Ganadores y perdedores de ampliar el c¨®mputo de las pensiones

El Gobierno lleva varios meses d¨¢ndole muchas vueltas al aumento del periodo de c¨®mputo de las pensiones como una forma de reducir el gasto, como reclama Bruselas. Tanto la vicepresidenta primera, Nadia Calvi?o, como el ministro de Seguridad Social, Jos¨¦ Luis Escriv¨¢, insisten en que no hay ninguna novedad y la pol¨¦mica est¨¢ hinchada, pero lo cierto es que el asunto ha generado discusiones internas muy fuertes en el Ejecutivo y lo sigue haciendo, adem¨¢s de tensiones con los sindicatos.

Todo empez¨® cuando, en diciembre de 2020, Escriv¨¢ introdujo en el circuito interno de la Comisi¨®n Delegada para Asuntos Econ¨®micos (CDGAE), que preside Calvi?o, un documento como borrador del Plan de Reformas, que deb¨ªa enviarse a Bruselas con la reforma de las pensiones, que era claro: el texto planteaba un aumento del periodo de c¨®mputo de 25 a 35 a?os y calculaba el ahorro que eso supondr¨ªa en el gasto total de pensiones: un 5,45% de reducci¨®n media. En un segundo borrador, que envi¨® la siguiente semana a la CDGAE, los t¨¦cnicos de Seguridad Social afinaban el c¨¢lculo y elevaban esa reducci¨®n ¡°de la pensi¨®n media inicial¡± a un 6,3%.

El texto explicaba claramente que todas las ampliaciones del periodo de c¨®mputo, desde los dos a?os que estaban vigentes en los ochenta hasta los 25 actuales, han supuesto reducciones del dinero que potencialmente habr¨ªan recibido los pensionistas de no haberlo aumentado. Aunque hay excepciones de jubilados a los que podr¨ªa beneficiarles una ampliaci¨®n as¨ª, la media general baja, y ese es el principal motivo por el que se plantea una reforma de este tipo. Por eso, en el texto que estaba preparado como borrador para enviarlo a Bruselas, el ministerio de Escriv¨¢ se?alaba que la ¨²ltima reforma de 2011, que elev¨® el periodo de c¨®mputo de 15 a 25 a?os, est¨¢ afectando, por ejemplo, al 52% de los pensionistas que se dieron de alta en 2019 con una reducci¨®n media de la cuant¨ªa de un 3,9%.

Cuando este documento lleg¨® a Unidas Podemos, el socio de la coalici¨®n se indign¨® ante una medida que ni est¨¢ en el Pacto de Toledo ni hab¨ªa sido pactado en el acuerdo de Gobierno. Tambi¨¦n los sindicatos se molestaron por algo que Escriv¨¢ nunca lleg¨® a explicar. As¨ª que, en la siguiente versi¨®n que se envi¨® a la CDGAE, desapareci¨® por completo esta referencia al aumento a los 35 a?os, y qued¨® una menci¨®n muy gen¨¦rica, que es la que se envi¨® a Bruselas, sobre el aumento del periodo de c¨®mputo con la posibilidad de que cada pensionista elija sus mejores a?os.

Despu¨¦s de conocerse la nueva redacci¨®n pactada con Bruselas, tanto en Unidas Podemos como en los sindicatos temen que Escriv¨¢ quiera recuperar la idea inicial, aunque ser¨ªa complicado porque hay poco espacio pol¨ªtico en el Congreso para aprobar una ampliaci¨®n sin m¨¢s del periodo de c¨®mputo a 35 a?os. Tanto en Unidas Podemos como los sindicatos y tambi¨¦n algunos sectores del PSOE, que recelan de esta posible reforma, se?alan que hay un a?o entero para negociarla y aseguran que habr¨¢ que hacer un paquete global en el que s¨ª se podr¨ªa alcanzar un pacto como el de 2011, pero a cambio de que el Ejecutivo concediera cuestiones que defienden los sindicatos y sectores progresistas como el aumento de las cotizaciones de los sueldos m¨¢s altos, que ahora est¨¢n muy limitadas como tambi¨¦n lo est¨¢n las pensiones m¨¢ximas, en un sistema que es m¨¢s igualitario que el de otros pa¨ªses a la hora del pago pero tambi¨¦n menos redistributivo a la hora del ingreso.

