El fiscal del juicio a los investigadores del ¡®caso Cursach¡¯ asegura que intentan apartarle: ¡°Voy a seguir¡±
El representante del ministerio p¨²blico desliga las intervenciones de los m¨®viles de dos periodistas en otra causa de las principales pruebas de este proceso
El fiscal Tom¨¢s Herranz, que dirige la acusaci¨®n contra los instructores del caso Cursach a los que se juzga estos d¨ªas en el Tribunal Superior de Justicia de Baleares por presuntas irregularidades en la instrucci¨®n de la causa contra el mayor empresario de ocio nocturno de Mallorca, Bartolom¨¦ Cursach, ha denunciado este mi¨¦rcoles durante el juicio que los acusados hayan intentado apartarle del caso en varias ocasiones. ¡°?Es el camino que le digan a la sala que me levante y me vaya? No es el camino y lo saben. Saben perfectamente cu¨¢l es el camino y lo han hecho, lo han caminado y han pedido a mi jefe que me separe. Pero estoy aqu¨ª¡±, ha dicho Herranz.
Durante una exposici¨®n de dos horas en el turno de cuestiones previas, el fiscal ha subrayado que han intentado alejarle del caso con ¡°dos intentos de querella¡± que se est¨¢n tramitando en distintos ¨®rganos jurisdiccionales. Herranz se ha mostrado firme y ha lanzado un mensaje: ¡°Si la finalidad es causar cualquier tipo de temor o intimidaci¨®n sobre este representante del ministerio fiscal debo informarle que no va a ser el caso, voy a seguir hasta que termine el juicio¡±. La segunda sesi¨®n de esta vista sigue abordando las cuestiones previas de la causa ¨Den las que las partes revisan la instrucci¨®n, bien con denuncia de fallos o defendiendo el trabajo¨D. El representante fiscal ha rebatido los argumentos expuestos por las defensas en la primera sesi¨®n, en la que reclamaron la nulidad alegando que las conversaciones de WhatsApp que dieron origen a la causa no fueron obtenidas legalmente.
Herranz ha desligado los listados de llamadas obtenidos de los tel¨¦fonos m¨®viles de dos periodistas que informaban sobre el caso Cursach en otra causa, y que fueron declarados nulos, de las pruebas que la Fiscal¨ªa ha presentado en esta investigaci¨®n para apuntalar las acusaciones por presuntos delitos de revelaci¨®n de secretos contra el juez, el fiscal y los cuatro agentes de la Polic¨ªa Nacional. La tesis de que toda la causa parte de la informaci¨®n obtenida de esos dos tel¨¦fonos es una de las principales l¨ªneas de defensa de los acusados. ¡°No se incluye ninguna [informaci¨®n] cuya fuente de prueba sean los listados de las llamadas. Hay muchas pruebas que no tienen nada que ver con los listados de llamadas¡±, ha expuesto Herranz.
Parte de su intervenci¨®n se ha centrado en tratar de tumbar otro de los argumentos de las defensas, que esgrimen que la entrega de los tel¨¦fonos m¨®viles de dos agentes del grupo de blanqueo no fueron voluntarias. En esos tel¨¦fonos se encontraron las conversaciones que dan origen a esta causa, conversaciones de un chat privado en el que los investigadores intercambiaban opiniones acerca del procedimiento y vert¨ªan calificativos sobre algunos de los implicados. Herranz ha incidido en que ambos polic¨ªas entregaron de forma voluntaria ¡°y sin coacciones¡± sus tel¨¦fonos. El primero, ha dicho, lo hizo tras serle le¨ªdos sus derechos y en presencia de su abogado ¡°sin temor y coacci¨®n¡±. ¡°Estaba confiado, seguro de que no le iba a producir perjuicio alguno. Hab¨ªa borrado los chats, pero pudo oponerse despu¨¦s a su desprecinto, pues fue notificado de ello y no lo hizo¡±. Lo mismo en el caso de la agente de polic¨ªa que, seg¨²n el fiscal, entreg¨® su terminal despu¨¦s de ser puesta en libertad, consintiendo el estudio del mismo y aportando el c¨®digo de desbloqueo.
