Los alumnos espa?oles bajan en matem¨¢ticas y ciencias y se agranda la brecha entre ni?os y ni?as
Espa?a se aleja del resultado medio de los pa¨ªses desarrollados en las pruebas TIMSS, centradas en alumnado de primaria. Castilla y Le¨®n y Asturias ocupan los primeros puestos, mientras Catalu?a vuelve a situarse en la cola
El estudio TIMSS, la segunda mayor evaluaci¨®n internacional, comparable por su magnitud con el Informe PISA, pero centrada en alumnado de cuarto de primaria, en ni?os de 9 y 10 a?os, trae malas noticias para Espa?a. Los estudiantes espa?oles retroceden cuatro puntos en matem¨¢ticas, hasta los 498, alej¨¢ndose un poco m¨¢s de la media de los pa¨ªses desarrollados: el promedio de la OCDE baja dos y supera ahora en 27 a Espa?a. En ciencias el batacazo es a¨²n mayor: los resultados espa?oles descienden siete puntos, hasta los 504, y la diferencia con el promedio de los pa¨ªses ricos alcanza 22 puntos, cuando en la edici¨®n anterior era de 15.
Espa?a ocupa, en matem¨¢ticas, el puesto 28 de los 32 pa¨ªses de la OCDE o la UE participantes en la prueba. Su resultado est¨¢ m¨¢s de 100 puntos por debajo del primer clasificado, Singapur (que logra 615), y a m¨¢s de 90 de Corea del Sur (594) y Jap¨®n (591), que completan el podio reafirmando la superioridad asi¨¢tica. El primer clasificado europeo es Lituania, con 561 puntos. Las pruebas las organiza desde hace casi tres d¨¦cadas la Asociaci¨®n Internacional para la Evaluaci¨®n del Rendimiento Educativo (IEA), formada por organismos oficiales y centros de investigaci¨®n acad¨¦micos, sobre todo del mundo desarrollado. En esta edici¨®n han participado 400.000 estudiantes de 59 pa¨ªses, 10.000 de ellos espa?oles.
Los resultados muestran grandes diferencias entre las nueve comunidades aut¨®nomas espa?olas que solicitaron ampliar el n¨²mero de estudiantes examinados en su territorio, y contar as¨ª con muestras propias estad¨ªsticamente significativas. En matem¨¢ticas, la clasificaci¨®n est¨¢ liderada por Castilla y Le¨®n (522), Asturias (520), Madrid (519), y Navarra (517). A continuaci¨®n se sit¨²a Galicia, con 509 puntos. Y en la parte de abajo Andaluc¨ªa (494), Catalu?a (489, un resultado que agravar¨¢ la sensaci¨®n de crisis de su sistema educativo), Canarias (485), y Baleares (473). En ciencias, Asturias se sit¨²a en esta edici¨®n en primer lugar (528), seguida de Galicia (525), Castilla y Le¨®n (525), y Madrid (523). Navarra obtiene 510 puntos, y a continuaci¨®n figuran Catalu?a (502), Canarias (499), Andaluc¨ªa (497), y Baleares (485).
Brecha de g¨¦nero
El estudio contiene otro dato alarmante: la ventaja que los ni?os sacan a las ni?as en matem¨¢ticas vuelve a aumentar. En 2011, la primera vez que Espa?a particip¨® en TIMSS, se situaba en 11 puntos. En cada una de las tres ediciones siguientes la brecha se ha ampliado, hasta alcanzar en esta ocasi¨®n 18 puntos (507 frente a 489). La bajada del rendimiento de las ni?as espa?olas respecto a la edici¨®n anterior ha sido de seis puntos, el triple que la de los ni?os. Y no es un problema exclusivamente espa?ol: en el conjunto de la OCDE, los chicos han pasado en 12 a?os de sacar seis puntos a las chicas a superarlas en 16. En los resultados en ciencias, en cambio, la distancia entre ambos g¨¦neros se ha reducido en el mismo periodo tanto en Espa?a (de 10 a 2 puntos) como en la OCDE (de 5 a 4). En las evaluaciones internacionales sobre comprensi¨®n lectora, una competencia que no se mide en TIMSS, las ni?as superan a los ni?os.
Las pruebas se realizaron en la primavera de 2023, lo que significa que el alumnado espa?ol que se present¨® hab¨ªa pasado toda su etapa escolar con los curr¨ªculos de la Lomce, la anterior ley educativa, aprobada por el PP. Una norma criticada, entre otros motivos, por ser poco competencial ¨Des decir, poco orientada a conseguir que el alumnado sea capaz de resolver problemas aplicando aquello que ha aprendido en la escuela¨D cuando las grandes evaluaciones internacionales, como PISA y, en menor medida, TIMSS se caracterizan por serlo. Los nuevos curr¨ªculos adaptados a la actual ley de educaci¨®n, la Lomloe, subrayan, adem¨¢s, la necesidad de incorporar una perspectiva de g¨¦nero a la ense?anza de las matem¨¢ticas para intentar atajar la diferencia de resultados, que condiciona sus trayectorias acad¨¦micas y, seg¨²n diversos estudios, acaba contribuyendo a que las mujeres tengan peores condiciones laborales y salariales. Cuando el Gobierno public¨® los nuevos curr¨ªculos, dicho enfoque de g¨¦nero fue recibido con sarcasmo por los partidos de la oposici¨®n de derechas.