Una rebaja de hasta el 8,8%

El acuerdo suscrito con Bruselas para elevar el periodo de c¨¢lculo de las pensiones suscita opiniones encontradas no solo dentro de la esfera pol¨ªtica. Tambi¨¦n entre economistas y acad¨¦micos. Todos ellos, sin embargo, reconocen que los efectos de este incremento deja beneficiados y perjudicados, aunque no siempre a partes iguales. ¡°Los m¨¢s damnificados de un incremento del tiempo de c¨®mputo ser¨ªan, principalmente, aquellos trabajadores con carreras laborales cortas¡±, analiza Enrique Devesa, profesor de Econom¨ªa Financiera y Actuarial de la Universidad de Valencia e investigador del Instituto Valenciano de Investigaciones Econ¨®micas (IVIE). Seg¨²n sus c¨¢lculos, ampliar el periodo de c¨®mputo de 25 a 35 a?os supondr¨ªa ¡°una disminuci¨®n del 8,8%¡± en la pensi¨®n final. Por encima del 6,3% que hab¨ªa calculado inicialmente Seguridad Social, y que despu¨¦s rebaj¨® al 5,45%

El problema para aquellos con trayectorias cortas radica, seg¨²n Devesa, en que para alcanzar ese c¨®mputo de 35 a?os ser¨ªa necesario rellenar las denominadas lagunas de cotizaci¨®n (los a?os no trabajados), y para ello se rellenan con la base m¨ªnima (o el 50% una vez cubiertos determinados meses). ¡°A ellos la pensi¨®n final se les podr¨ªa rebajar hasta en un 14,9%¡±, concreta Devesa. En sus estudios, realizados a partir de la muestra continua de vidas laborales (MCVL) de 2019 ¨D¡°y cuyos resultados apenas habr¨¢n sufrido alteraciones en 2020¡å, incide el acad¨¦mico¨D, tambi¨¦n se determina que ante una hipot¨¦tica subida las mujeres pensionistas resultar¨ªan m¨¢s afectadas (su merma ser¨ªa del 10,3%) que los hombres (-7,9%). ¡°Los trabajadores aut¨®nomos ser¨ªan otro nicho de afectados porque tradicionalmente suelen cotizar por una base muy baja y en el menor n¨²mero de a?os posible¡±, remacha Devesa.

En cuanto a la proyecci¨®n que la disminuci¨®n estimada por el Gobierno del 5,45% tendr¨ªa sobre las cuentas, el estudio del IVIE se?ala que, de producirse la ampliaci¨®n de 25 a 35 a?os a lo largo de un periodo transitorio entre 2023 y 2032, ¡°el m¨¢ximo ahorro¡± se obtendr¨ªa ¡°en 2051 con un 0,88% sobre el PIB¡±.

Por contra, los futuros pensionistas que saldr¨ªan beneficiados ser¨ªan aquellos que hubieran visto mermada su retribuci¨®n o se hubieran quedado desempleados en el tramo final de sus trayectorias. En este caso, al extenderse el periodo de c¨¢lculo, entrar¨ªan en juego los mejores a?os de sus cotizaciones. ¡°Creo que ser¨ªa una modificaci¨®n que ir¨ªa en la direcci¨®n correcta¡±, manifiesta Jos¨¦ Ignacio Conde-Ruiz, profesor de Fundamentos del An¨¢lisis Econ¨®mico en la Universidad Complutense de Madrid, y subdirector de la Fundaci¨®n de Estudios de Econom¨ªa Aplicada (Fedea). En su opini¨®n, el sistema actual de pensiones ¡°no es justo¡±, porque no entrega el mismo valor a todos los a?os trabajados, y aboga por dirigirlo hacia un modelo de cuentas nocionales en el que cada trabajador realiza sus aportaciones derivadas de las cotizaciones en una cuenta personal virtual (algo que ya se realiza en Suecia, Italia o Polonia).

En UGT consideran que esta alteraci¨®n afectar¨ªa a los jubilados ¡°m¨¢s negativamente que a favor¡±, como analiza Cristina Est¨¦vez, secretaria de pol¨ªtica institucional y pol¨ªticas territoriales; aunque aseguran que ni siquiera es una medida que est¨¦ sobre la mesa. ¡°Tenemos un calendario de reuniones y temas a tratar hasta julio de 2022, y no est¨¢ programado en ning¨²n momento¡±, indica Est¨¦vez. La negativa a negociar esta cuesti¨®n tampoco entra dentro de la hoja de ruta de CC OO. ¡°No se ha hablado ni una sola palabra hasta el momento. En los pr¨®ximos meses en la segunda fase de la negociaci¨®n las prioridades son la cotizaci¨®n por ingresos reales de las bases m¨¢ximas de cotizaci¨®n, aumentar las pensiones m¨ªnimas y reducir la brecha de g¨¦nero¡±, asevera Carlos Bravo, secretario de pol¨ªticas p¨²blicas y protecci¨®n social de CC OO.