S¨¢nchez acudir¨¢ a la cumbre de la OTAN en Washington con Espa?a a la cola del gasto en defensa
La renuncia a aprobar un nuevo presupuesto deja la inversi¨®n militar en el 1,24% del PIB, solo por delante de Luxemburgo y B¨¦lgica
El presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, acudir¨¢ a la cumbre de la OTAN en Washington, entre el 9 y el 11 de julio de este a?o, con los deberes a medio hacer. Aunque el presupuesto de Defensa experiment¨® un fuerte incremento del 26% el a?o pasado, Espa?a sigue estando a la cola del gasto militar entre los pa¨ªses aliados, con el 1,24% del PIB, solo por delante de B¨¦lgica y Luxemburgo. La renuncia a aprobar los Presupuestos de este a?o hace muy dif¨ªcil, seg¨²n los expertos, que se cumpla el compromiso de llegar al 2% del PIB en gasto militar en 2029, asumido en la cumbre de la OTAN en Madrid hace dos a?os.
La cita de Washington tiene una trascendencia especial porque conmemora el 75? aniversario de la fundaci¨®n de la Alianza Atl¨¢ntica y su anfitri¨®n ser¨¢ el presidente estadounidense, Joe Biden, a solo cuatro meses de las elecciones a la Casa Blanca. El candidato republicano, Donald Trump, amenaz¨® en febrero pasado con ¡°animar a Rusia a hacer lo que demonios quiera con los aliados que no pagan¡± su factura en defensa. Estos exabruptos no son compartidos por la Administraci¨®n de Biden, pero el ¡°reparto de cargas¡± con los pa¨ªses europeos es una vieja demanda de Estados Unidos, cualquiera que sea el color pol¨ªtico de su Gobierno, por lo que se da por sentado que el anfitri¨®n leer¨¢ la cartilla a los aliados m¨¢s rezagados; entre ellos, Espa?a.
Seg¨²n datos de la OTAN, solo 11 de los 30 pa¨ªses de la organizaci¨®n superaron el a?o pasado el 2% del PIB en gasto militar, mientras que otros cinco estaban muy cerca, con el 1,79% o m¨¢s; y 14 se quedaron lejos del objetivo fijado en la cumbre de Gales de 2014, que dio una d¨¦cada de plazo para alcanzarlo; es decir, hasta este a?o.
El Ministerio de Defensa esperaba llegar al 1,40% de gasto militar en 2023, pero el fuerte crecimiento econ¨®mico de Espa?a ¡ªsu PIB aument¨® el 2,5%, cinco veces m¨¢s que la media de la zona euro¡ª lo dej¨® a 16 d¨¦cimas de lograrlo. La pr¨®rroga de los Presupuestos del a?o pasado impone, adem¨¢s, un frenazo en el aumento del gasto.
El departamento que dirige Margarita Robles tuvo en 2023 una partida inicial de 12.827 millones de euros que, tras sucesivas ampliaciones de cr¨¦dito, lleg¨® a 14.976, lo que supone m¨¢s de 2.000 millones suplementarios. La OTAN, que computa otros gastos no incluidos en el presupuesto de Defensa, como las pensiones de los militares, lo eleva a 18.000 millones, el 1,26% del PIB.
La no aprobaci¨®n del nuevo presupuesto obliga a Defensa a volver a la casilla de salida de 2023 ¡ªes decir, a los 12.827 millones¡ª y a negociar con Hacienda cr¨¦ditos para financiar las operaciones en el exterior o los programas de armamento en curso. La ventaja es que los techos de gasto plurianual de muchos sistemas de armas (como el veh¨ªculo de apoyo de cadenas o el lanzacohetes Silam) ya han sido aprobados, pero ser¨¢ mucho m¨¢s dif¨ªcil poner en marcha los nuevos. Aunque se valoran f¨®rmulas como reducir los pagos de Defensa a las empresas a cambio de que estas demoren la devoluci¨®n de sus cr¨¦ditos con Industria, la posibilidad de llegar al 1,30% del PIB previsto para este a?o parece remota.