Alertas previas
La evaluaci¨®n de TIMSS se suma a otras se?ales negativas del sistema educativo espa?ol. En la ¨²ltima prueba PIRLS, la de 2021, que tambi¨¦n realiza la IEA entre alumnado cuarto de primaria, pero centr¨¢ndose en la compresi¨®n lectora, Espa?a retrocedi¨® siete puntos. Y en el ¨²ltimo Informe PISA, del a?o 2022, que realiza la OCDE y mide las competencias de los estudiantes de 15 a?os, Espa?a baj¨® 8 puntos en matem¨¢ticas y tres en lectura, aunque subi¨® dos en ciencias. Tanto en PIRLS como en PISA, sin embargo, Espa?a sufri¨® menos que casi todos los pa¨ªses desarrollados, lo que se atribuy¨® a una mejor reacci¨®n ante la pandemia de la covid, especialmente por la reapertura relativamente r¨¢pida de colegios e institutos. En TIMSS, en cambio, realizada en 2023, tal ventaja se ha diluido. El pa¨ªs cae cuatro puntos en matem¨¢ticas, mientras que la media de la OCDE lo hace dos, y siete en ciencias, mientras el promedio de pa¨ªses desarrollados se mantiene igual.
?Por qu¨¦ Espa?a deja de comportarse mejor que su entorno en esta prueba? Una explicaci¨®n es que, simplemente, conforme pasa el tiempo desde los cierres escolares de la pandemia el efecto de haber retomado las clases con rapidez se va diluyendo, y Espa?a vuelve a estar donde sol¨ªa en TIMSS, en un puesto m¨¢s que discreto de la clasificaci¨®n del mundo desarrollado. Otra hip¨®tesis, compatible con la anterior, es que mientras Espa?a fue ¨¢gil en reabrir las escuelas, no lo ha sido, en cambio, a la hora de lanzar grandes planes de refuerzo para paliar lo perdido en las competencias b¨¢sicas por la covid, como s¨ª han hecho algunos pa¨ªses de su entorno. A la vista del batacazo en PISA, el Gobierno anunci¨®, de hecho, a principios de este a?o, un programa de refuerzo en matem¨¢ticas y lectura financiado con 500 millones de euros, una dotaci¨®n que el Ministerio de Educaci¨®n esperaba poder ampliar. La imposibilidad de aprobar los presupuestos de 2024 le impidi¨®, sin embargo, hacerlo. El plan ha echado a andar este curso con 95 millones de euros, procedentes de los remanentes del presupuesto sin ejecutar del ministerio, una partida muy peque?a para una empresa tan grande ¨Dhay m¨¢s de ocho millones de estudiantes preuniversitarios¨D. Educaci¨®n conf¨ªa, no obstante, en redimensionarla si se aprueban los presupuestos de 2025.
Los ni?os que participaron en la edici¨®n de TIMSS publicada este martes est¨¢n ahora (salvo el peque?o n¨²mero de repetidores de esta etapa) en sexto de primaria. En los a?os m¨¢s duros de la covid, 2020 y 2021, cuando se produjo primero el gran confinamiento y despu¨¦s el goteo del cierre de los llamados grupos burbujas, los chavales estaban en primero y segundo de primaria. Un ciclo en el que se sientan las bases matem¨¢ticas de la etapa, aprendiendo, explica Al¨ªcia Redondo, maestra en Valencia, y Victoria Colmenero, en Castilla-La Mancha, las sumas y restas llevando; las primeras tablas de multiplicar; la resoluci¨®n de problemas sencillos (lo que requiere una comprensi¨®n lectora que est¨¢n adquiriendo en paralelo), y las figuras geom¨¦tricas de dos dimensiones, entre otros saberes.
Muchos ni?os con bajo nivel
Espa?a ¡°presenta una proporci¨®n de estudiantes notablemente alta en los niveles bajos¡±, se?ala el estudio. Casi cuatro de cada 10 ni?os se sit¨²an en los dos escalones inferiores, del total de cinco en que el estudio divide al alumnado en funci¨®n de sus resultados. El 28% tiene un nivel bajo (obtienen entre 400 y 474 puntos), y el 9,8% un nivel muy bajo (menos de 400). En la OCDE los porcentajes son sensiblemente menores: 19% en nivel bajo y 7,9% en muy bajo. En Espa?a, adem¨¢s, solo un 26,8% de los estudiantes se sit¨²an en los dos niveles superiores, alto y avanzado, frente al 40,6% del promedio de los pa¨ªses desarrollados.
