La crema de cacahuete de Mercadona, a examen: ?tesoro nutricional o bomba cal¨®rica?

Por fin "una crema de frutos secos 100% libre de az¨²car y de aceites vegetales refinados (como el aceite de palma, soja o girasol)". As¨ª se alegr¨® recientemente el dietista-nutricionista Carlos R¨ªos en su cuenta de Instagram y as¨ª se desat¨® la locura por la crema de cacahuete de Mercadona, que lleva en algunas tiendas de Espa?a y Portugal desde mediados de septiembre.De pronto, un alimento tan poco habitual en la dieta mediterr¨¢nea, y que tan buenos momentos ha dado a los paladares norteamericanos, se colocaba como uno de esos productos de referencia bendecidos por los nutricionistas, uno de esos que no hay que perderse. Y con el marchamo de la marca blanca de Mercadona.

La nueva crema de cacahuete Hacendado desat¨® un inusitado inter¨¦s en redes sociales y, por ende,? la crema cacahuete, venga de donde venga, comenz¨® a concitar atenci¨®n. Pero el mismo R¨ªos ped¨ªa mesura. "Por su palatabilidad y alta densidad cal¨®rica, mi recomendaci¨®n es que no sea de consumo diario, sino semanal". ?A qu¨¦ ven¨ªa esta precauci¨®n? Pues a que la crema de cacahuete de Mercadona tiene 50 gramos de grasas y 618 kilocalor¨ªas por cada 100 gramos, y eso la convierte en una bomba cal¨®rica de relojer¨ªa.

Un par de cucharadas y poco m¨¢s

Para el dietista-nutricionista de la Academia Espa?ola de Nutrici¨®n y Diet¨¦tica Ram¨®n de Cangas, consumir crema de cacahuete a diario no es necesariamente un problema. La clave para beneficiarse de las bondades del producto y evitar los riesgos est¨¢ en conseguir controlar el consumo. "La crema de cacahuete sin az¨²car a?adido es un alimento que s¨ª se puede consumir diariamente, y diferentes estudios sugieren que el consumo de frutos secos y otros alimentos equivalentes (como los cacahuetes) no se relaciona con un incremento del peso corporal", dice De Cangas. "Bien es cierto que, por su densidad energ¨¦tica, deben ser consumidos de forma razonable, y por razonable entendemos untar generosamente un par de tostadas o tortitas de ma¨ªz, o a?adir un par de cucharadas a un yogur. Comer crema de cacahuete sin l¨ªmite no ser¨ªa recomendable porque disparar¨ªa nuestra ingesta energ¨¦tica y podr¨ªa incrementar (si se hace de forma frecuente) la grasa corporal", a?ade.

Como ya sucediera con el aceite de oliva, el salm¨®n y el aguacate, la crema de cacahuete vuelve a poner el foco en la necesidad de consumir grasas "de las buenas". Seg¨²n la Fundaci¨®n Espa?ola de la Nutrici¨®n, en cada 100 gramos de porci¨®n comestible de cacachuete hay 23,4 de ¨¢cidos grasos monoinsaturados y otros 14 gramos de poliinsaturados, sobre todo, del tipo omega 6. Aparte de las grasas, la legumbre aporta 27 gramos de prote¨ªna y 8,1 de fibra, y el contenido de minerales es notable: en su tarjeta de visita figura el f¨®sforo (432 miligramos), potasio (680), magnesio (174) y zinc (3).?

La etiqueta de la crema de cacahuete de Mercadona no difiere mucho de las cifras de su ingrediente principal, lo que respalda la idea de que la nueva f¨®rmula es una oportunidad nutricional. El producto contiene 50 gramos de grasas, de los que 6,8 son saturadas, 30 gramos de prote¨ªnas y 9,9 de fibra. En cuanto a las vitaminas y los minerales, la etiqueta ¨²nicamente refleja 13 miligramos de vitamina E y 171 de magnesio. Y en esos 100 gramos hay 618 kilocalor¨ªas.

Cacahuete, aceite, canela y jengibre: en casa tambi¨¦n sale

Antes de saltar a la fama en la cadena de supermercados valenciana, la crema de cacahuete era un producto habitual en las tiendas de alimentaci¨®n para deportistas. Algunas marcas le a?aden sal para mejorar su palatabilidad y para asegurar el aporte de sodio que necesita un deportista sudoroso. La ganadora del oro ol¨ªmpico en gimnasia art¨ªstica Simone Biles, por ejemplo, reconoce que toma un aperitivo de pl¨¢tano y crema de cacahuete antes de entrenar porque es una interesante inyecci¨®n de potasio, un micronutriente que reduce el riesgo de calambres musculares. Muchos otros deportistas ol¨ªmpicos la incluyen en el men¨², y su popularidad no es por casualidad. "Es una buena fuente de prote¨ªna vegetal y de grasas saludables, pero eso no quiere decir que sea un alimento imprescindible, necesario o m¨¢gico. Respecto a la cantidad y momento de consumo, depender¨¢ del tipo de deporte y los objetivos del deportista", dice De Cangas.

Hay que tener en cuenta que una cosa son los deportistas de ¨¦lite, aut¨¦nticas m¨¢quinas de quemar calor¨ªas, y otra el ciudadano de a pie, que no suele consumir m¨¢s de 2.000 al d¨ªa. En este caso, ?existe una raci¨®n diaria recomendada o un l¨ªmite que haya que tener en cuenta? "Es complicado dar un consejo general de cantidad recomendada. Depende de factores como el resto de alimentos ingeridos a lo largo del d¨ªa y el gasto energ¨¦tico de cada persona. Que sea una opci¨®n saludable (y este producto ciertamente lo es) no debe dar pie a abusar de ¨¦l porque habr¨¢ un super¨¢vit energ¨¦tico. En resumen: podemos utilizarlo para preparar recetas de todo tipo, pero siendo conscientes de que su valor cal¨®rico es significativo".

Un chasco. Pero De Cangas tambi¨¦n tiene un remedio para eso, la receta a la que ¨¦l recurre en casa: primero se tuestan los cacahuetes al horno, luego se trituran y se a?ade aceite de oliva, canela en polvo y jengibre, tambi¨¦n en polvo. Se mezcla todo bien y solo queda disfrutar.