Una vecina del Eixample de Barcelona: ¡°No se puede vivir de alquiler en la Superilla, aqu¨ª no quedar¨¢ nadie¡±

Si se entra en los portales inmobiliarios y se busca piso de alquiler en la calle de Consell de Cent de Barcelona aparecen anuncios que piden hasta 7.700 euros al mes. Son los de gama alta, probablemente alquiler de temporada, pero en la franja baja no hay nada por menos de 1.500 o 1.800 y abundan los que piden entre 2.000 y 5.000. La transformaci¨®n de esta calle del Eixample en un ¡°eje verde¡±, sin coches, del programa Superilla de la alcaldesa Ada Colau, revalorizar¨¢ los pisos y las inmobiliarias y consultoras auguran una subida de los precios. En un mercado del alquiler ya muy tensionado ¨Dla renta media en Barcelona se qued¨® el a?o pasado a tres euros del salario m¨ªnimo (1.077 euros)¨D, la mejora del espacio p¨²blico empujar¨¢ todav¨ªa m¨¢s los precios y amenazar¨¢ a los vecinos de la zona. Ya hay inversores buscando fincas o pisos para reformar, aseguran fuentes del sector inmobiliario. Y se est¨¢ produciendo un cambio de usos de oficinas a residencial por el alza de precios.

Las inmobiliarias de la zona consultadas (Eurofinques o GP) no dudan de que los precios subir¨¢n, aunque recuerdan que est¨¢n disparados desde que el Tribunal Constitucional anul¨® la limitaci¨®n de precios en Catalu?a. Inmobiliarias como Fotocasa sit¨²an los aumentos entre el 10% y el 15%.

La Red de Vivienda de la Izquierda del Eixample lamenta que la Superilla es un martillazo m¨¢s al clavo de la gentrificaci¨®n: el alza de precios que se produce en paralelo a las mejoras urbanas. ¡°No es el apocalipsis, pero apuntala din¨¢micas de ciudad, ser¨¢ una capa m¨¢s en la expulsi¨®n de los vecinos¡±, alerta Albert Freixa, portavoz de la red. Esta entidad tiene el ojo puesto en las fincas de propiedad vertical, susceptibles de ser adquiridas por fondos de inversi¨®n con la intenci¨®n de reemplazar a los vecinos tradicionales por perfiles de mayor poder adquisitivo. Solo entre Vilamar¨ª y Balmes han contado 46 de estos edificios.

De los bloques ya comprados, el m¨¢s conocido es Casa Orsola, en el chafl¨¢n entre Consell de Cent y Cal¨¤bria. Sus inquilinos se han convertido en el faro de la lucha por los alquileres asequibles en la ciudad y se est¨¢n quedando en los pisos aunque se les acabe el contrato. El caso est¨¢ en los juzgados. Mientras, el precio de los que se han vaciado y reformado supera los 2.500 euros.

Hay otros casos paradigm¨¢ticos de vecinos expulsados hace a?os de la Superilla de Sant Antoni, cuando un fondo de inversi¨®n compr¨® las fincas donde viv¨ªan, que reviven la situaci¨®n en Consell de Cent. Le ocurre a Carme Vidal (nombre falso, porque su situaci¨®n no est¨¢ resuelta). En 2017, esta jubilada viv¨ªa en la calle de Parlament y la empresa que compr¨® el edificio no renov¨® los contratos. ¡°No se puede vivir de alquiler en la Superilla, aqu¨ª no quedar¨¢ nadie¡±, avisa seis a?os despu¨¦s desde una finca de Consell de Cent adquirida tambi¨¦n por inversores que tienen la intenci¨®n de reformarlos y venderlos. ¡°Estoy a favor de las mejoras, mis nietos viven en el Eixample y no quiero que respiren el humo de los coches¡±, asegura, pero a?ade que hay una ¡°parte mala¡±: ¡°Que nos echan a los vecinos y al comercio de proximidad. Si no se arregla desde Madrid con una ley que regule los alquileres, no quedar¨¢ nadie¡±, insiste.

