Los socios del PSOE descalifican con gran dureza al juez Garc¨ªa-Castell¨®n
Sumar lo acusa de actuar ¡°como en el Tribunal de Orden P¨²blico franquista¡±
El PSOE se mantuvo al margen esta vez, tras las cr¨ªticas de la pasada semana del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y asociaciones de jueces a la vicepresidenta tercera del Gobierno, Teresa Ribera, por cuestionar la imparcialidad del magistrado de la Audiencia Nacional Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n. Pero los socios y aliados del Gobierno aprovecharon este martes los focos sobre la Comisi¨®n de Justicia del Congreso, donde se aprobaba el dictamen de la proposici¨®n de ley de amnist¨ªa, para descalificar a los jueces que se han manifestado contra esta futura norma. El nombre de Garc¨ªa-Castell¨®n ha salido a relucir profusamente en algunas intervenciones. El m¨¢s duro ha sido el diputado de Sumar Gerardo Pisarello, quien lo ha acusado de ¡°actuar como si la Audiencia Nacional fuese el viejo Tribunal de Orden P¨²blico de los tiempos del franquismo¡±.
Garc¨ªa-Castell¨®n est¨¢ en el punto de mira del Gobierno y sus aliados por acusar de terrorismo al expresident Carles Puigdemont y a la secretaria general de ERC, Marta Rovira, ambos huidos en el extranjero. El juez, contra el criterio de la Fiscal¨ªa, sostiene que ambos instigaron la manifestaci¨®n que en octubre de 2019 bloque¨® el aeropuerto de Barcelona en protesta por la sentencia del proc¨¦s. Y de ah¨ª deriva que los dos podr¨ªan ser responsables de la muerte de un turista franc¨¦s que sufri¨® un infarto ese mismo d¨ªa en las mismas instalaciones, a pesar de que ni un juzgado de Barcelona ni los Mossos hallaron la menor relaci¨®n entre ese suceso y el bloqueo del aeropuerto.
Las tesis de Garc¨ªa-Castell¨®n han tenido una influencia directa en la recta final de las negociaciones para redactar el texto de la futura ley, hasta el punto de que se han introducido algunas cautelas a fin de evitar que el caso que instruye ese juez pueda dificultar la aplicaci¨®n de la amnist¨ªa. Y el veterano magistrado ¡ªse jubilar¨¢ en octubre al cumplir 72 a?os¡ª tambi¨¦n estuvo muy presente en las intervenciones de algunos portavoces en la Comisi¨®n de Justicia. Abri¨® la veda Jon I?arritu, de EH Bildu, quien lo tild¨® de ¡°magistrado pr¨®ximo al PP¡± y afirm¨® que ¡°est¨¢ utilizando toda la ingenier¨ªa jur¨ªdica a su alcance, llegando a l¨ªmites del rid¨ªculo¡± para encausar a los dirigentes independentistas. Seg¨²n I?arritu, su instrucci¨®n judicial ¡°banaliza en extremo el terrorismo¡± y persigue ¡°no solo la venganza¡± contra el independentismo, sino que su ¡°objetivo principal es acabar con este Gobierno¡±.
M¨¢s extenso y m¨¢s concreto a¨²n en sus ataques fue Pisarello, quien tambi¨¦n arranc¨® atribuyendo a Garc¨ªa-Castell¨®n proximidad al PP. Y detall¨®: ¡°Sac¨® a Ignacio Gonz¨¢lez [expresidente madrile?o] de la c¨¢rcel, cubri¨® a Dolores de Cospedal, salv¨® a Esperanza Aguirre del caso P¨²nica, no vio indicios de delito en Rajoy, archiv¨® una causa contra el rey [em¨¦rito] y fabric¨® dosieres contra Podemos¡±. Su prop¨®sito es, ahora, prosigui¨® Pisarello, ¡°dinamitar la amnist¨ªa¡±, al igual que otros jueces a quienes calific¨® de ¡°aut¨¦nticos inquisidores que usan el derecho penal del enemigo¡±.
Los grupos independentistas catalanes no citaron por su nombre a Garc¨ªa-Castell¨®n, pero s¨ª aludieron a los intentos de imputar a sus l¨ªderes por terrorismo y atribuyeron a los jueces en general la intenci¨®n de ¡°sabotear¡± la futura ley. Josep Maria Cervera, de Junts, denunci¨® que mezclar al independentismo con actuaciones terroristas supone una ¡°aberraci¨®n jur¨ªdica¡± y un ¡°uso fraudulento de los mecanismos¡± judiciales. Cervera se refiri¨® a la existencia de un manual que ya circula entre juristas con instrucciones para esquivar la aplicaci¨®n de la norma a¨²n en tr¨¢mite.
Por ERC, Pilar Vallugera advirti¨® que ¡°nadie puede garantizar¡± que la ley de amnist¨ªa se vaya a aplicar en los t¨¦rminos en que pretenden sus promotores. Y eso es as¨ª por la actitud hostil que extendi¨® a los jueces en general y a su ¡°entorno medi¨¢tico¡±. ¡°Eso es lo que nos da m¨¢s miedo¡±, a?adi¨® la parlamentaria republicana. ¡°Es el drama de su Estado, una de las cosas m¨¢s graves que est¨¢n sucediendo¡±. Vallugera asegur¨® que hay jueces que ¡°van m¨¢s all¨¢ de la ley¡± y se pregunt¨®: ¡°?Qui¨¦n juzga al juzgador?¡±.
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