dise?o de espacios, la accesibilidad, el ahorro energ¨¦tico y el confort lum¨ªnico.
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