Propuestas y consejos de voluntariado para viajeros
Practicar la ciencia ciudadana en la Ant¨¢rtida, conservar la vida salvaje en Costa Rica, apoyar el empoderamiento de la mujer en Bali, proteger el medio ambiente en Australia, sumarse a una expedici¨®n cient¨ªfica en Per¨² o en Montana¡ hay muchas propuestas para viajar como voluntario por todo el mundo
¡°?Cu¨¢l es la esencia de la vida? Servir a los dem¨¢s y hacer el bien¡±. Lo dijo Arist¨®teles hace 2300 a?os y sigue sonando convincente. El voluntariado lleva mucho tiempo presente en la cultura humana, y tambi¨¦n como motivaci¨®n de viaje. De las comunidades que se visitan en un viaje recibimos mucho: aventura, salud, inspiraci¨®n, experiencias que cambian la vida. ?Qu¨¦ podemos dar a cambio?: viajar con respeto por el planeta y sus gentes, y echar una mano donde se pueda. Los voluntarios viajeros pueden ayudar en causas solidarias sociales, en proyectos educativos, de conservaci¨®n del medio ambiente o tambi¨¦n apoyar proyectos cient¨ªficos por todo el mundo.
C¨®mo escoger un proyecto sostenible de voluntariado
Desde instalar cocinas en aldeas remotas en Per¨² hasta recoger informaci¨®n sobre animales vulnerables en ?frica, el voluntariado puede ser una forma agradecida de pasar un tiempo fuera de casa. La ONU lo considera indispensable para cumplir con sus Objetivos de Desarrollo Sostenible, aunque hay proyectos m¨¢s sostenibles que otros. Lo prioritario, antes de ponernos en marcha, y para aprovechar bien el tiempo como voluntario, hay que asegurarse de con qui¨¦n vamos y qu¨¦ se va a hacer y conocer previamente la calidad, el valor y la sostenibilidad de los proyectos de voluntariado. Hay que tener claro qu¨¦ trabajo desempe?ar¨¢ el voluntario, cu¨¢ntas horas, cu¨¢ntos d¨ªas a la semana y con qu¨¦ organizaci¨®n de acogida. Tambi¨¦n hay que informarse de si la organizaci¨®n a la que vamos trabaja con otra local asociada y c¨®mo funciona su relaci¨®n.
Un programa de voluntariado bien estructurado deber¨ªa tener marcos temporales definidos y las organizaciones deber¨ªan saber si un proyecto tiene continuidad. Los proyectos puntuales, y sobre todo los contratos, pueden ser un problema. Si se trabaja un mes como profesor adjunto, ?qu¨¦ pasa el resto del a?o escolar? ?Se env¨ªa a otros voluntarios o se zanja el acuerdo? Si se cambia al personal constantemente, los ni?os son los principales perjudicados.
Otro de los temas clave es ver si la organizaci¨®n con la que vamos tiene pol¨ªticas que protejan a la poblaci¨®n, los animales y el entorno natural del lugar. Adem¨¢s, la organizaci¨®n deber¨ªa explicar al voluntario c¨®mo trabaja para minimizar la huella medioambiental de sus proyectos.
Cada organizaci¨®n ofrece una formaci¨®n y un apoyo muy diferentes. Se recomiendan aquellas que, aparte de dar formaci¨®n previa, tambi¨¦n ofrecen apoyo y orientaci¨®n en el pa¨ªs. Tambi¨¦n es esencial que haya alguien en el destino que se responsabilice de uno. En todos los proyectos aparecen imprevistos y hay que tener a alguien cerca que pueda ayudar.
Información en “Solo se vive una vez” y en la Guía del turismo sostenible” de Lonely Planet y en www.lonelyplanet.es
Y no menos importante: hay que preguntar d¨®nde se destina el dinero que uno paga por trabajar e insistir para obtener una cifra clara y no un porcentaje de los beneficios. Muchas veces lo que se paga por comida y alojamiento no se destina al programa de voluntariado.
Tipos de voluntariado
Dependiendo del tipo de actividad que se realiza en el pa¨ªs de destino, se pueden encontrar por todo el mundo voluntariados sociales y otros m¨¢s ¡°tur¨ªsticos¡± en los que se intercambia una labor por alojamiento y/o comida. Los voluntariados sociales son actividades solidarias generalmente vinculadas a ONGs en las que el voluntario se vincula a un proyecto social: un programa de cuidado de ni?os, de ense?anza, de construcci¨®n, deportes, medicina, conservaci¨®n del medio ambiente, bienestar animal... Los hay por todo el mundo, incluida Espa?a. Esta clase de voluntariados suelen ofrecer alojamiento y comida a cambio de una tasa, y el desplazamiento corre a cargo del voluntario.
