Las dos muertes de Luc¨ªa Garrido, la mujer que sab¨ªa demasiado

El cad¨¢ver de Luc¨ªa Garrido, de 48 a?os, fue encontrado en la primavera de 2008 flotando en la piscina de la finca Los Naranjos, en Alhaur¨ªn de la Torre (M¨¢laga, 42.531 habitantes), donde resid¨ªa. Hab¨ªa sido golpeada, acuchillada, estrangulada y arrojada a la pileta para que se ahogase. Ahora, 15 a?os despu¨¦s, el caso se juzga con dos ¨²nicos acusados. A un lado, su expareja, Manuel Alonso, a quien se considera autor intelectual del asesinato. Al otro, ?ngel Vaello, supuesto ejecutor de la mujer. No es la primera vez que ambos se sientan en el banquillo de los acusados. Lo hicieron ya en 2019, cuando en un largo, pol¨¦mico y medi¨¢tico juicio fueron declarados absueltos. El Tribunal Superior de Justicia de Andaluc¨ªa (TSJA) oblig¨® en 2020 a repetirlo por un error en la votaci¨®n del jurado popular y el Tribunal Supremo aval¨® dicha decisi¨®n en 2022. La fiscal¨ªa solicita 23 a?os y seis meses de prisi¨®n para Vaello como autor directo y 25 a?os para Alonso como cooperador necesario, cifras similares a las dos acusaciones particular que representan a la familia. Se prev¨¦ que el pr¨®ximo 7 de noviembre el jurado popular, que dispondr¨¢ de medidas de seguridad especiales para su aislamiento, ofrezca su veredicto.

El contexto que rodea a la muerte de Luc¨ªa Garrido tiene numerosos ingredientes que convierten al caso en un laberinto de especial complejidad. Incluyen corrupci¨®n policial, narcotr¨¢fico y la compraventa de animales ex¨®ticos, como relat¨® la serie documental Luc¨ªa en la telara?a, estrenada en Televisi¨®n Espa?ola a finales de 2021, y el libro Matar a Luc¨ªa, escrito por Jorge Cabezas. Tambi¨¦n contiene una separaci¨®n, despu¨¦s de que ella diese por terminada en 2006 la relaci¨®n sentimental que hasta entonces manten¨ªa con Alonso, con quien no se cas¨®, pero s¨ª tuvo una hija en com¨²n. Tras aquella decisi¨®n, un juez le atribuy¨® a Garrido la custodia de la ni?a y el uso de la vivienda de la finca denominada Los Naranjos. Su expareja se mud¨® a un cortijo cercano, pero con derecho a acceder a la residencia familiar para mantener su negocio: la custodia de animales ex¨®ticos intervenidos en distintas operaciones de la Guardia Civil. All¨ª hab¨ªa, en jaulas, leones y tigres, entre otra fauna salvaje. ¡°Esa finca es el eje del mal: conflu¨ªa en ella una corrupci¨®n bestial a nivel de la Guardia Civil¡±, a?ade Jos¨¦ Guerrero, que forma parte tambi¨¦n de la acusaci¨®n particular, representando a la madre y la hija de Luc¨ªa.

La ruptura fue clave. ¡°A partir de ese momento, Luc¨ªa Garrido se convirti¨® en testigo directo y presencial de las actividades l¨ªcitas e il¨ªcitas de Manuel Alonso¡±, relata el fiscal, que subraya que ¨¦l intent¨® echarla de la finca para ocuparla ¨¦l con su nueva pareja, pero no lo consigui¨®. ¡°Luc¨ªa dej¨® de ser una testigo inc¨®moda para convertirse en una aut¨¦ntica amenaza¡±, a?ade fiscal¨ªa, por eso su entorno le propuso acabar con la vida de Garrido. ¡°Luc¨ªa sab¨ªa demasiado: se hab¨ªa peleado con este se?or, ten¨ªa muchas pruebas en su contra y era un problema¡±, insiste tambi¨¦n Luis Portero, abogado que representa a parte de la familia de la v¨ªctima desde el inicio de la instrucci¨®n del caso. ¡°Es la cr¨®nica de una muerte anunciada¡±, ha insistido el letrado en la primera sesi¨®n del juicio este lunes, en la que tambi¨¦n se ha seleccionado al jurado popular y en el que la abogada de Alonso ha anunciado que su cliente ha renunciado a que le represente. ¡°No puedo defender a una persona que ni me habla¡±, ha dicho. El magistrado del tribunal ha respondido que ya resolvi¨® esa cuesti¨®n y que el juicio seguir¨¢ adelante.

