Espa?a reduce la media de estudiantes por profesor a 10,6 tras incorporar a 114.000 docentes en una d¨¦cada

Nunca ha habido tantos profesores en Espa?a. 784.425, lo que supone 114.638 m¨¢s que hace una d¨¦cada, en pleno impacto de los recortes que siguieron a la gran crisis financiera, seg¨²n las estad¨ªsticas publicadas al t¨¦rmino del ¨²ltimo curso por el Ministerio de Educaci¨®n. Y nunca, desde que hay registros, ha sido tan bajo el n¨²mero de estudiantes por docente: 10,6, por debajo de las medias de la UE y la OCDE. El nivel alcanzado es producto de una conjunci¨®n de factores, y su an¨¢lisis requiere un buen n¨²mero de matices. El principal, que la situaci¨®n es muy desigual en funci¨®n de las etapas educativas y el territorio donde se mire, advierte H¨¦ctor Adsuar, responsable de educaci¨®n p¨²blica de Comisiones Obreras. A grandes rasgos, las comunidades aut¨®nomas con menor n¨²mero de alumnos por profesor tienden a situarse entre las que mejor resultados obtienen en el Informe PISA, y a la inversa.

La mejora del n¨²mero medio de estudiantes por docente ¨Dque se obtiene dividiendo el total de alumnado por el total de profesorado en la ense?anza de r¨¦gimen general, y no hay que confundir con las ratios de estudiantes por grupo, que es el n¨²mero m¨¢ximo que legalmente puede haber en las clases de cada etapa educativa¨D se ha producido en paralelo al hundimiento de los nacimientos. Pero la relaci¨®n entre ambos factores es compleja. La natalidad lleva cayendo en Espa?a desde 2008, salvo el lev¨ªsimo repunte de 2014, y, pese a ello, el n¨²mero total de alumnado matriculado en ense?anzas de r¨¦gimen general no universitarias sigue aumentando: el curso pasado se alcanzaron los 8.337.537 estudiantes, la mayor cifra desde 1991.

La ca¨ªda sostenida de los nacimientos y el aumento del alumnado conviven porque la debacle del segundo ciclo de infantil (3-6 a?os) y la primaria (6-12), que en una d¨¦cada han perdido 441.404 ni?os, se ha visto compensada por el crecimiento en otras etapas. La expansi¨®n ha sido verdaderamente extraordinaria en el primer ciclo de infantil (0-3 a?os), que pese al derrumbe de la natalidad ha ganado 40.188 alumnos en una d¨¦cada, y en Formaci¨®n Profesional, con una subida de 400.112 estudiantes en el mismo periodo. La creaci¨®n de nuevas plazas en ambas etapas ha sido una de las prioridades del actual Gobierno, que ha utilizado para ello los fondos europeos de recuperaci¨®n. Por su naturaleza, las dos etapas suelen tener menos alumnos por profesor que otras, el primer ciclo de infantil por la corta edad de los ni?os, y la FP por la gran diversidad de la oferta.

La Educaci¨®n Secundaria Obligatoria (ESO) sigue, en cambio, ganando alumnado como consecuencia de una onda demogr¨¢fica anterior, aunque cada vez con menos energ¨ªa. El curso pasado el aumento fue de 17.465 chavales, lo que supone una tasa de variaci¨®n del 0,8, tres veces menos que hace seis a?os. La matr¨ªcula en Bachillerato permanece estable desde hace una d¨¦cada.

La ca¨ªda de la natalidad, especialmente donde ha sido m¨¢s fuerte, como en el norte de Espa?a, est¨¢ cambiando la configuraci¨®n de los colegios. La escuela p¨²blica Alto Ebro, en Reinosa, Cantabria, una comunidad donde las clases de 3 a 6 a?os han perdido en un lustro un 30% de ni?os, tendr¨¢ el curso que viene varias clases con 14 alumnos, cuando no hace mucho tiempo estaban a m¨¢s de 20. ¡°Cae por su propio peso que as¨ª las condiciones para que los ni?os reciban una ense?anza mejor, m¨¢s personalizada, aumentan¡±, comenta su director, ?scar Ruiz.

La ense?anza p¨²blica ha sido el motor del incremento del profesorado. En toda Espa?a y para el conjunto de las etapas ¨Dla estad¨ªstica oficial no permite hilar m¨¢s fino¨D, ha ganado 93.442 profesores en una d¨¦cada, 60.482 solo en el ¨²ltimo lustro, hasta sumar 596.705. La educaci¨®n privada, incluyendo la pura y la concertada, ha incorporado 21.196 y 6.729 docentes en los ¨²ltimos 10 y 5 a?os respectivamente, hasta llegar a los 214.720. El n¨²mero medio de alumnos por profesor se sit¨²a en la p¨²blica en 9,8, despu¨¦s de haber mejorado un 15,5% en 10 a?os, y en 12,9 estudiantes en la privada, tras haber mejorado un 3% en el mismo periodo.