Hay otro tipo de voluntariado que podr¨ªamos llamar ¡°laboral¡±, que consistir¨ªa en intercambiar una labor o un servicio por alojamiento y/o comida: desde limpieza o cuidado de ni?os a trabajo en una granja, o en la recepci¨®n de un alojamiento tur¨ªstico. La mayor¨ªa de estas experiencias est¨¢n vinculadas a plataformas digitales especializadas que ponen en contacto al voluntario con la persona u organizaci¨®n que busca colaboradores. En este caso hay que inscribirse a la web y apuntarse a alguna de las actividades ofrecidas por los anfitriones.
Plataformas para viajar como voluntario
Lo m¨¢s f¨¢cil para buscar actividades voluntarias es darse de alta en una plataforma, ya que es la forma m¨¢s segura de tener referencias concretas del anfitri¨®n y el apoyo de una plataforma con experiencia. Hay muchas y algunas son muy parecidas.
Volunteer World es la mayor plataforma de comparaci¨®n de voluntariados en el extranjero en todo el mundo. Busca y compara los mejores programas de voluntariado que ofrecen las organizaciones de viajes y las ONG locales de una forma r¨¢pida y simple. Worldpackers tal vez sea la m¨¢s conocida, con mucha informaci¨®n y recomendaciones, tambi¨¦n de bloggers de viajes que reciben una contraprestaci¨®n por dicha labor. Tiene numerosas opciones para todos los gustos y es una buena forma de empezar para estancias cortas de entre una semana y un mes. En la misma l¨ªnea est¨¢ HelpX, con una gran diversidad de opciones, aunque tambi¨¦n incluye actividades sociales. Si buscamos una experiencia m¨¢s concreta, podemos ir a WWOOF, una plataforma que facilita intercambios en torno ¡°a la agricultura org¨¢nica y la vida sostenible, ofreciendo a los voluntarios aprendizaje sobre alimentos y agricultura org¨¢nica¡±. El objetivo final para WWOOF, seg¨²n sus propias palabras, es crear una red dentro del movimiento ecologista. Est¨¢ en m¨¢s de 130 pa¨ªses de todo el planeta.
En Workaway la principal diferencia con otras plataformas es que puedes consultar las opciones disponibles (en estos momentos ya llegan a 50.000), aunque para contactar con un anfitri¨®n deber¨¢s pagar la tasa de membres¨ªa. En Workaway es posible registrarse como pareja, como familia y acceder a actividades en grupo.
Pero tambi¨¦n hay plataformas en las que no hay que pagar, como Volunteers Base, una alternativa sin fines de lucro, pero con un funcionamiento similar a otras webs, que incluye opciones en ¨¢mbitos como la construcci¨®n, la ense?anza de idiomas, el trabajo comunitario, la limpieza de casas o el cuidado de animales. En la misma l¨ªnea esta Cooperating Volunteers, plataforma espa?ola donde la informaci¨®n es especialmente sencilla.
Consejos para viajar como voluntario
Conviene aclarar que no significa viajar gratis: en principio se recibe alojamiento y en algunos casos comida, pero no una contraprestaci¨®n econ¨®mica (solo en muy pocos casos). No es por tanto ni un trabajo ni un contrato laboral. Lo que s¨ª que hay que pagarse siempre es el desplazamiento y todos los gastos extra y las excursiones para conocer el pa¨ªs. Y aunque algunas plataformas ofrecen un seguro para este tipo de viajes, conviene llevar algo de dinero para posibles emergencias. Adem¨¢s, hay que viajar siempre como turista y tener billete de vuelta, para no tener problemas en los controles de emigraci¨®n, que podr¨ªan pensar que vamos a trabajar sin contrato.
Si lo que nos preocupa es saber qu¨¦ nos vamos a encontrar en el destino, hay much¨ªsimas opiniones de otros voluntarios en estas plataformas. Conviene saber que nos tienen que respetar el horario de trabajo predeterminado y darnos alg¨²n d¨ªa libre si vamos a estar m¨¢s de una semana. A cambio, el voluntario debe tambi¨¦n respetar las condiciones acordadas y estar dispuesto a ser flexible.