Tras el fiscal ha llegado el turno de las acusaciones particulares, que representan a empresarios, funcionarios, pol¨ªticos y polic¨ªas inculpados en el caso Cursach. Todos ellos han defendido la legitimidad para formular acusaci¨®n y han pedido a la sala que contin¨²e con el juicio, adhiri¨¦ndose en su mayor¨ªa a los argumentos de la Fiscal¨ªa. Solo una de ellas, que representa a tres agentes de la polic¨ªa de Palma, ha retirado las acusaciones y ha desistido de continuar, aunque se ha reservado el derecho de ejercitar acciones civiles contra los seis acusados.
¡°Si presionas a testigos para que incriminen y digan lo que interesa en ese momento, alguna legitimaci¨®n debe tener mi cliente¡± ha se?alado el abogado ?ngel Arag¨®n, que representa a uno de los detenidos en el llamado caso ORA, una pieza separada que investig¨® el presunto cobro de sobornos por parte del exdiputado y exconcejal del PP de Palma, ?lvaro Gij¨®n, a cambio de la adjudicaci¨®n del concurso del servicio de estacionamiento regulado de Palma. El letrado que defiende a la familia del exconcejal del PP ?lvaro Gij¨®n ha sido especialmente duro con las exposiciones de las defensas de los procesados. Oriol Rusca ha mostrado a la sala su indignaci¨®n por una serie de ¡°insinuaciones inaceptables y teor¨ªas conspiratorias¡± que afectan a abogados y polic¨ªas. ¡°S¨®lo quiero que quede claro, nosotros no somos as¨ª, no hacemos esto como a lo mejor otros s¨ª que lo hicieron. Nosotros no. Respetamos los derechos de todo el mundo y no buscamos teor¨ªas de la conspiraci¨®n ad hominem para intentar enturbiar este juicio, con lo cual, se?or¨ªa, nosotros no somos de esta cala?a¡± ha dicho visiblemente enfadado.
El abogado de Bartolom¨¦ Cursach, Enrique Molina, que tambi¨¦n representa a otros tres procesados por el caso que investig¨® al empresario mallorqu¨ªn, ha defendido que la sentencia del caso en el que se intervinieron los m¨®viles a dos periodistas dictamin¨® que se vulner¨® el derecho a la tutela judicial efectiva de los profesionales a trav¨¦s del derecho de acceso al proceso, pero no el derecho a distribuir informaci¨®n veraz. Con ese razonamiento, el abogado ha defendido que no se tienen que ver afectadas o invalidadas todas las actuaciones.
El juicio parar¨¢ en las pr¨®ximas semanas para que la sala pueda decidir sobre las cuestiones previas. Si el tribunal decide seguir con el juicio, el d¨ªa 22 de junio se retomar¨¢n las sesiones con las declaraciones de los investigados.
M¨¢s de 500 a?os de c¨¢rcel
En el banquillo del Tribunal Superior de Justicia de Baleares se sientan el magistrado Manuel Penalva y el fiscal Miguel Ángel Subirán, ambos jubilados, además de cuatro funcionarios de la Policía Nacional de Baleares. La fiscalía reclama para los seis procesados más de 500 años de cárcel por presuntos delitos de revelación de secretos, detención ilegal, obstrucción a la justicia y prevaricación judicial cometidos durante el tiempo que estuvieron al cargo de una de las investigaciones más controvertidas de los últimos años en las islas.
La fiscalía los acusa de cometer hasta 27 presuntas filtraciones de datos a medios de comunicación, que publicaron después la información en forma de noticia. También de irregularidades en la instrucción del llamado caso Ora, una pieza desgajada de la causa principal que el ministerio público considera que está basada en la declaración de un testigo protegido con un contenido “completamente inconcreto y especulativo”.
El proceso se celebrará hasta septiembre en los juzgados de Sa Gerreria, en el casco antiguo de Palma, un lugar que se ha elegido para poder acoger a todas las partes personadas. Una vez que se planteen todas las cuestiones previas, el tribunal contempla suspender el juicio para decidir sobre esas cuestiones. Si la vista continúa, se retomará el 22 de junio con las declaraciones de los principales acusados.
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