El precio de los alimentos se enfr¨ªa: se moderan al 2,5% en agosto, la menor tasa en casi en tres a?os

El verano ha dejado algo m¨¢s que turistas para el pa¨ªs, tambi¨¦n ha tra¨ªdo una notable desaceleraci¨®n de la inflaci¨®n, seg¨²n ha confirmado este jueves el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE). El ?ndice de Precios al Consumo cerr¨® agosto en el 2,3%, cinco d¨¦cimas menos respecto a julio y la tasa m¨¢s baja en un a?o, pese a que sea una d¨¦cima m¨¢s que el dato adelantado hace dos semanas. La subyacente, que excluye los alimentos frescos y la energ¨ªa por ser los m¨¢s vol¨¢tiles, tambi¨¦n ha experimentado un ligero retroceso, situ¨¢ndose en un 2,7%. Los datos son un indicio claro de que Espa?a se acerca al final de la crisis de precios que ha afectado a los hogares durante los ¨²ltimos dos a?os. En tan solo dos meses, la tasa ha bajado m¨¢s de un punto. Es especialmente significativa la bajada del coste de los alimentos, cuya tasa se ha situado en el 2,5%, la menor en casi tres a?os ¨Ddesde octubre de 2021¨D. Desde el Ministerio de Econom¨ªa aseguran que ¡°esta reducci¨®n est¨¢ permitiendo acercar la inflaci¨®n de los alimentos al ¨ªndice general, gracias a las medidas de apoyo adoptadas¡± por el Ejecutivo.

Camilo Ulloa, economista de BBVA Research, admite que el reciente dato ha sido una sorpresa positiva, superando por segundo mes consecutivo sus expectativas. A principios de mes, ellos proyectaban una tasa general del 2,5%, pero el dato final ha sido menor, pese a la leve correcci¨®n de una d¨¦cima que ha hecho el INE en el dato definitivo del mes ¡ªoriginalmente situ¨® la inflaci¨®n general en el 2,2%¨D. La moderaci¨®n en los precios de la energ¨ªa y los alimentos no elaborados ha sido clave, especialmente en sectores como el aceite, que ha mostrado una mejora significativa debido a la disminuci¨®n de los efectos de la sequ¨ªa. Aunque el oro l¨ªquido se ha encarecido un 25% en t¨¦rminos interanuales, si se observa la evoluci¨®n reciente, el resultado es que lleva cuatro meses seguidos de bajadas, lo que no ocurr¨ªa desde el verano de 2022. Adem¨¢s, entre julio y agosto el precio cay¨® un 1,7%. Por otra parte, los productores agr¨ªcolas, cuyos m¨¢rgenes son m¨¢s sensibles a los shocks de precios, han visto un alivio con la ca¨ªda de los precios de los carburantes, lo que ha permitido trasladar esa bajada tambi¨¦n a los alimentos.

En efecto, uno de los motores principales de esta desaceleraci¨®n en agosto ha sido el sector energ¨¦tico. Un reflejo de ello es que los combustibles l¨ªquidos se han abaratado un 9,8% y el gas¨®leo un 9,0% respecto a agosto de 2023. Manuel Hidalgo, economista y profesor de la Universidad Pablo de Olavide, recuerda que en las ¨²ltimas semanas, el barril de Brent, de referencia en Europa, ha bajado incluso por debajo de los 70 d¨®lares, borrando de un plumazo las cotas superiores a los 100 d¨®lares que hubo a ra¨ªz de la invasi¨®n rusa de Ucrania. ¡°Los precios de este a?o del barril han abarato el combustible en pleno verano y lo mejor es que no hay se?ales de que vaya a haber un repunte significativo en el corto plazo. Por el contrario, va a mantenerse as¨ª durante un tiempo¡±, a?ade. El abaratamiento del petr¨®leo ha impactado en el coste de la gasolina, que se encuentra en niveles muy pr¨®ximos a los que hab¨ªa antes de la guerra.

La estabilidad en el sector energ¨¦tico se extiende al gas, que en este mes ha sido casi un 1% m¨¢s barato que en agosto del a?o pasado. Esto sugiere que no habr¨¢ aumentos significativos en las tarifas el¨¦ctricas, al menos desde este frente. Para Hidalgo, el contexto genera un buen entorno para que la inflaci¨®n siga cayendo en los pr¨®ximos meses. ¡°La energ¨ªa, especialmente los combustibles, seguir¨¢n siendo un factor de alivio. A esto se suma la estabilizaci¨®n del coste de los alimentos, que hasta el a?o pasado subieron considerablemente por la sequ¨ªa, el bloqueo de los cereales en el Mar Rojo y el encarecimiento de los fertilizantes, problemas que han ido desapareciendo uno a uno¡±.

La cesta de la compra, uno de los grandes protagonistas de la escalada inflacionaria, ahora registra variaciones mucho m¨¢s estables. En agosto, la tasa ha ca¨ªdo seis d¨¦cimas hasta situarse en el 2,5%, la menor cifra en casi tres a?os. Este comportamiento se debe, principalmente, a la bajada de los precios de los aceites y grasas y de las legumbres y hortalizas, frente a la subida en agosto del a?o anterior. No obstante, para Mar¨ªa Jes¨²s Fern¨¢ndez, analista s¨¦nior de Funcas, su comportamiento en los pr¨®ximos meses es una inc¨®gnita. ¡°El a?o pasado, los factores climatol¨®gicos perjudicaron enormemente el coste de estos productos. Este a?o, aunque el impacto del clima parece haber sido menor, es dif¨ªcil predecir con exactitud c¨®mo evolucionar¨¢n. Han bajado, s¨ª, pero eso no evita que sean vol¨¢tiles¡±, explica.

Los precios del turismo, sin freno

No todos los sectores muestran la misma moderaci¨®n. El turismo, que experiment¨® un auge masivo durante el verano, ha generado presiones inflacionarias en los servicios. La economista recalca que el verano ha empujado hacia arriba los precios de actividades como el alojamiento, la restauraci¨®n y otros servicios relacionados. Los vuelos nacionales, por ejemplo, han repuntado un 21% entre agosto del a?o pasado y este, siendo el segundo elemento en todo el ¨ªndice que m¨¢s se ha encarecido. Los paquetes tur¨ªsticos nacionales tambi¨¦n han repuntado un 12% y el transporte de pasajeros por mar, que son principalmente cruceros, lo han hecho un 14%.

Adem¨¢s, aunque el pa¨ªs se despide del mes en el que por antonomasia las familias viajan, lo cierto es que se trata de un motor importante en la econom¨ªa y esto no cambiar¨¢ en el medio plazo. Por lo tanto, ¡°no habr¨¢ una ca¨ªda dr¨¢stica en los precios¡±, seg¨²n analiza la economista de Funcas.

En cualquier caso, los expertos coinciden en que, a pesar de las posibles fluctuaciones en los servicios o alimentos, la tendencia general de la inflaci¨®n es favorable y est¨¢ permitiendo a las familias mantener un buen nivel de consumo. Los salarios, que est¨¢n creciendo a un ritmo del 2,9%, tambi¨¦n juegan un papel importante. ¡°Aunque el incremento salarial no es muy elevado, esa diferencia positiva respecto al IPC ayudar¨¢ a mejorar el poder adquisitivo de los hogares¡±, concluye Hidalgo. Ulloa, por su parte, pone el acento en la subyacente, que ser¨¢ m¨¢s persistente por el sector servicios. Este componente, menos influenciado por factores estacionales, muestra una rigidez a la baja que no se espera que desaparezca hasta el pr¨®ximo a?o.