Clara Sanz: ¡°Ning¨²n pa¨ªs puede permitirse el desequilibrio entre tener parados y no encontrar profesionales para cubrir los puestos de trabajo¡±

La pujanza actual de la Formaci¨®n Profesional tiene, como las monedas, dos caras: una, la que muestra c¨®mo el 41,3 % de las ofertas actuales de empleo est¨¢n dirigidas a graduados de FP; la otra, la que deja al descubierto un gran desequilibrio, ya que solo el 23,9 % de la poblaci¨®n activa posee hoy esos estudios (seg¨²n el Observatorio de la Formaci¨®n Profesional y la Encuesta de Poblaci¨®n Activa). Con una nueva norma reguladora desde marzo de 2022 e inmersa en un profundo proceso de modernizaci¨®n que intensificar¨¢ su car¨¢cter pr¨¢ctico y su empleabilidad, el futuro de estos estudios es halag¨¹e?o. ¡°La evidencia muestra que lo que m¨¢s necesita el mercado laboral son t¨¦cnicos y t¨¦cnicos superiores: mientras los candidatos provenientes de la FP no tienen ninguna dificultad para encontrar trabajo, los j¨®venes con otro tipo de titulaci¨®n (o sin ninguna) lo tienen mucho m¨¢s complicado¡±, sostiene Clara Sanz, secretaria general de Formaci¨®n Profesional. Para apuntalarlo, otro dato: solo un 13 % del desempleo juvenil corresponde a titulados de FP, lo que empieza a calar hasta el punto de que ya hay titulados universitarios que hacen una FP para ser m¨¢s empleables.

Y es que, con casi un mill¨®n de alumnos, se trata sin duda de los estudios que est¨¢n experimentado un mayor crecimiento. Solo en la ¨²ltima d¨¦cada, el n¨²mero de matr¨ªculas ha subido un 68 %, un logro que para Sanz tiene que ver con el esfuerzo conjunto de Administraciones, empresas, agentes sociales y otros organismos, y que poco a poco ha hecho que se fuera sacudiendo el estigma de mediocridad que le persigui¨® durante mucho tiempo. ¡°Actualmente se va superando, si bien es cierto que, como apuntan algunos estudios, m¨¢s de la mitad de los padres siguen considerando este tipo de estudios como de segunda categor¨ªa¡±, afirma por su parte Julio Alard, director de ciclos formativos de ESIC. La demanda sube y, sin embargo, se calcula que aproximadamente 100.000 alumnos se han quedado sin poder estudiar lo que quieren, debido a la falta de plazas p¨²blicas y a la imposibilidad de permitirse acudir para su formaci¨®n a la FP privada.

?C¨®mo explicar esta discordancia? Seg¨²n Mar¨ªa Luisa Vico, responsable de Educaci¨®n P¨²blica de UGT, ¡°el n¨²mero de plazas p¨²blicas que se ofertan sigue siendo insuficiente, y no cubre la demanda del alumnado (¡­). Adem¨¢s, algunas comunidades aut¨®nomas fueron muy cicateras a la hora de destinar los fondos que el Gobierno ha financiado para la creaci¨®n de plazas¡±. Vico se refiere al plan de modernizaci¨®n de la Formaci¨®n Profesional que el Ejecutivo de S¨¢nchez comenz¨® a implantar en 2020, y que tuvo uno de sus ejes en la ampliaci¨®n de plazas. ¡°Desde todos los sectores productivos, el clamor es que carecen de profesionales bien formados. Pero ning¨²n pa¨ªs puede permitirse ese desequilibrio entre personas en paro y, al mismo tiempo, no encontrar profesionales para cubrir los puestos de trabajo¡±, se?ala Sanz. De ah¨ª la iniciativa del Ministerio de Educaci¨®n y Formaci¨®n Profesional de financiar, en cuatro a?os y de manera extraordinaria, 200.000 plazas, ¡°m¨¢s all¨¢ de lo que cada comunidad aut¨®noma, en funci¨®n de sus necesidades, cree con sus propios recursos¡±, explica la responsable ministerial.

