El rentable negocio de invertir en emprendedoras

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Existe el estigma o la idea err¨®nea de que un negocio no puede ser rentable y, al mismo tiempo, generar un impacto social. Sin embargo, el emprendimiento siempre ha sido una f¨®rmula indiscutible para generar riqueza y tambi¨¦n una manera de que aquellos sin recursos pero con una gran idea puedan salir de la situaci¨®n de pobreza en la que viven. En este sentido, debemos trabajar para desmentir dos mitos: primero, que quienes viven bajo el umbral de la pobreza tienen falta de habilidades y segundo, que emprender es algo exclusivo de personas con determinadas aptitudes, porque nadie es m¨¢s apto que una mujer de Nicaragua con una familia a la que sacar adelante.

En estos ¨²ltimos a?os en los que el emprendimiento, la innovaci¨®n social y el empoderamiento de la mujer est¨¢n en auge, han surgido iniciativas, empresas y proyectos que impulsan cambios y crean riqueza para todos. Y no solo eso, sino que grandes empresas internacionales est¨¢n tambi¨¦n trabajando por cambiar su filosof¨ªa corporativa para adecuarla a un modelo mucho m¨¢s sostenible. Sin duda, es un primer paso en un largo camino que queda por recorrer.

En materia de emprendimiento, seg¨²n el ¨²ltimo Informe Especial GEM sobre Emprendimiento Femenino (2017), la brecha entre mujeres y hombres emprendedores est¨¢ disminuyendo considerablemente. En los ¨²ltimos dos a?os la actividad emprendedora de las mujeres de todo el mundo ha aumentado en un 10%, un porcentaje m¨¢s alto si observamos la tasa de mujeres emprendiendo por necesidad econ¨®mica, que supera en un 20% a la de los hombres. No obstante, en los pa¨ªses con econom¨ªas innovadoras donde el nivel de educaci¨®n es m¨¢s elevado, las mujeres emprenden por oportunidad casi en un 80%.

Los datos de emprendimiento femenino var¨ªan de forma considerable en funci¨®n de la econom¨ªa de cada pa¨ªs y su desarrollo. La TEA (Tasa de Actividad Emprendedora) femenina va desde el 3% en pa¨ªses como Alemania, Italia y Francia al 37% de Senegal. Solo en cinco pa¨ªses del sudeste asi¨¢tico y Am¨¦rica Latina, el porcentaje de emprendedoras es igual o superior al de los hombres. En general, a medida que aumenta el nivel de desarrollo, el n¨²mero de negocios establecidos por mujeres disminuye, lo que a su vez aumenta la brecha de g¨¦nero.

En este sentido, aunque la realidad de la mujer es diferente dependiendo del lugar? en el que se encuentre ¡ªestad¨ªsticamente y en todo el mundo¡ª las mujeres a las que se les ha concedido un pr¨¦stamo para crear o madurar un proyecto, lo devuelven de manera m¨¢s responsable que el hombre. Existen varias razones, pero la principal es que demuestran m¨¢s sensibilidad ante los compromisos. Entonces, ?c¨®mo se explica que un 52% de las mujeres en el mundo (seg¨²n Global Findex Database) no tengan acceso a los servicios financieros tradicionales para emprender?

A medida que aumenta el nivel de desarrollo, el n¨²mero de negocios establecidos por mujeres disminuye

Las estad¨ªsticas no mienten. Invertir en mujeres emprendedoras es un negocio rentable. En primer lugar, porque existe un gran nicho, es decir, m¨¢s de la mitad de la poblaci¨®n son mujeres y, a su vez, de todas aquellas que desean emprender casi ninguna obtiene financiaci¨®n para desarrollar su proyecto o idea.

En segundo lugar, cuando una mujer logra emprender y obtiene mayores ingresos, su entorno mejora, ya que act¨²a como motor social y econ¨®mico. Existe lo que llaman el ¡°c¨ªrculo de influencia de una mujer¡± (mujer, familia y comunidad), lo que se refiere al impacto que el propio bienestar econ¨®mico de esta tiene tanto en su familia como en su comunidad.

Y, en tercer lugar, cuando las mujeres alcanzan independencia econ¨®mica, tienden a gastar m¨¢s en ¨¢mbitos como la educaci¨®n, la alimentaci¨®n, la salud y la calidad de vida familiar. Esto, a su vez, implica que la escolarizaci¨®n aumente, lo cual tiene relaci¨®n directa con la eliminaci¨®n de la pobreza.

Por consiguiente, invertir en mujeres emprendedoras no solo es rentable econ¨®micamente, sino que tambi¨¦n reporta otros beneficios como la ruptura del c¨ªrculo de la pobreza en el que vive a¨²n una gran parte de la poblaci¨®n mundial (300.000 millones de personas viven bajo el umbral de la pobreza y, de ellos, el 51% son mujeres), una mayor escolarizaci¨®n, la dignificaci¨®n y el empoderamiento de la mujer o la generaci¨®n de riqueza en pa¨ªses en estado de desarrollo.

En definitiva, como Jim Yong Kim, presidente del Grupo Banco Mundial, dijo durante la Tercera conferencia internacional sobre la financiaci¨®n para el desarrollo: ¡°El crecimiento econ¨®mico es la herramienta m¨¢s poderosa que tenemos para hacer realidad un mundo sin pobreza. Es necesario que la econom¨ªa mundial crezca m¨¢s r¨¢pido y de manera m¨¢s sostenible¡± y ¡°se necesita un crecimiento inclusivo que promueva oportunidades para todos, y que considere la participaci¨®n plena de los hombres y las mujeres¡±. Por este motivo, las mujeres y su c¨ªrculo de influencia pueden y deben desempe?ar un papel crucial en la generaci¨®n de riqueza, pero para ello debemos romper definitivamente el estigma de que un negocio que aporte beneficios sociales no puede ser al mismo tiempo rentable en t¨¦rminos econ¨®micos.

Alejandro de Le¨®n es fundador de Microwd, un proyecto que conecta mujeres emprendedoras en Latinoam¨¦rica con ahorradores en Espa?a que buscan rentabilidad econ¨®mica e impacto social.

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