El calor y las vacaciones ¡ªal menos las de los ni?os¡ª ya han llegado. Y, como no pod¨ªa ser de otra forma, a todos nos entran ganas de comernos unos buenos helados de vez en cuando. Pero es importante tener en cuenta que se trata de un alimento rico en grasas saturadas y az¨²car. Por lo que, seg¨²n recomienda la Organizaci¨®n Mundial de la Salud, lo mejor es limitar su ingesta.
Aunque esto no quiere decir que haya que taparse los ojos cada vez que pase por delante de una helader¨ªa. M¨¢s all¨¢ del lado negativo, cuando este manjar veraniego est¨¢ preparado con leche, adem¨¢s de las grasas y az¨²cares, puede aportar calcio y prote¨ªnas, explica Luc¨ªa Bult¨®, dietista-nutricionista. Y los de frutas "vitaminas y fibra", aclara Abel Marin¨¦, doctor en Farmacia, catedr¨¢tico de la Universitat de Barcelona.
As¨ª que lo importante es consumirlos con la frecuencia adecuada, que, afirma Lourdes Carrillo, coordinadora del grupo de trabajo de Alimentaci¨®n y Nutrici¨®n de la Sociedad Espa?ola de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), es "alguna vez a la semana o varias veces al mes, siempre en el contexto de una dieta equilibrada y, preferentemente, como postre de una comida principal y no como tentempi¨¦". Una recomendaci¨®n aplicable tanto para ni?os como para adultos.