El viento y el agua llevan el precio de la luz en noviembre a m¨ªnimos de casi tres a?os
Las renovables suman casi las dos terceras partes de la electricidad generada en noviembre. Para dar con un precio m¨¢s bajo en el mercado mayorista hay que remontarse a marzo de 2021, antes de la crisis energ¨¦tica
Una de las grandes normas no escritas del mercado el¨¦ctrico sigue cumpli¨¦ndose a rajatabla: a mayor peso de las renovables, menor precio de la luz. Y viceversa. La electricidad promedi¨® 62 euros por megavatio hora (MWh) en el mercado el¨¦ctrico espa?ol en noviembre (a falta de un d¨ªa para terminar el mes), un 30% menos que en octubre y casi la mitad que un a?o atr¨¢s. El und¨¦cimo mes del a?o fue, as¨ª, el m¨¢s barato en casi tres a?os: desde marzo de 2021, cuando ni se intu¨ªa el apocalipsis energ¨¦tico que estaba por llegar y el precio mayorista (del que dependen los clientes con contrato regulado) rondaba los 45 euros.
A falta de unas pocas horas para que termine el mes, en noviembre las renovables aportaron casi el 63% de la producci¨®n total de electricidad en Espa?a, un r¨¦cord hist¨®rico. De esa cifra, algo m¨¢s de la mitad (el 33,5%) provino de la e¨®lica, mientras que casi un 18% correspondi¨® a la hidr¨¢ulica, que duplic¨® su peso respecto al acumulado en lo que va de 2023 y pis¨® los talones a la nuclear. La solar fotovoltaica, entretanto, roz¨® el 10%, casi tanto como los ciclos combinados (las centrales en las que se quema gas para obtener electricidad).
¡°En la primera quincena del mes se obr¨® el milagro de sustituir el gas natural por agua y viento¡±, resume ilustrativamente Francisco Valverde, analista independiente del mercado el¨¦ctrico. El buen tono general de los embalses del noroeste de la Pen¨ªnsula, tras las recientes lluvias, fue particularmente importante: son los que m¨¢s pesan en la matriz espa?ola de generaci¨®n hidroel¨¦ctrica. ¡°En ning¨²n noviembre se hab¨ªa generado tanta electricidad con agua en Espa?a¡±, agrega.
La segunda mitad del mes ha sido un poco peor en el mercado el¨¦ctrico espa?ol: la remisi¨®n del viento y de las lluvias ¡ªlos dos principales factores que hab¨ªan permitido la fuerte ca¨ªda de precios en las semanas precedentes¡ª han obligado a quemar algo m¨¢s de gas y, en consecuencia, ha aumentado el precio que pagan uno de cada tres hogares, los adheridos al PVPC. Sin embargo, los tres primeros cuartos del mes, en los que el agua y el viento marcaron la pauta, imprimieron una tendencia dif¨ªcil de revertir.
¡°En noviembre, la producci¨®n e¨®lica ha sido superior a la media anual; la hidroel¨¦ctrica ha tenido un comportamiento espectacular por los desembalses de agua y la solar se ha comportado bastante bien, con m¨¢ximos puntuales en potencia de m¨¢s de 12.000 megavatios, que es casi tanto como el r¨¦cord hist¨®rico del a?o pasado pese a que en noviembre hay menos horas de sol¡±, aquilata Xavier Cugat, gestor de proyectos renovables y divulgador energ¨¦tico. ¡°Y eso que hemos tenido nucleares paradas: durante cuatro d¨ªas, a principios de mes, tuvimos el equivalente a cuatro reactores sin producir¡±, sentencia.
M¨¢s barata que en el resto de Europa
La electricidad es el componente energ¨¦tico de mayor peso en el ?ndice de Precios al Consumo (IPC, cuyo dato adelantado se dar¨¢ a conocer este mi¨¦rcoles): 3,5%, frente al 1% del gas, el 2,6% del gas¨®leo y el 2,1% de la gasolina. El abaratamiento de la luz y el de los carburantes, que encadenan seis semanas a la baja, deber¨ªan presionar a la baja el ¨ªndice en su conjunto. No solo por su peso relativo ¡ªque, aunque rese?able, no es alt¨ªsimo¡ª, sino por el efecto arrastre que tiene sobre otros sectores intensivos en energ¨ªa.
En noviembre, el mercado el¨¦ctrico espa?ol (y el portugu¨¦s) fue uno de los m¨¢s baratos del Viejo Continente, con la ¨²nica excepci¨®n de los escandinavos, muy influidos por su enorme capacidad de generaci¨®n hidroel¨¦ctrica a bajo coste, que les hace jugar ¡ªen palabras de Valverde¡ª ¡°en la liga de los extraterrestres¡±. El precio espa?ol contrasta, as¨ª, con los m¨¢s de 80 euros por MWh de Francia, los alrededor de 90 de Alemania, Pa¨ªses Bajos y B¨¦lgica. Y, sobre todo, con los casi 120 de Italia, seg¨²n las cifras agregadas por Red El¨¦ctrica de Espa?a (REE).
Se?ales de recuperaci¨®n de la demanda
A diferencia de en otras ocasiones ¡ªcomo en los fines de semana y festivos, sobre todo¡ª, en las que las bajadas de precios vienen guiadas por descensos importantes en la demanda, en noviembre ese lado de la ecuaci¨®n no ha influido para nada en el resultado final. Al contrario: de haber tenido alg¨²n efecto, ha sido en contra. Tras muchos meses de consumo el¨¦ctrico alica¨ªdo ¡ªpr¨¢cticamente desde el inicio de la crisis energ¨¦tica¡ª, en noviembre aument¨® un 2,6% en la Espa?a peninsular ya corregida por calendario y temperaturas.
Aunque ligero, ese repunte invita a pensar en un cambio de tendencia en los pr¨®ximos meses. La actividad tur¨ªstica sigue fuerte y apunta a una paulatina desestacionalizaci¨®n. Los parones en la industria electrointensiva por los altos precios empiezan a ser residuales. Pese al retraso respecto al resto de grandes pa¨ªses de la eurozona, la electrificaci¨®n empieza a abrirse paso en el parque m¨®vil y en las calefacciones, con la aerotermia como tecnolog¨ªa estrella. Es solo el principio de lo que deber¨ªa estar por llegar en los pr¨®ximos a?os, en los que las previsiones apuntan a un fuerte aumento en la demanda de electricidad tras varios a?os de desacoplamiento del PIB.
¡°Se empieza a ver algo distinto, incipiente. Ahora hay que ver si se confirma en noviembre¡±, conf¨ªa Cugat. ¡°Ser¨ªa interesante tanto por lo que dice del crecimiento econ¨®mico como por lo que dice de la electrificaci¨®n¡±.
Este ligero aumento de la demanda se produce, adem¨¢s, a pesar del empuje de los autoconsumos dom¨¦sticos industriales. Aunque en el ¨²ltimo a?o el crecimiento de los paneles en tejados se ha frenado respecto al hist¨®rico 2022, cualquier nueva instalaci¨®n reduce necesariamente el consumo del sistema en las horas solares, en las que esa empresa u hogar deja de demandar electricidad de la red y pasa a abastecerse ¡ªtotal o parcialmente¡ª con su propia producci¨®n.
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