Pero, sobre todo, hay que viajar sabiendo que el voluntariado no son vacaciones y que nos implicar¨¢ un esfuerzo. La recompensa est¨¢ en que viviremos el pa¨ªs desde dentro, como no lo har¨¢ nunca un turista convencional. Lo cierto es que casi todos los voluntarios repiten, as¨ª que est¨¢ claro que tiene sus recompensas.
Algunos proyectos por el mundo para viajar como voluntario
Ciencia ciudadana en la Ant¨¢rtida
En la Ant¨¢rtida, es posible realizar una aportaci¨®n tangible ¨Dy sentirse un bi¨®logo marino¨D en una expedici¨®n de ciencia ciudadana, recopilando datos para la creaci¨®n de la primera zona marina protegida de la pen¨ªnsula ant¨¢rtica. Tambi¨¦n hay opciones para acompa?ar, en plena naturaleza y en los confines del planeta, viendo icebergs y, probablemente, ping¨¹inos y ballenas, a cient¨ªficos que estudian la vida marina y las repercusiones del cambio clim¨¢tico. Las expediciones suelen ser entre octubre y marzo.
Cada a?o, el Programa Ant¨¢rtico de Estados Unidos env¨ªa a unas 3.000 personas a trabajar en bases de investigaci¨®n del continente m¨¢s meridional del mundo. Hace falta personal no cient¨ªfico de apoyo: carpinteros, panaderos, electricistas, operadores de maquinaria¡ Estos empleos suelen ser para el verano austral ¨Dde octubre a febrero¨D, cuando puede llegarse a las bases en avi¨®n. La base m¨¢s grande es la de McMurdo, en el extremo sur de la isla de Ross. Se puede solicitar empleo desde la web de la National Science Foundation (EE UU).
Pero tambi¨¦n hay cada vez m¨¢s turoperadores, sobre todo de cruceros por la regi¨®n ant¨¢rtica, que incorporan eventos participativos de ciencia ciudadana en sus itinerarios. Destaca el BioBlitz, un evento donde se colabora con cient¨ªficos para hallar e identificar tantas especies como sea posible en una zona designada durante un tiempo determinado (normalmente 24 horas). Pero hay muchas iniciativas m¨¢s en las que el viajero puede participar con poco m¨¢s que un tel¨¦fono inteligente y conexi¨®n a internet. Otra opci¨®n ser¨ªa colaborar desde el sof¨¢ de casa, etiquetando ping¨¹inos en el oc¨¦ano Ant¨¢rtico, por ejemplo, o escaneando im¨¢genes nocturnas del cielo para ayudar a los cient¨ªficos a conocer mejor las grumosas galaxias.
Conservar vida salvaje en Costa Rica
Costa Rica ocupa solo el 0,03% de la superficie del planeta, pero alberga casi el 6% de su biodiversidad. De costa a costa, se puede echar un cable en labores de rescate, investigaci¨®n, protecci¨®n y rehabilitaci¨®n: trabajar en una base de forestales del Parque Nacional Corcovado, en la pen¨ªnsula de Osa, cuidar a perezosos y monos rescatados en un santuario de la costa del Pac¨ªfico o ver tortugas marinas en el Parque Nacional Tortuguero.
Empoderamiento de la mujer en Bali
Si preferimos los proyectos sociales, podemos colaborar con ONGs en Bali que ofrecen formaci¨®n que empodera a las mujeres para acceder a empleos mejor pagados, montar negocios y mejorar la salud de sus familias. Se puede ayudar con clases de idiomas, programas de salud, educaci¨®n medioambiental o formaci¨®n empresarial. Tambi¨¦n hay que abrirse a aprender: empaparse de la cultura y las tradiciones del lugar. En el tiempo libre, lo suyo es caminar, relajarse en las aguas termales y sumergirse en experiencias culturales.
Protecci¨®n del medio ambiente en Australia
En esta enorme isla continente se puede contribuir a conservar entornos espectaculares: bucear en monitorizaciones y limpiezas de la Gran Barrera de Coral, reforestar con especies aut¨®ctonas la selva de Daintree (Queensland) junto a los ind¨ªgenas kuku yalanji, eliminar especies invasivas de las monta?as Azules de Nueva Gales del Sur o ayudar en la recuperaci¨®n de incendios y el cuidado de los bosques de Australia Meridional.
