Victoire de Castellane: ¡°La elegancia tal y como estaba concebida hasta ahora ya no tiene sentido¡±
La arist¨®crata francesa lleva m¨¢s de 25 a?os al mando de la direcci¨®n art¨ªstica de Dior Joaillerie, la divisi¨®n de joyas de la maison parisiense, y no da se?ales de fatiga. Acaba de presentar la colecci¨®n de alta joyer¨ªa m¨¢s grande de su carrera.
Victoire de Castellane (Neuilly-sur-Seine, 61a?os) no sabe cu¨¢ndo ni c¨®mo comenz¨® su fascinaci¨®n por las joyas, pero recuerda con claridad el hormigueo que sent¨ªa en la piel cada vez que ve¨ªa a su abuela espa?ola, Silvia Rodr¨ªguez de Rivas, condesa de Castilleja de Guzm¨¢n. ¡°Ella siempre llevaba muchas joyas, todo el d¨ªa. Me encantaba el sonido que produc¨ªan todas sus piezas juntas. Yo entraba en un trance y me quedaba hipnotizada escuchando el ruido de las piedras. Para m¨ª era como ASMR, aunque entonces no sab¨ªa qu¨¦ era ASMR¡±, explica en conversaci¨®n con El Pa¨ªs Semanal. La directora art¨ªstica de Dior Joaillerie se refiere al concepto de autonomous sensory meridian response (respuesta sensorial meridiana aut¨®noma en espa?ol, una sensaci¨®n f¨ªsica y psicol¨®gica de calma y tranquilidad ante ciertos est¨ªmulos auditivos). ¡°Realmente sent¨ªa placer al escuchar y mirar sus joyas¡±, repite. De hecho, est¨¢ convencida de que no habr¨ªa sido dise?adora de joyas de no ser por su abuela paterna, a la que recuerda como una mujer elegante y un poco intimidante.
Con solo tres a?os, la peque?a Victoire pidi¨® tener su propio joyero, a imagen del de su aristocr¨¢tica abuela, para guardar un brazalete de pl¨¢stico en forma de serpiente. Con 5 a?os, desmont¨® una pulsera tipo charm y convirti¨® los colgantes en unos pendientes. Con 12, llev¨® sus medallas de la primera comuni¨®n a un orfebre para que las fundiera e hiciera de ellas un anillo. Con 16, transform¨® unos pendientes con dos corazones de amatistas en una sortija. Con 21, ya dise?aba joyas para la casa Chanel, bajo las ¨®rdenes de Karl Lagerfeld. Su t¨ªo Gilles Dufour era la mano derecha del k¨¢iser de la moda. ¡°Pero entr¨¦ a Chanel por casualidad¡±, aclara De Castellane. ¡°En esa ¨¦poca ten¨ªa un amigo que trabajaba en el departamento de prensa de la casa y fue as¨ª como empec¨¦ a trabajar all¨ª¡±.
En 1998, Bernard Arnault, propietario del gigante del lujo LVMH y actualmente el hombre m¨¢s rico del mundo, la convenci¨® para que cambiara Chanel por Dior. Con 35 a?os, De Castellane ya era directora art¨ªstica de la maison. M¨¢s de 25 a?os despu¨¦s, es una de las creativas m¨¢s antiguas de la casa, superando con creces al mism¨ªsimo Christian Dior ¡ªel fundador solo estuvo una d¨¦cada al mando de la direcci¨®n creativa de la firma que lleva su nombre¡ª y a otros modistas legendarios que pasaron por el n¨²mero 30 de la Avenue Montaigne, como Yves Saint Laurent o Gianfranco Ferr¨¦. ¡°S¨ª, soy una veterana, pero al mismo tiempo me siento como si tuviera cinco a?os y fuera esa ni?a que est¨¢ jugando encerrada en su habitaci¨®n, al fondo del pasillo. Y prefiero seguir as¨ª. Me gusta estar al fondo del pasillo, lejos de los adultos¡±, dice. Eso lo aprendi¨® de Lagerfeld, su mentor, que falleci¨® en 2019, con 85 a?os. ¡°Fue ¨¦l quien me transmiti¨® la idea de que uno puede disfrutar y divertirse trabajando en algo serio. El trabajo no deber¨ªa estar re?ido con la diversi¨®n¡±.