¡°Tenemos mucho alumnado rezagado en matem¨¢ticas, y es importante reforzarlas. Eso no quiere decir desatender otras competencias, pero s¨ª atender el problema¡±, afirma el soci¨®logo Jos¨¦ Saturnino Mart¨ªnez, director de la Agencia Canaria de Calidad Universitaria y Evaluaci¨®n Educativa. Mart¨ªnez subraya la importancia de cuidar una competencia ¡°estrat¨¦gica¡± y ¡°escasa¡±. Los matem¨¢ticos, dice Mart¨ªnez, est¨¢n muy demandados en el mercado de trabajo. Y cada vez resulta m¨¢s dif¨ªcil encontrar titulados en la disciplina que quieran dedicarse a la docencia.
Lucas Gortazar, responsable de Educaci¨®n de EsadeEcPol, resta, por su parte dramatismo a los resultados espa?oles de TIMSS, sobre todo en cuanto al descenso en matem¨¢ticas. A diferencia de PISA, que examina a estudiantes de 15 a?os (independientemente del curso en el que est¨¦n), en esta prueba se eval¨²a a ni?os de cuarto de primaria, lo cual, unido a las caracter¨ªsticas de los ejercicios, puede influir en los resultados, advierte Gortazar. ¡°TIMSS es una prueba m¨¢s curricular (que PISA), de temario mucho m¨¢s espec¨ªfico, y hay pa¨ªses, por ejemplo, el este de Europa, que suelen cubrir el temario para cuando los alumnos realizan la prueba¡±. ¡°Con todo, son resultados pobres en relaci¨®n con pa¨ªses vecinos, algo que viene de lejos en TIMSS. Hace falta apostar m¨¢s por la primaria con m¨¢s desdobles, refuerzos y apoyos, pero tambi¨¦n con cambios metodol¨®gicos que permitan afianzar aprendizajes fundamentales como las matem¨¢ticas, algo que ni ha ocurrido en el pasado ni ocurre ahora en la escala que deber¨ªa¡±, a?ade Gortazar, que considera que el refuerzo debe dirigirse a todo el alumnado, ¡°pero prestando atenci¨®n a colectivos vulnerables, y en este caso, tambi¨¦n a las ni?as¡±.
El peso de la clase social
TIMSS vuelve a mostrar el peso del entorno familiar en los resultados acad¨¦micos. El estudio divide a las familias en tres niveles de estatus socioecon¨®mico en funci¨®n de cuatro criterios: estudios y tipo de empleo de los progenitores, y n¨²mero de libros en general e infantiles en particular que hay en la casa. En funci¨®n de ello, un 34% del alumnado espa?ol vive en hogares de estatus alto ¨Dfrente, por ejemplo, al 26% en Italia; el 32% de Portugal; el 42% de Alemania, y el 55% de Suecia¨D, y su resultado en matem¨¢ticas alcanza los 534 puntos, 37 m¨¢s que los ni?os de familias de estatus medio, y 79 puntos m¨¢s que los de estatus bajo. La diferencia entre el primer y ¨²ltimo grupo es todav¨ªa mayor en Alemania (97) y Suecia (104 puntos), id¨¦ntica en Portugal (aunque el pa¨ªs obtiene, globalmente, 19 puntos m¨¢s que Espa?a), y menor en Italia (61).
Haber estado escolarizado en el primer ciclo de infantil (a lo largo del 0-3), se asocia con mejores resultados. En Espa?a, quienes han asistido logran 25 puntos m¨¢s en matem¨¢ticas y 22 en ciencias que los que no lo hicieron.
Comportamiento y conciencia ambiental
Los ni?os inmigrantes obtienen un rendimiento m¨¢s bajo ¨Dpor una combinaci¨®n de elementos entre los que figura el manejo lengua, tanto el suyo como el de su familia, y el nivel socioecon¨®mico, que frecuentemente se solapa con el factor migratorio¨D en matem¨¢ticas tanto en Espa?a (22 puntos) como en la media de la OCDE (18). Hay siete pa¨ªses desarrollados donde los ni?os inmigrantes superan, sin embargo, a los nativos, con ventajas especialmente altas en pa¨ªses con elevada emigraci¨®n asi¨¢tica, como Nueva Zelanda (donde logran 28 puntos m¨¢s) y Australia (30).
En Espa?a, los ni?os espa?oles muestran un bajo nivel de confianza en sus habilidades matem¨¢ticas: el pa¨ªs ocupa el puesto 22 de 32 pa¨ªses de la OCDE o la UE participantes. En el lado positivo, es el cuarto donde mejor se comporta el alumnado de cuarto de primaria, seg¨²n la percepci¨®n manifestada por los directores de sus colegios. El tercero con mayor sentido de pertenencia a la escuela de los chavales, en el sentido de que les gusta estar en el colegio. Y el octavo en ¡°conciencia medioambiental¡±, un indicador basado en encuestas a los estudiantes en el que, de forma un tanto inesperada, los tres primeros puestos los ocupan Bulgaria, Ruman¨ªa y Turqu¨ªa, y los ¨²ltimos, Suecia, Dinamarca y Noruega, con Corea del Sur cerrando la clasificaci¨®n.
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