Los institutos catalanes inician el curso con indefinici¨®n en los contenidos y falta de plazas en la FP
Los centros lamentan el adelanto de las clases porque todav¨ªa se est¨¢n matriculando alumnos
Unos alumnos de secundaria comenzaban este mi¨¦rcoles las clases, mientras otros todav¨ªa tramitaban en secretar¨ªa la matr¨ªcula. Es lo que ha sucedido en un instituto del barrio de Nou Barris, en Barcelona, pero que se ha repetido en muchos otros centros debido al nuevo calendario escolar catal¨¢n, que ha avanzado una semana el inicio del curso. M¨¢s de 600.000 alumnos de ESO, Bachillerato y FP han vuelto a las aulas en una temporada marcada por el estreno de los nuevos curr¨ªculos (que marcan qu¨¦ y c¨®mo se debe estudiar) y la falta de plazas en los ciclos formativos.
En este instituto de Nou Barris lamentan que el nuevo calendario escolar les est¨¢ provocando m¨¢s complicaciones de las esperadas. Este mi¨¦rcoles por la ma?ana todav¨ªa ten¨ªan alumnos matricul¨¢ndose, tanto de la ESO (por la tardanza en la adjudicaci¨®n de plazas) como de Bachillerato (porque los ex¨¢menes de recuperaci¨®n se hicieron el 1 y 2 de septiembre y este martes los alumnos sab¨ªan si hab¨ªan aprobado o no). ¡°Es una l¨¢stima porque se crea una diferencia entre los alumnos que empiezan hoy con normalidad y los que se incorporan y no tendr¨¢n los recursos y el acceso a la plataforma digital hasta pasados unos d¨ªas¡±, lamenta la jefa de estudios, que prefiere guardar el anonimato del centro.
El adelanto de una semana de las clases est¨¢ provocando incidencias en las gestiones administrativas antes del curso, pero tambi¨¦n est¨¢ dejando poco tiempo a los profesores para preparar las clases. Si hasta ahora contaban con casi dos semanas en septiembre, este a?o disponen de la mitad. ¡°Yo empiezo las clases ma?ana y no he podido preparar nada, todo es gesti¨®n y gesti¨®n¡±, lamenta esta docente. El problema se agrava este a?o porque los institutos empiezan a aplicar los nuevos curr¨ªculos escolares, fijados por la nueva ley educativa estatal, la Lomloe. Pero el decreto que regula los estudios de Bachillerato no se ha publicado y los docentes trabajan en base a un borrador. ¡°Aplicar el nuevo curr¨ªculo requiere tiempo porque necesitas coordinarte con otros profesores y hay un trabajo m¨¢s en equipo. Lo ideal ser¨ªa haber tenido un a?o de margen porque no estamos dando la calidad que deber¨ªamos¡±, admite la jefa de estudios.
Los institutos han abierto las puertas tambi¨¦n con mucho movimiento en la FP. Seg¨²n datos de Educaci¨®n de finales de julio (que no actualizar¨¢ hasta la pr¨®xima semana), 20.000 alumnos estaban sin plaza. Los m¨¢s damnificados son los que no proceden de la ESO, ya que el Departamento de Educaci¨®n cambi¨® este a?o la normativa para dar prioridad en el acceso a los ciclos a los alumnos de 4? de ESO, para asegurar que pueden continuar los estudios y evitar el caos del a?o pasado en que centenares de ellos se quedaron a las puertas.
Marlene Zambrana, de 27 a?os, es una de las afectadas del cambio de normativa. En junio abandon¨® la carrera de Ingenier¨ªa qu¨ªmica -no le ve¨ªa futuro- y para hacer el ciclo medio de auxiliar de enfermer¨ªa. ¡°Es solo un a?o y tiene buenas salidas laborales. Tengo gemelos de un a?o y medio y necesito trabajar¡±, cuenta la joven. Se preinscribi¨® con una nota de 7¡ä6. ¡°Estaba segura de que entrar¨ªa porque mi amiga entr¨® con un 6 hace unos a?os. Pero salieron las listas y las 40 plazas las llenaron los de la continuidad [que vienen de 4? de ESO]. El ¨²ltimo de ellos entr¨® con un 5¡ä6. Y los que no ¨¦ramos de continuidad quedamos todos fuera¡±, explica enojada. Ahora tiene que esperar a que la semana que viene se publique la lista con las vacantes. Si no logra plaza, no descarta ir a un centro privado.
Tambi¨¦n en ascuas est¨¢ Tatiana Leal, 33 a?os. Finaliz¨® el grado medio de auxiliar de enfermer¨ªa con una nota media de 7,9, con la mirada fijada en continuar en el ciclo superior de higiene bucodental. ¡°Ped¨ªan un 9 de nota de corte, pero ten¨ªa la esperanza de poder entrar, me esforc¨¦ mucho¡±, asegura esta joven de La Canonja (Tarragona). Pero no logr¨® entrar en ninguna de las opciones que puso en la preinscripci¨®n. La estudiante critica que en el proceso de admisi¨®n se d¨¦ prioridad a los alumnos que provienen de Bachillerato. ¡°Lo veo muy injusto porque entran alumnos con un 6 y sin saber si les va a gustar, mientras yo vengo de unos estudios de la misma rama y me interesa continuar¡±.
Tatiana est¨¢ ahora en lista de espera, esperando que se publique la lista con las nuevas vacantes. ¡°Pero en Tarragona estamos cortos de centros que hagan ciclos de sanidad. Si no entro tendr¨¦ que esperar un a?o m¨¢s y con mi edad veo que tengo q acabar ya los estudios porque tengo planes de futuro¡±, tercia con tono apesadumbrado la joven, madre de una ni?a de cuatro a?os. En su momento, Tatiana no finaliz¨® los estudios de la ESO y se puso a trabajar. Finalmente se titul¨® en un centro de adultos y la pandemia le hizo cambiar de visi¨®n. ¡°El trabajo de dependienta es duro, son muchas horas, pero decid¨ª que quer¨ªa seguir estudiando para dar un futuro mejor para mi familia. Quer¨ªa mejorar mi calidad de vida¡±, a?ade.
Protesta por la falta de espacios
El Departamento quita hierro a la problem¨¢tica de la falta de plazas. Asegura que quedan 27.000 vacantes y que ¡°ser¨¢n una minor¨ªa¡± los que se incorporen tarde a las aulas (lo har¨¢n casi a finales de mes). Seg¨²n Educaci¨®n, ¡°hay vacantes para todos aquellos que quieran estudiar FP¡±. Otra cosa es si coincide con el inter¨¦s del alumno.
El inicio del curso no ha podido evitar las protestas, en este caso, las del instituto Oriol Martorell de Barcelona, que imparte estudios reglados de m¨²sica y danza. Vestidos de riguroso negro e interpretando varias piezas musicales, estudiantes, profesores y familias se han concentrado ante la sede del Consorcio de Educaci¨®n de Barcelona para denunciar las deficiencias del edificio: aulas sin insonorizar, persianas rotas, sin biblioteca¡ Asimismo, se quejan que los estudios de danza se llevan a cabo en unos m¨®dulos prefabricados con goteras.
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