El director del colegio p¨²blico Alto Ebro de Reinosa hace un apunte que ayuda a enmarcar esos datos. ¡°No s¨¦ si es que antes no se detectaban, pero cada vez nos llegan m¨¢s alumnos con necesidades educativas que requieren m¨¢s recursos: maestros de pedagog¨ªa terap¨¦utica, audici¨®n y lenguaje, fisioterapeutas, t¨¦cnicos sociosanitarios¡­ Y en nuestra zona hay colegios concertados que, a las familias con alumnos con necesidades especiales, lo que hacen es invitarles a que se vayan a la p¨²blica, con el argumento de que aqu¨ª van a contar con los recursos que les hacen falta¡±.

Las tres comunidades espa?olas con mejor resultado en el Informe PISA ¡ªuna evaluaci¨®n internacional que realiza la OCDE¡ª son Castilla y Le¨®n, Asturias y Cantabria, y figuran entre las cinco autonom¨ªas que menos estudiantes por profesor tienen. Y las tres con peor resultado, Canarias, Andaluc¨ªa y Castilla-La Mancha, se sit¨²an en el grupo de las siete con m¨¢s estudiantes por profesor. La correlaci¨®n entre ambos factores existe, pero es moderada, porque el rendimiento educativo es un plato compuesto por diversos ingredientes, el principal: la extracci¨®n socioecon¨®mica del alumnado.

Llama la atenci¨®n, con todo, que Catalu?a, la cuarta comunidad con mayor PIB per c¨¢pita, y al mismo tiempo la pen¨²ltima en n¨²mero de estudiantes por profesor, saliera mal parada en PISA, quedando cuarta por la cola. Entre las comunidades que la superaron se encuentra Extremadura, el segundo territorio con menos riqueza por habitante, pero la que menos estudiantes tiene por docente 8,9 (igual que Cantabria). Madrid constituye la principal excepci¨®n a la tendencia: es la que tiene m¨¢s estudiantes por profesor, 12,2, y la cuarta comunidad con mejor resultado en PISA, aunque tambi¨¦n es la comunidad m¨¢s rica.

La OCDE ofrece una comparaci¨®n internacional con datos de 2021, basado en profesorado a tiempo completo. Espa?a aparece en ellos con una media de 12 estudiantes por docente en primaria, 11 en secundaria, y 11 en bachillerato, por debajo de los promedios de la OCDE (15, 13 y 14) y la UE (15, 12 y 14).

Abel Mac¨ªas, presidente de la asociaci¨®n extreme?a de directores de colegios p¨²blicos, tiene en su escuela de Badajoz unos 18 ni?os por clase. ¡°Es una delicia. Como deber¨ªa ser la educaci¨®n. Porque puedes trabajar mejor con ellos, aplicar metodolog¨ªas m¨¢s activas, atenderles de forma m¨¢s individualizada¡±, afirma.

Recortar o no

El vac¨ªo generado en los colegios est¨¢ llevando a algunas comunidades, como la Comunidad Valenciana o Andaluc¨ªa, a eliminar grupos en la p¨²blica, lo que hace presagiar recortes de personal. Otros territorios, como Asturias, lo est¨¢n aprovechando, en cambio, para bajar las ratios m¨¢ximas de forma estable, y para crear una estructura permanente, p¨²blica y gratuita de escuelas de 0-3, buscando aunar, dice su consejera de Educaci¨®n, Lydia Espina, adem¨¢s de una mejora educativa, ¡°la cohesi¨®n territorial, el asentamiento de poblaci¨®n en la zona rural, la igualdad de oportunidades y la conciliaci¨®n familiar¡±.

El instituto p¨²blico que Xisca Bonet dirige en Porto Cristo, en la costa oriental de Mallorca ¨Dcomo la mayor¨ªa de centros de secundaria espa?oles¨D no ha notado, entre tanto, una reducci¨®n significativa de alumnos. ¡°En ESO tenemos entre 26 y 28 estudiantes. En teor¨ªa podr¨ªan ser 30, pero en la pr¨¢ctica ser¨ªa inviable, porque tenemos mucho alumnado reci¨¦n llegado y con necesidades educativas. En nuestra caso, la dificultad no disminuye cada curso, sino que aumenta¡±.

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