La paradoja radica en que algunos de los pa¨ªses que superan el 2% de gasto militar y en teor¨ªa cumplen con la OTAN son los mismos a los que Espa?a est¨¢ proporcionando seguridad porque no pueden garantiz¨¢rsela por sus propios medios: son los casos de Lituania, a donde el Ej¨¦rcito del Aire acaba de enviar ocho aviones de combate para vigilar durante cuatro meses el espacio a¨¦reo de las rep¨²blicas b¨¢lticas, como viene haciendo por turnos desde hace una d¨¦cada; Letonia, donde el Ej¨¦rcito de Tierra tiene desplegado un batall¨®n de 600 soldados bajo mando canadiense; Eslovaquia, a donde mandar¨¢ a partir de julio una brigada multinacional aportando 700 efectivos; o Rumania, donde reforzar¨¢ con 250 infantes de Marina la brigada francesa. En total, m¨¢s de 1.700 militares espa?oles estar¨¢n desplegados este a?o en el Este de Europa frente a la amenaza rusa.
Ante las cr¨ªticas, S¨¢nchez podr¨¢ alegar que Espa?a es el cuarto pa¨ªs que m¨¢s contribuye a las operaciones de la Alianza Atl¨¢ntica y que un general espa?ol manda su misi¨®n en Irak (NMI por sus siglas en ingl¨¦s), mientras que la base de Rota (C¨¢diz) alberga los seis destructores del escudo antimisiles aliado y, junto a Cartagena (Murcia) y Ma¨® (Menorca), sirve de puerto de apoyo a la flota de la OTAN en el Mediterr¨¢neo.
Pero el problema, coinciden los expertos, no es tanto el rapapolvo que el presidente espa?ol pueda recibir en Washington como el riesgo cierto de que Trump gane las elecciones de noviembre y se desentienda de la suerte de Europa, dej¨¢ndola a merced del expansionismo ruso. La autonom¨ªa europea, evocada durante a?os como una aspiraci¨®n, se ha vuelto, a?aden, una necesidad imperiosa.
En un gesto sin precedentes, Pedro S¨¢nchez recibi¨® el pasado 18 de marzo en La Moncloa a los directivos de las 22 principales empresas espa?oles de defensa. En la cita, a la que asistieron tambi¨¦n la ministra Robles y los responsables de las dos patronales del sector (Aesmide y Tedae), el jefe del Gobierno asegur¨® que mantiene su compromiso de llegar al 2% del PIB en 2029, pese a la renuncia a aprobar los Presupuestos de este a?o, anunciada la semana anterior; y anim¨® a las empresas, seg¨²n algunos asistentes, a ampliar su capacidad de producci¨®n para atender las necesidades de Ucrania y aprovechar las posibilidades que brinda la primera Estrategia Industrial Europea de Defensa, aprobada a principios de marzo.
Adem¨¢s de un escu¨¢lido fondo de 1.500 millones para financiar proyectos de defensa en el periodo 2025-27, la Estrategia contempla que en 2030 al menos el 50% de las compras de armamento de los pa¨ªses europeos sean made in UE y al menos el 40% se dediquen a sistemas conjuntos. Espa?a ya aprob¨® en 2023 su propia Estrategia Industrial de la Defensa, en la que se fijaba como objetivos aumentar la autonom¨ªa estrat¨¦gica en las capacidades consideradas cr¨ªticas; contribuir a la Europa de la Defensa y consolidar una base industrial y tecnol¨®gica militar competitiva y sostenible. Para ello planteaba triplicar la inversi¨®n en armamento y equipos militares en seis a?os, desde los 7.000 millones de euros en 2023 a los 21.000 en 2029, al margen de los gastos de personal y funcionamiento.
Tras la reuni¨®n de La Moncloa, Defensa confirm¨® la entrega de otros 19 carros de combate Leopard 2 a Ucrania, adelantada por Abc. Estos tanques, que se encontraban almacenados en muy mal estado, est¨¢n siendo ya reparados en la planta de Santa B¨¢rbara Blindados (SBB) de Alcal¨¢ de Guadaira (Sevilla) y el coste de su puesta a punto superar¨¢ ampliamente los 8,5 millones de los 10 entregados el a?o pasado. La idea, sin embargo, es que en el futuro las armas para Ucrania no salgan ya de los exang¨¹es arsenales de las Fuerzas Armadas sino de las f¨¢bricas de las empresas espa?olas de armamento. A ello les inst¨® el presidente del Gobierno.
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