Un proyecto muy concreto es el Ningaloo Turtle Program: en Australia viven seis de las siete especies de tortuga marina; las comunidades locales se apoyan en voluntarios para monitorizar y proteger a estos animales en ¨¦poca de cr¨ªa. En el arrecife de Ningaloo (Australia Occidental), los voluntarios se levantan al alba para peinar las playas en busca de huevos que proteger de depredadores, acampan en playas remotas para controlar asentamientos de cr¨ªa o participan en rescates de tortugas.
Proyectos ambientales en Per¨² y Estados Unidos
En las alturas del Parque Nacional Huascar¨¢n (Per¨²), los voluntarios del American Alpine Institute, una instituci¨®n alpinista de EE UU, recorren los glaciares y los valles alpinos de la escarpada cordillera Blanca para recopilar datos sobre la contaminaci¨®n del aire, los pastos, la calidad del agua... Hacen falta sobre todo escaladores. Se despiertan en tiendas de campa?a en g¨¦lidas ma?anas a gran altitud, se toman su caf¨¦ entre cumbres nevadas y se disponen a recoger datos, atentos a vicu?as, c¨®ndores y osos andinos.
Adventure Scientists es una organizaci¨®n con sede en Montana que busca amantes del aire libre que contribuyan a la trazabilidad de la madera, creando bases de datos con muestras de hojas, semillas y lena para monitorizar las cifras de ejemplares y dificultar la tala ilegal. Los voluntarios recorren los bosques Apalaches meridionales o las costas orientales de Maryland buscando robles blancos. O localizan maderas duras ¨Dfrecuentes v¨ªctimas de los furtivos¨D en el norte de M¨ªchigan. Hay m¨¢s proyectos en curso.
Vacaciones de ciencia ciudadana: de viaje y sin salir de casa
La investigaci¨®n cient¨ªfica medioambiental necesita voluntarios entusiastas: dar pie a la ciencia ciudadana. Esta monitorizaci¨®n, medici¨®n y registro, desde movimientos de animales ins¨®litos hasta los restos arrastrados por el mar a la orilla, ayuda a los cient¨ªficos a entender y proteger el planeta. Y muchos proyectos tienen sede en zonas tur¨ªsticas.
El Earthwatch Institute organiza expediciones de ciencia ciudadana por todo el mundo dise?adas y lideradas por cient¨ªficos, desde trabajar con lugare?os en Bali para combatir la contaminaci¨®n de pl¨¢sticos hasta estudiar mam¨ªferos en zonas reforestadas de Brasil.
Pero tampoco hace falta viajar para contribuir a la ¡°ciencia ciudadana¡±. Happy Whale nos anima a subir fotos de encuentros con mam¨ªferos marinos para ayudar a entender las tendencias de crecimiento poblacional. Y en la app iNaturalist, podemos recopilar fotos, compartir comentarios y analizar los descubrimientos. Globe at night es un proyecto internacional que invita a medir la luminosidad del cielo nocturno y as¨ª concienciar sobre los efectos de la contaminaci¨®n lum¨ªnica.
Los abejorros norteamericanos son el objetivo de Bumble Bee Watch que les sigue el rastro para ayudar a determinar el estatus y qu¨¦ se necesita para proteger a estos insectos. Y los ping¨¹inos son los protagonistas de Penguin Watch, que ayuda a proteger los etiquet¨¢ndolos en l¨ªnea a trav¨¦s de este proyecto de ciencia ciudadana en Zooniverse, la plataforma popular m¨¢s grande del mundo para la investigaci¨®n.
Los amantes de los p¨¢jaros pueden entrar en eBird y registrar avistamientos, fotos y grabaciones de aves para compartirlos con esta iniciativa global para mapear la avifauna.
En FrogID se ocupan de las ranas y registran las llamadas de apareamiento. Aqu¨ª se puede encontrar si la especie que encontremos coincide con las de la app y enviar los descubrimientos a la base de datos de FrogID para ayudar a salvar la menguante poblaci¨®n de ranas en Australia.
En Journey North se registran los avistamientos de mariposas monarca, pigargos americanos o colibr¨ªs en sus rutas migratorias en Norteam¨¦rica, y Spider Spotter ayuda a los cient¨ªficos europeos a saber c¨®mo las ara?as se adaptan a la vida urbana subiendo fotos de telas de ara?a y de ar¨¢cnidos.
Y no faltan las valiosas algas: en Big Seaweed Search se pueden registrar las macroalgas vivas que se vean en el litoral del Reino Unido a trav¨¦s de esta iniciativa del Natural History Museum, uno de los varios proyectos de ciencia ciudadana de este museo.
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