La inflaci¨®n aviva la desigualdad: golpea un 30% m¨¢s a los hogares con menos ingresos

La inflaci¨®n se suele comparar a un impuesto silencioso que erosiona la capacidad de compra, m¨¢xime cuando los precios crecen muy por encima de los salarios, como lleva ocurriendo de forma imparable en los ¨²ltimos meses. El resultado es que est¨¢ m¨¢s caro todo, pero no para todos con la misma intensidad. Entre enero y mayo, el poder adquisitivo de los hogares m¨¢s pobres se ha reducido un 30% m¨¢s que el de los m¨¢s ricos. Las clases medias tambi¨¦n est¨¢n sufriendo el golpe: su capacidad de ahorro ya no aguanta los mismos niveles de consumo.

Esta es una de las conclusiones del informe La Desigualdad no se va de vacaciones, publicado este mi¨¦rcoles por Oxfam Interm¨®n, que alerta sobre un aumento de la desigualdad. Cuando parec¨ªa verse la luz al final del t¨²nel de la pandemia, la guerra en Ucrania ha dado otra estocada a la econom¨ªa provocando un sinf¨ªn de desajustes que se est¨¢n cebando con las clases m¨¢s bajas. Ahora, lo m¨¢s acuciante es el alza de los precios energ¨¦ticos, que pese a las medidas de alivio puestas en marcha por el Gobierno ¨Dcomo el tope al gas, la bonificaci¨®n a los carburantes y la reducci¨®n de la fiscalidad¨D contin¨²an su escalada y ya han contagiado el resto de la cesta de la compra.

Entre enero y mayo, los precios subieron un 8,1% de media, de acuerdo con el INE, y se dispararon un 10,2% en junio, la mayor alza en 37 a?os, con una inflaci¨®n subyacente ¨Dque no incluye energ¨ªa y alimentos, los elementos m¨¢s vol¨¢tiles¨D del 5,5%. La consecuencia de estos repuntes es que hay que gastar m¨¢s para mantener el mismo patr¨®n de consumo. Entre enero y mayo, el encarecimiento ha sido de un 11% para los hogares m¨¢s acomodados, y de un 14% para los m¨¢s humildes. ¡°Los intensos aumentos de precios afectan de un modo m¨¢s intenso a los hogares con menor renta, pues deben destinar una mayor parte de sus limitados ingresos a aquellos productos que m¨¢s se encarecen, esto es, la electricidad, el gas, los carburantes y los alimentos¡±, asevera el informe de la ONG.

Es suficiente con echar un vistazo a la variaci¨®n anual de los precios de las distintas categor¨ªas de bienes y servicios: la que engloba vivienda y suministros ¨Dagua, electricidad, gas y otros combustibles¨D repunt¨® un 17,5% en mayo en comparaci¨®n con el mismo periodo de 2021 ¨Del ¨ªndice general lo hizo un 8,7% ese mes¨D, el transporte un 14,9%, y un 11% los alimentos y las bebidas no alcoh¨®licas. Son todos productos de primera necesidad, ¡°dif¨ªcilmente sustituibles¡±, que los hogares con menores ingresos consumen en una mayor proporci¨®n de su renta y que han llegado a experimentar subidas de hasta el 30% en funci¨®n del mes. En cambio, el encarecimiento de restaurantes y hoteles u ocio y cultura fue en mayo del 6,3% y 2,3%, respectivamente. ¡°Un hogar puede renunciar a irse de vacaciones, pero dif¨ªcilmente puede renunciar a encender la calefacci¨®n durante el invierno o a comprar fruta y verdura fresca si quiere mantener una dieta m¨ªnimamente saludable¡±, abunda el informe.

Destaca la losa que supone el encarecimiento de electricidad, gas y carburantes. El decil con menores ingresos ¨Dmenos de 6.600 euros¨D destin¨® en el primer trimestre del a?o casi un 35% de su renta, de media, a pagar las facturas energ¨¦ticas, m¨¢s del doble que el a?o anterior ¨Dun 10,7% en el caso del decil de m¨¢s ingresos, que tambi¨¦n ha registrado un repunte muy intenso¨D. Es m¨¢s: cerca uno de cada cinco hogares que conforman el segmento m¨¢s pobre us¨® m¨¢s de la mitad de sus ingresos para pagar la factura energ¨¦tica, y el golpe parece haber embestido tambi¨¦n a muchos hogares con mayores ingresos.

La inflaci¨®n tambi¨¦n reduce la capacidad de ahorro, y no solo de los hogares m¨¢s pobres. ¡°Si antes de la subida de precios casi la mitad de los hogares espa?oles pod¨ªa ahorrar (hogares dentro de los cinco deciles con mayores ingresos), tras la subida de precios, estimamos que tan solo tres de cada diez hogares pueden hacerlo¡±, resume el informe, que se?ala como este dato podr¨ªa traducirse en un aumento de la brecha entre ricos y pobres.

Respuesta a la emergencia

Tanto la pandemia como la crisis energ¨¦tica est¨¢n golpeando con vehemencia a unos y beneficiando a otros: los milmillonarios han aumentado desde el inicio de la crisis sanitaria, y determinados sectores econ¨®micos ha engordado sus beneficios. Entre ellos est¨¢n las compa?¨ªas energ¨¦ticas: las ganancias de las cuatro mayores empresas espa?olas crecieron de manera conjunta un 34% entre 2020 y 2021. Por ello, Oxfam propone gravar los llamados beneficios ca¨ªdos del cielo, medida que el Gobierno ha prometido implementar, y aplicarla tambi¨¦n a otros sectores con beneficios r¨¦cord, como farmac¨¦uticas o tecnol¨®gicas.

Esta es una de las 12 medidas que recomienda la ONG para hacer frente a la emergencia y proteger a los m¨¢s vulnerables. Tambi¨¦n sugiere, en el corto plazo, mejorar el acceso y cuant¨ªa del ingreso m¨ªnimo vital y los mecanismos de apoyo de solvencia a las pymes y aut¨®nomos, poniendo el acento en la transici¨®n energ¨¦tica. Las dem¨¢s medidas abarcan distintos aspectos, desde la mejora de las prestaciones sociales a una pol¨ªtica de rentas que prime los sueldos m¨¢s bajos, el fomento del empleo, la subida del salario m¨ªnimo o la mejora de las pol¨ªticas de cuidado, de integraci¨®n y asilo. Asimismo, sugiere cambios fiscales como la armonizaci¨®n del impuesto sobre el patrimonio o la inclusi¨®n de un nuevo tramo del IRPF para rentas altas.

¡°La inflaci¨®n s¨ª entiende de clases sociales. El impacto de la subida de precios es fundamentalmente diferencial, y esto es importante para intentar pensar qu¨¦ tipo de medidas necesitamos¡±, se?ala Ernesto Garc¨ªa, coordinador de Recuperaci¨®n Justa del Programa Desigualdad Cero de Oxfam. ¡°Creemos que hay que desarrollar medidas tanto a corto como a medio plazo, porque no se trata solo de resistir el impacto sino de avanzar en un modelo m¨¢s justo y sostenible¡±.