De Castellane lleva toda su vida intentando huir del ¡°mundo de los adultos¡±, pero los adultos la adoran y veneran su trabajo. A comienzos del mes de junio, present¨® la colecci¨®n de alta joyer¨ªa m¨¢s grande de su carrera con un desfile nocturno en los jardines de Villa Erba, un palacete de tintes neorrenacentistas a orillas del lago de Como, en el norte de Italia. Les Jardins de la Couture, que es como la llam¨®, est¨¢ conformada por 170 piezas; 49 de ellas son ¨²nicas en su tipo. Tard¨® m¨¢s de un a?o y medio en desarrollarla. ¡°Me inspir¨¦ en un jard¨ªn imaginario, en el jard¨ªn de monsieur Christian Dior. ?l forj¨® la identidad de la casa y todos los dise?adores de la maison seguimos trabajando sus c¨®digos m¨¢s queridos: la rosa, el cannage¡¡±, explica.
Insiste en que el jard¨ªn en el que se inspir¨® para esta colecci¨®n no existe m¨¢s que en su mente, pero algunas piezas evocan sitios como Granville, Milly-la-For¨ºt o Montauroux, lugares que fueron clave en la vida y la obra de Christian Dior. Desde que present¨® el new look en 1947, el modista recurri¨® muchas veces a los recuerdos de su ni?ez en Normand¨ªa y en su castillo en Fayence para crear sus colecciones: las faldas tipo corola, las rosas bordadas o brocadas, los adornos florales, los estampados pastorales, la toile de Jouy¡ Victoire de Castellane ha cogido el testigo de monsieur Dior y ha traducido esos c¨®digos en sus joyas, aunque la inspiraci¨®n floral nunca es literal en sus piezas. Presenta los motivos de manera arquitect¨®nica, casi abstracta, pero se intuyen los parterres de brillantes, los ¨®palos dispuestos como si estuvieran cuidadosamente plantados y las gemas engastadas como p¨¦talos. Algunos de los planteamientos de esta colecci¨®n revelan peque?as decoraciones imaginarias, la escenograf¨ªa po¨¦tica de un teatro en miniatura donde las flores, las mariposas y los arco¨ªris est¨¢n entrelazados.
Las t¨¦cnicas y texturas de la alta costura son otras fuentes de inspiraci¨®n para la dise?adora. Maria Grazia Chiuri, directora creativa de Dior, cre¨® 42 vestidos exclusivamente para la presentaci¨®n de la colecci¨®n Les Jardins de la Couture en el lago de Como. ¡°Fue muy f¨¢cil trabajar con Maria Grazia. Nos vimos solo una vez. Le ense?¨¦ los dibujos y colores de las joyas y, bas¨¢ndose en eso, ella fue creando los vestidos. Las prendas me fueron llegando por separado y yo ten¨ªa que elegir la pieza adecuada para cada una. Pero no me llegaron todas a la vez. Esa fue la parte m¨¢s ardua¡±, reconoce.
Tras el desfile, casi a medianoche, con el cielo iluminado por un espect¨¢culo de fuegos artificiales, la dise?adora recibi¨® una ovaci¨®n. Entre los invitados estaban los clientes m¨¢s importantes de Dior Joaillerie, llegados de todas partes del mundo, y celebridades como la arist¨®crata Beatrice Borromeo Casiraghi o las actrices Rosamund Pike, Elizabeth De?bicki y Michelle Yook. Delphine Arnault, nueva presidenta de Christian Dior y heredera del gigante del lujo LVMH, aplaudi¨® con mucho entusiasmo la colecci¨®n. Victoire recibi¨® las felicitaciones y elogios rodeada de su familia. Estaban su marido, el conocido director de arte Thomas Lenthal, y sus cuatro hijos; su hermana, Mathilde Favier, directora de relaciones con celebridades de Dior, y su prima, Cordelia de Castellane, responsable creativa de Dior Home, la l¨ªnea que tiene la maison para el hogar.