Parad¨®jicamente, y de forma paralela a la falta de plazas p¨²blicas, la Formaci¨®n Profesional de car¨¢cter privado ha venido experimentando en los ¨²ltimos a?os un crecimiento sustancial que, por otra parte, es m¨¢s evidente en algunas comunidades aut¨®nomas: si la media nacional de la oferta de FP p¨²blica se aproxima al 67 %, en algunas regiones como la Comunidad de Madrid cae hasta el 45 %, frente al 55 % de los centros privados (siendo la m¨¢s baja de Espa?a), mientras que en provincias como Barcelona o Guip¨²zcoa la titularidad p¨²blica o privada de los centros se reparte pr¨¢cticamente al 50 %. En el otro extremo, entre las comunidades con una mayor proporci¨®n de plazas p¨²blicas destacan Castilla-La Mancha y Canarias (con un 83,5 % de los centros), Baleares (74,2 %), Comunidad Valenciana (70,6 %) y Andaluc¨ªa (67 %).

¡°Tenemos que garantizar que haya una oferta p¨²blica suficiente para dar respuesta a la demanda de los estudiantes. Porque nadie se plantea que un estudiante que vaya a hacer Bachillerato se pueda quedar sin plaza, y tampoco puede suceder con los grados [de FP]¡±, esgrime Sanz. Vico denuncia ¡°la pr¨¢ctica sistem¨¢tica de un modelo privatizador de la FP en la Comunidad de Madrid¡±, con una permanente carencia de plazas p¨²blicas ¡°que luego se cubre con la creaci¨®n de plazas privadas y una ayuda en forma de becas, desgravaciones fiscales o cheques escolares, para que solo unos cuantos puedan entrar¡±. En total, y seg¨²n fuentes del sindicato, 34.281 personas de esta comunidad no pudieron acceder a la oferta p¨²blica, y se vieron obligados a elegir entre la FP privada (si pod¨ªan pagarla) o cursar estudios diferentes.

Grados con mayor empleabilidad

Seg¨²n el Bar¨®metro de empleabilidad y valores de la Formaci¨®n Profesional, elaborado por Ceac y Randstad Research tras encuestar a 900 alumnos universitarios y de FP, el 74 % de ellos valoraron esta ¨²ltima como una excelente opci¨®n para iniciar su carrera profesional, debido a su alto grado de empleabilidad y un acceso m¨¢s r¨¢pido al mercado laboral. El estudio destaca el incremento de plazas online y algunos de los aspectos m¨¢s valorados por los estudiantes que optan por una modalidad a distancia, como son el acceso a una bolsa de trabajo, la posibilidad de estudiar a su ritmo y el poder compaginar estudios y actividad profesional, entre otros.

Ahora bien, ?cu¨¢les son los grados que brindan una mayor tasa de empleo? De acuerdo con los datos del Ministerio de Educaci¨®n y Formaci¨®n Profesional, estos son los pertenecientes a las familias de Fabricaci¨®n Mec¨¢nica y Sanidad. Pero hay m¨¢s: ¡°A corto y medio plazo, la mayor empleabilidad se sit¨²a en las ¨¢reas tecnol¨®gicas, donde la oferta de nuevos perfiles supera con creces a la demanda¡±, afirma Alard. En esta l¨ªnea se sit¨²an los relacionados con Inform¨¢tica y Telecomunicaciones (dise?o de aplicaciones web y multiplataforma, ciberseguridad, fabricaci¨®n inteligente, redes 5G o digitalizaci¨®n del mantenimiento, entre otras titulaciones cuya empleabilidad alcanza en algunos casos el 100 %), mientras que los ciclos de Administraci¨®n y Gesti¨®n y Marketing y Publicidad tambi¨¦n resultan laboralmente interesantes. Muchas de estas formaciones est¨¢n disponibles en Emagister, plataforma que adem¨¢s ¡°ofrece descuentos especiales de hasta el 75 %, programas de becas, bolsa de empleo y financiaci¨®n para facilitar el acceso de los alumnos¡±, explica Ferr¨¢n Ferrer, CEO de la compa?¨ªa.

