Espa?a est¨¢ a la cabeza en desigualdad entre colegios concertados y p¨²blicos del mundo desarrollado
Los centros religiosos representan tres cuartas partes de la ense?anza concertada. El peso de la red escolar privada subvencionada aumenta en siete autonom¨ªas y se reduce en diez, seg¨²n un informe de Save the Children
Espa?a es el pa¨ªs con ¡°la mayor brecha socioecon¨®mica entre centros concertados y p¨²blicos de los pa¨ªses de la OCDE¡± (una organizaci¨®n integrada principalmente por los pa¨ªses desarrollados), advierte Save the Children, una ONG que trabaja en favor de los derechos de la infancia, en un estudio publicado este mi¨¦rcoles. El dato procede del an¨¢lisis del ¨²ltimo Informe PISA, la gran evaluaci¨®n internacional que realiza peri¨®dicamente la OCDE.
Un 21% de la segregaci¨®n escolar en Espa?a ¨Dmedida por las diferencias socioecon¨®micas entre escuelas¨D ¡°se explica por la desigual composici¨®n socioecon¨®mica entre escuelas concertadas y p¨²blicas¡±. Dicho porcentaje hace del pa¨ªs ¡°un caso desafortunadamente ¨²nico¡±, se?ala Save the Children, ya que dicha proporci¨®n ¡°raramente llega al 10% en otros sistemas educativos¡± desarrollados. El especialista en equidad educativa compara el dato espa?ol con el de otros Estados donde la ense?anza concertada tambi¨¦n tiene una gran presencia, como Pa¨ªses Bajos, Corea del Sur o el Reino Unido, y en los que ¡°las diferencias socioecon¨®micas entre escuelas ocurren exclusivamente dentro de cada una de las redes y, por lo tanto, la existencia de escuela concertada no contribuye a explicar la segregaci¨®n escolar¡±. En el sistema espa?ol, en cambio, la abultada brecha socioecon¨®mico entre las escuelas p¨²blicas y las concertadas ¡°explica una parte significativa de la segregaci¨®n escolar¡±.
El informe de Save the Children, titulado Por una escuela concertada inclusiva, cuyo autor es Alfonso Echazarra ¡ªresponsable del ¨¢rea educativa de la organizaci¨®n en Espa?a¡ª, llega a la conclusi¨®n de que el factor principal que explica la segregaci¨®n socioecon¨®mica en Espa?a es el cobro de cuotas por parte de los centros concertados, que act¨²a como barrera de acceso para el alumnado de familias vulnerables. Y la ONG propone adoptar una serie de medidas, como una ¡°financiaci¨®n mejorada, gratuidad real y reglas de juego equitativas en los procesos de admisi¨®n¡± para que la concertada ¡°pase de ser parte del problema a parte de la soluci¨®n de la iniquidad equitativa¡±.
Espa?a, con casi un 30% de alumnado en primaria y secundaria en centros concertados, forma parte del grupo de pa¨ªses desarrollados donde esta red tiene un peso importante. Las mayores proporciones se dan en los citados Reino Unido y Pa¨ªses Bajos, donde ronda el 65%. En el otro extremo se encuentran pa¨ªses como Italia, Letonia y Suiza, donde pr¨¢cticamente no existe. Dentro de la propia Espa?a las diferencias entre comunidades aut¨®nomas son elevadas. La concertada supera el tercio de la matr¨ªcula total en las etapas obligatorias en Euskadi (donde supera el 50% en la ESO), Madrid, La Rioja y Castilla y Le¨®n. En el otro extremo, sobrepasa por poco el 20%, o ni siquiera lo alcanza, en Castilla-La Mancha, Andaluc¨ªa, Canarias y Extremadura.
El estudio analiza en qu¨¦ medida distintos elementos podr¨ªan explicar esa desigual distribuci¨®n de la red escolar concertada dentro de Espa?a, empezando por el religioso. La educaci¨®n privada concertada en Espa?a es, en sus tres cuartas partes, religiosa. Pero al contrario de lo que cabr¨ªa esperar si el elemento de la fe de los progenitores fuera clave a la hora de explicar el peso territorial de la educaci¨®n concertada, el informe de Save the Children pone de manifiesto que la presencia de esta red escolar resulta especialmente baja en comunidades aut¨®nomas con alto sentimiento religioso: Extremadura, 71% de creyentes; Andaluc¨ªa, 68%; Castilla-La Mancha (65%). Y al contrario, las comunidades donde m¨¢s concertada existe se cuentan entre las que menos religiosidad muestran: Pa¨ªs Vasco (55%), Madrid (57%), y Navarra (60%). El informe cita en este apartado una investigaci¨®n publicada el a?o pasado por Leopoldo Cabrera y Felipe Rosa, basada en datos del CIS).
S¨ª parece haber cierta relaci¨®n entre el hecho de que una regi¨®n sea m¨¢s rural y el peso de la concertada sea menor, aunque seg¨²n el an¨¢lisis de Save the Children esta es en todo caso ¡°discreta¡±; solo explica un 18% de la varianza. Mucho menos que la riqueza, cuyo potencial explicativo resulta ¡°extraordinario¡±, seg¨²n Echazarra, con un grado de asociaci¨®n del 69% ¨Del 100% supondr¨ªa que est¨¢n perfectamente asociadas y el 0%, que no hay relaci¨®n¨D.
