A tope con la luz

La Comisi¨®n Europea ha detallado (por fin) sus propuestas para mitigar el impacto de la subida de precios de la electricidad por el uso del gas como arma de guerra por Rusia en el bienestar de los hogares y en los costes de las empresas. Y sin perder de vista que la accesibilidad de precios no tenga efectos negativos en la seguridad del suministro o en la descarbonizaci¨®n. Un trilema (precios accesibles, suministro seguro y descarbonizaci¨®n) dif¨ªcil de resolver. Por ejemplo, con la ¡°excepci¨®n ib¨¦rica¡± la electricidad mayorista fij¨® en agosto en Espa?a, antes de la compensaci¨®n al gas, el precio m¨ªnimo de la UE. Sin embargo, desde mayo ha aumentado en 11 puntos porcentuales la participaci¨®n del gas en la generaci¨®n de electricidad en nuestro pa¨ªs, incrementado su peso hasta el 18% del total europeo. La climatolog¨ªa no ayud¨®, pero con escasez de gas, probabilidad de embargo total de la oferta rusa y queriendo descarbonizar, no es extra?o que la Comisi¨®n Europea haya hecho otras propuestas.

A expensas de lo que se apruebe finalmente, es muy positiva la ambici¨®n del recorte de demanda con incentivos al ahorro, sobre todo en picos horarios, cuando el gas determina el precio. Y sin cuestionar el dise?o marginalista del mercado el¨¦ctrico mayorista, eficiente para asignar recursos escasos dejando que los precios revelen las preferencias de oferta y demanda, pero cuya reforma futura anuncia ya la presidenta de la Comisi¨®n en su discurso del Estado de la Uni¨®n. Ahora se propone redistribuir los resultados del mercado mediante un tope a los ingresos de las tecnolog¨ªas ¡°baratas¡± y un impuesto a las ¡°caras¡± (f¨®siles, y no solo para electricidad), de modo que, junto a la posibilidad de intervenir el mercado minorista, se pueda ayudar a hogares y pymes. Loable, y tanto m¨¢s eficaz en la medida que: 1) las ayudas est¨¦n lo m¨¢s dirigidas a los m¨¢s vulnerables (los apoyos indiscriminados son costosos, regresivos e ineficaces para reducir el consumo); 2) y las contribuciones solidarias y topes a los ingresos no alteren la expectativa de beneficio de medio y largo plazo, y con ello los planes de inversi¨®n para descarbonizar. Por eso, mejor si los topes dejan fuera nuevas inversiones en renovables o se fijan reglas de entrada y salida de aplicaci¨®n de las medidas, o incluso del nivel de esos topes. Por ejemplo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) acaba de sugerir algunas ideas muy concretas para la energ¨ªa f¨®sil (Taxing Windfall Profits in the Energy Sector).

Pasada la emergencia, ?qu¨¦ hacer? Para empezar, antes de emprender la reforma del mercado marginalista, ampliar la capacidad de interconexi¨®n para que los diferentes mix de producci¨®n sean una ventaja y haya un mercado europeo de la electricidad ¨²nico de verdad.

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