Durante esta primera jornada el fiscal ha relatado su versi¨®n del crimen, que desde su punto de vista tuvo dos motivos: ¡°el odio¡± hacia la mujer ¡°como en cualquier caso de violencia de g¨¦nero¡± y un m¨®vil econ¨®mico por las supuestas actividades delictivas que se desarrollaban en la vivienda familiar. ¡°Fue un crimen muy bien planeado¡±, ha insistido el fiscal, que seg¨²n su relato arranc¨® a finales de marzo con varias reuniones en las que particip¨® ?ngel Vaello, que entonces formaba parte del grupo de delincuentes denominado Ni?os de Fuengirola y que recibi¨® una oferta econ¨®mica para cometer el asesinato. Acept¨®. Alonso ni estuvo en ese encuentro ni conoc¨ªa al sicario, ¡°pero propici¨® o consinti¨® su contrataci¨®n¡± con el fin previsto, insiste el fiscal. Y luego s¨ª que mantuvo encuentros con ¨¦l y le dio ¡°ayudas decisivas¡± para cometer el delito.

La acusaci¨®n p¨²blica sostiene que la expareja de Garrido le entreg¨® a Vaello una llave para poder entrar en la finca sin problemas, retir¨® a dos mastines que ten¨ªa sueltos para proteger el recinto y que en el periodo de d¨ªas previsto para el asesinato realiz¨® distintos ¡°viajes in¨²tiles¡± para dejar rastros alejados de Alhaur¨ªn de la Torre y as¨ª crear una coartada. El 30 de abril de 2008 Vaello entr¨® a la finca, se escondi¨® y cuando Garrido lleg¨®, le golpe¨® con un ladrillo y luego le clav¨® un cuchillo en el cuello antes de arrastrarla a la piscina, donde la arroj¨®. All¨ª falleci¨® por ahogamiento y asfixia. El sicario cogi¨® luego el bolso de la mujer, lo vaci¨® para llevarse su m¨®vil y se dej¨® la llave que hab¨ªa utilizado. Ese despiste es clave: all¨ª fue hallado su ADN, que sirvi¨® para su identificaci¨®n ¡°como autor material del crimen¡±, seg¨²n el fiscal. Tras su detenci¨®n pas¨® dos a?os en prisi¨®n provisional.

Es pr¨¢cticamente la misma versi¨®n que tanto la fiscal¨ªa como las dos acusaciones particulares sosten¨ªan en 2019 y mantienen ahora. La ¨²nica diferencia radica ahora en que entonces hab¨ªa dos agentes de la Guardia Civil acusados por su relaci¨®n con los hechos. Tambi¨¦n fueron absueltos entonces y el TSJA entend¨ªa que el fallo en la votaci¨®n no ten¨ªa que ver con ellos, as¨ª que ya no son juzgados. Ahora solo acudir¨¢n llamados a declarar por la defensa. Como ellos pasar¨¢n por la sala un buen n¨²mero de testigos y peritos, como ocurri¨® hace cuatro a?os en un largo juicio donde las defensas se quejaron de c¨®mo los acusados y su entorno compart¨ªan espacio con el jurado popular. Para evitar que se repita ¡°el circo¡± denunciado por los abogados, el magistrado presidente ha dado instrucciones a la seguridad del edificio para que haya un control de acceso a la sala de vistas y ¡°evitar cualquier tipo de contacto de los miembros del jurado con cualesquiera otras personas que no sean estrictamente los funcionarios que prestan servicio en la Oficina del Tribunal del Jurado de esta Audiencia Provincial¡±, seg¨²n fuentes del TSJA. El portavoz de la familia de Garrido, Ignacio Carrasco, ha pedido tambi¨¦n esta ma?ana ¡°un juicio limpio¡± a pesar de que, denuncian, ¡°muchas pruebas han desaparecido¡±.

Alrededor del crimen de Luc¨ªa Garrido hubo otras actuaciones policiales que acabaron en los tribunales y otras que est¨¢n pendientes a¨²n de hacerlo. En 2009, el propio Manuel Alonso fue juzgado como autor de la muerte de dos colombianos que asaltaron su finca, como ¨¦l mismo confes¨®. Fue absuelto por el tribunal por entender que dispar¨® en leg¨ªtima defensa, aunque el caso se volver¨¢ a juzgar porque la jueza instructora entendi¨® en 2020 que existen dudas de si sab¨ªa que se iba a producir ese asalto y se prepar¨® con armas para repelerlo. En 2010 tambi¨¦n fue ser detenido, esta vez junto a una veintena de personas entre las que estaba el teniente de la Guardia Civil Valent¨ªn F. ¡ªque hab¨ªa supervisado las investigaciones tanto del asesinato de Garrido como de los dos asaltantes¡ª en un caso de narcotr¨¢fico. A Alonso le cayeron tres a?os de prisi¨®n por tr¨¢fico de drogas ¡ªya cumpli¨® y se encuentra en libertad¡ª y el que fuera jefe del Equipo Antidroga de la Guardia Civil fue condenado a diez a?os y medio de prisi¨®n por tr¨¢fico de drogas, aunque luego el Tribunal supremo la rebaj¨® a tres a?os y nueve meses. Igualmente, queda pendiente el juicio a dos peritos que testificaron en 2019 y para quienes la fiscal¨ªa pide dos a?os de prisi¨®n por falso testimonio por, supuestamente, mentir sobre el rean¨¢lisis de muestras de ADN que sirvi¨® para identificar a Vaello.