Evoluci¨®n
En las ¨²ltimas dos d¨¦cadas, el porcentaje de alumnado matriculado en centros concertados durante las etapas obligatorias ha variado poco si se observa el conjunto de Espa?a. Entre 2001 y 2020, se redujo del 30,1% al 28,4% en Primaria, y baj¨® del 30,5% al 29,6% en la ESO ¨Dla ¨²nica etapa en la que ha crecido de forma significativa, unos dos puntos hasta el 28,5%, ha sido en el segundo ciclo de Infantil, al que asisten ni?os de 3 a 6 a?os¨D. La evoluci¨®n presenta, sin embargo, algunas diferencias territoriales significativas. Ha crecido especialmente en Murcia, Madrid y La Rioja (ganando cerca o por encima de un 2% del alumnado al menos en una etapa obligatoria), y ha bajado de forma acusada en Catalu?a (en torno a un 5% en primaria), Cantabria y Baleares (en ambas, algo m¨¢s de un 4% en al menos una de las etapas obligatorias).
Pese a estar financiada con fondos p¨²blicos, la escuela concertada acoge menos alumnado vulnerable de lo que le corresponder¨ªa. Mientras un 18% del alumnado de la p¨²blica era de origen inmigrante en 2022, en la concertada se situaba en el 10%, lo que lo convierte en uno de los pa¨ªses con mayores diferencias en este terreno de las recogidas en el Informe PISA, la evaluaci¨®n internacional que realiza peri¨®dicamente la OCDE y que, junto a los datos oficiales del Ministerio de Educaci¨®n, constituyen las principales fuentes documentales del informe de Save the Children. En la escuela p¨²blica, el 14,5% de los chavales est¨¢n clasificados como estudiantes con necesidad espec¨ªfica de apoyo educativo, tanto en primaria como en la ESO. En la concertada, los porcentajes se sit¨²an en el 9,5% y el 12% respectivamente.
El informe menciona la investigaci¨®n publicada en abril por EsadeEcPol sobre el cobro de cuotas de los colegios concertados para se?alar que estas ascienden en promedio a 68 euros en primaria y a 57 en secundaria ¨Dcon cifras m¨¢s elevadas para Catalu?a (140), Euskadi (93) y Madrid (90)¨D, sin contar otros gastos asociados a la concertada, como el uniforme escolar y el precio del comedor. Para el 10% de las familias espa?olas situadas en la franja m¨¢s baja de renta disponible (9.154 euros anuales), llevar a dos ni?os a un colegio concertado que cobrara una cuota de 50 euros al mes por ni?o supondr¨ªa destinar a ello un 13,1% de sus ingresos mensuales, y nada menos que un 26% si las cuotas ascendieran a 100 euros. En Espa?a, seg¨²n datos del Informe PISA de 2015 (el ¨²ltimo en el que el pa¨ªs particip¨® tambi¨¦n en el cuestionario para hogares), ¡°el alumnado cuyos progenitores estaban preocupados por los gastos escolares ten¨ªa mayor probabilidad de acudir a la escuela p¨²blica¡±.
Obst¨¢culos y posibles soluciones
A la barrera de acceso de las cuotas, Save the Children a?ade los criterios de admisi¨®n establecidos por una parte de las comunidades aut¨®nomas, que permiten, hasta cierto punto, que los colegios seleccionen a sus estudiantes. Ello se da fundamentalmente en cinco comunidades aut¨®nomas gobernadas por el PP, Madrid, Galicia, Murcia, Comunidad Valenciana (desde este curso) y Castilla y Le¨®n (en menor medida), adem¨¢s de en Euskadi, seg¨²n el informe. Entre los criterios que penalizan al alumnado vulnerable figuran dar puntos por el hecho de que los progenitores trabajen; la condici¨®n de antiguos alumnos de los padres; o que los ni?os hayan asistido previamente durante el primer ciclo de infantil al propio colegio o a centros adscritos al mismo, pagando.
Save the Children propone una serie de medidas para hacer m¨¢s inclusiva la educaci¨®n concertada. Entre ellas garantizar la gratuidad, que deber¨ªa ser ¡°supervisada de forma activa¡± de todos los servicios y actividades educativas que conformen el n¨²cleo del proyecto del centro; mejorar la financiaci¨®n p¨²blica, pero asoci¨¢ndola tambi¨¦n al porcentaje de alumnado en situaci¨®n de vulnerabilidad socioecon¨®mica que acogiera cada centro (al igual que la p¨²blica); extender tanto los conciertos como la gratuidad completa a las etapas no obligatorias, como el primer ciclo de infantil, bachillerato y la FP de grado medio; establecer que la escuela concertada no pueda tener ¨¢nimo de lucro (como sucede en la mayor parte de pa¨ªses de la OCDE, pero no en Espa?a), y eliminar los criterios de admisi¨®n escolar con potencial excluyente¡±.
Puedes seguir EL PA?S Educaci¨®n en Facebook y X, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.