A la ma?ana siguiente, las joyas se ense?aron en los jardines del lujoso Hotel Villa d¡¯Este, en el pueblo de Cernobbio. Antes del mediod¨ªa, muchas de las piezas m¨¢s importantes de la colecci¨®n ya se hab¨ªan vendido. En menos de 24 horas, gran parte de las creaciones de De Castellane, que acababan de salir del taller, ya ten¨ªan due?o. ¡°Llevar una joya te puede hacer sentir m¨¢s fuerte, m¨¢s poderoso, protegido¡ Es un sentimiento muy arcaico¡±, reflexiona. Las suyas consiguen generar todas esas sensaciones. Eso explica por qu¨¦ lleva m¨¢s de dos d¨¦cadas en la maison, una proeza en el siempre cambiante negocio de la moda. ¡°Estoy en una casa de moda, pero no trabajo siguiendo las reglas o los tiempos de la moda. Yo voy m¨¢s all¨¢, trasciendo la moda¡±, apunta. ¡°Adem¨¢s, los tiempos de producci¨®n de una joya y de una prenda de ropa son muy distintos. En la moda se produce una colecci¨®n en dos meses, mientras que una colecci¨®n de alta joyer¨ªa exige dos a?os de trabajo. Lo importante para m¨ª es no cansarme¡±.
Por ahora, no da se?ales de fatiga. Presenta al menos dos colecciones al a?o, aunque admite que ya ha perdido la cuenta de cu¨¢ntas ha hecho en estos 25. Desde que Kim Jones asumi¨® las riendas de Dior Men, la l¨ªnea masculina de Dior, tambi¨¦n dise?a una pieza ¨²nica de alta joyer¨ªa para cada colecci¨®n del creador ingl¨¦s. Empez¨® dise?ando el colgante Cactus Jack, un collar de perlas acabado con un cactus y flores de la pradera, para la temporada primavera-verano 2022 que ide¨® Jones junto a la estrella tejana del rap y productor Travis Scott. ¡°Siempre quise hacer algo con Victoire. Creo que es bonito trabajar con todos los aspectos de Dior. Es una casa en la que hay que trabajar con todo el mundo¡±, explic¨® Jones el verano pasado. ¡°Para m¨ª las joyas no tienen g¨¦nero. Pueden llevarlas mujeres y hombres de manera indistinta. Si me remonto a la historia, los reyes y los maraj¨¢s ya llevaban collares de perlas y broches¡±, se?ala De Castellane a El Pa¨ªs Semanal. Le encanta ver a un hombre llevando algunas de las creaciones que pens¨® para una mujer. ¡°Mi padre, por ejemplo, sol¨ªa usar joyas. Quiz¨¢ ¨¦l fue mi primera influencia, incluso antes que mi abuela¡±, dice.
Ella es la ¨²ltima de una larga saga que lleva siglos dictando c¨¢tedra sobre estilo en Francia. Su tatarabuelo, Boni de Castellane, fue una personalidad emblem¨¢tica de la belle ¨¦poque, considerado como el hombre m¨¢s elegante de su tiempo. Pero De Castellane reh¨²ye ese t¨¦rmino. ¡°No s¨¦ si el concepto de elegancia exterior tiene sentido hoy en d¨ªa porque los c¨®digos han cambiado. Hay unos clich¨¦s que quedan, como los c¨¢nones de la belleza cl¨¢sica, pero la elegancia, tal y como estaba concebida hasta ahora, ya no tiene sentido¡±, dice. Entonces, ?qu¨¦ es ser elegante? ¡°Para m¨ª significa ser respetuoso y amable con los dem¨¢s¡±, responde con su voz suave. Como dicen los franceses: Touch¨¦.
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