Mayor implicaci¨®n de las empresas

Si hay algo que sobresale de la nueva ley de Formaci¨®n Profesional, que entr¨® en vigor en abril y que llegar¨¢ a las aulas el pr¨®ximo curso acad¨¦mico, es el fortalecimiento del componente pr¨¢ctico de sus ense?anzas, llevando el car¨¢cter dual a todos sus ciclos formativos y potenciando la corresponsabilidad entre el centro de ense?anza y la empresa. As¨ª, la nueva norma distingue entre la FP General, que tendr¨¢ entre un 25 y un 35 % de formaci¨®n pr¨¢ctica en empresas, y la FP Intensiva, que subir¨¢ ese porcentaje a entre el 35 y el 50 %, adem¨¢s de cotizar a la Seguridad Social por esas pr¨¢cticas obligatorias. ¡°La ley ampl¨ªa el periodo de estancia en la empresa e incide en la calidad de la formaci¨®n que recibe el alumno durante sus pr¨¢cticas, con m¨¢s aprendizajes in situ y siempre de manera coordinada con el centro, que sigue siendo responsable de realizar la evaluaci¨®n final del alumno¡±, indican fuentes del Ministerio.

El principal escollo a la hora de desplegar este modelo tiene que ver con el elevado grado de desconocimiento, por parte de las empresas, respecto a lo que es la nueva FP dual o c¨®mo implementarla, si bien ¡°hoy las grandes empresas est¨¢n todas implicadas, y de hecho forman parte de la Alianza por la Formaci¨®n Profesional. Para promover a las pymes y a las empresas peque?as estamos haciendo una tarea con los interlocutores sociales, con el prop¨®sito de explicarles que esto no es una p¨¦rdida de tiempo para formar a otros, sino que tiene un beneficio mutuo. De lo que se trata es de convertir a los estudiantes de FP en un elemento de innovaci¨®n y de investigaci¨®n aplicada, junto a los centros de ense?anza¡±, argumenta Sanz.

Para facilitarles la tarea, la ley contempla varias posibilidades, ¡°como el agrupamiento de empresas peque?as, para que los alumnos pasen por varias a lo largo de sus pr¨¢cticas, y la intervenci¨®n de organismos intermedios como c¨¢maras de comercio u otros entes dependientes de los ayuntamientos¡±, explica la secretaria general. ¡°Tambi¨¦n estamos barajando la posibilidad de que las empresas que colaboren en la formaci¨®n profesional puedan obtener una compensaci¨®n de alg¨²n tipo, o bien que el papel de tutor en la empresa tenga una remuneraci¨®n econ¨®mica para que su labor no sea una carga monetaria¡±. Todo con el objetivo de potenciar las cualificaciones medias que tanto demanda el mercado laboral: a fin de cuentas, a?ade Sanz, ¡°el motor de una empresa no son sus directivos sino los profesionales intermedios, que son los que tienen que tirar adelante un proyecto¡±.

El plan de modernizaci¨®n de la Formaci¨®n Profesional incluye otras actuaciones que van m¨¢s all¨¢ del redimensionamiento de plazas o de la nueva ley. Entre ellas se sit¨²an las aulas de digitalizaci¨®n aplicada en los centros ¡°como, por ejemplo, las Aulas Ateca, donde los estudiantes se forman y aprenden con gemelos digitales y simuladores¡±; aulas de emprendimiento; unidades de orientaci¨®n profesional; aulas Mentor, para que la formaci¨®n llegue incluso a los municipios m¨¢s peque?os; o la acreditaci¨®n de competencias profesionales: ¡°En Espa?a, la mitad de nuestra poblaci¨®n activa no tiene acreditadas sus competencias, porque las ha adquirido a base de trabajar, y ning¨²n pa¨ªs desarrollado puede permitirse eso... Si hablamos de que la formaci¨®n permanente es necesaria, tenemos que tener acreditado lo que ya sabemos a priori¡±, argumenta Sanz.

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