Jaume Artigues, de la Asociaci¨®n de Vecinos de la Derecha del Eixample, pide que no se vinculen las subidas a las mejoras urban¨ªsticas: ¡°El problema no es intervenir en el espacio p¨²blico, que es necesario; es la pol¨ªtica de vivienda, la falta de una regulaci¨®n del alquiler y los privilegios fiscales de sociedades que no pagan impuestos o las Golden Visa¡±. En esta zona del Eixample, entre 2016 y 2022 han contabilizado la compraventa de 70 fincas enteras, lamenta Artigues.

A pie de la Superilla, en la zona m¨¢s pr¨®xima al centro desde la inmobiliaria Eurofinques, Ramon Riera apunta que ya hubo subidas en la calle de Girona cuando se anunci¨® que se sacar¨ªan los coches y ser¨ªa un eje pacificado. ¡°Los precios subir¨¢n de acuerdo a las expectativas¡±, conviene ahora refiri¨¦ndose tanto a los pisos como a los locales. En la otra punta, a la altura de Rocafort, Gonzalo Duffo, de Fincas GP, subraya que los alquileres ya se dispararon al caer la regulaci¨®n de precios y observa ¡°aumentos sustanciales¡± en el caso de los locales comerciales.

La directora de estudios del portal Fotocasa, Maria Matos, anota que la Superilla ¡°comportar¨¢ la creaci¨®n de nuevos espacios verdes y peatonales, lo que revalorizar¨¢ la zona y encarecer¨¢ el precio de la vivienda¡±. ¡°A su vez, esto podr¨ªa causar un proceso de gentrificaci¨®n, provocando el desplazamiento de la poblaci¨®n residente por otros grupos sociales con un poder adquisitivo m¨¢s elevado¡±. La directora de estudios sit¨²a los incrementos ¡°entre el 10 y el 15% en el precio de la vivienda en venta y alquiler¡± en una zona donde los precios ya son elevados.

En la inmobiliaria Engel & V?lkers, el consultor externo Isidre Est¨¦vez admite que en la zona de Consell de Cent m¨¢s prime, la pr¨®xima a paseo de Gr¨¤cia, ¡°los nuevos inquilinos son extranjeros, con contratos de entre un mes y un a?o, porque pagan precios que los vecinos no pueden asumir¡±. ¡°Los propietarios son conscientes de que la zona se revaloriza¡±, a?ade y se?ala que se est¨¢ produciendo un trasvase de uso de oficinas a residencial ¡°porque los precios del alquiler de vivienda superan al terciario en muchos casos¡±. En la consultora Laborde Marcet, Gerard Marcet explica que ¡°los inversores est¨¢n buscando pisos proactivamente en las plazas que se crear¨¢n con la Superilla¡±, como la esquina entre Girona y Consell de Cent, con la convicci¨®n de que las zonas pacificadas despertar¨¢n mucho inter¨¦s.

La teniente de alcalde de Urbanismo y Movilidad del Ayuntamiento de Barcelona, Janet Sanz, recuerda que zonas como el Eixample o Gr¨¤cia son las que hist¨®ricamente ¡°m¨¢s han sufrido un mayor incremento de precios¡±. ¡°La ley [de vivienda, acordada esta semana por el Gobierno, ERC y Bildu] debe evitar los alquileres abusivos. Hacemos lo que podemos con nuestras competencias y recursos¡±. Sobre la Superilla, Sanz indica que ¡°tiene que ver con la din¨¢mica de especulaci¨®n en la ciudad¡± y subraya que el consistorio ¡°ha invertido el doble de recursos p¨²blicos comprando o construyendo vivienda p¨²blica y rehabilitando para garantizar que los contratos perduren, que en las obras de la Superilla¡±. 100 millones de euros en vivienda, frente a 50 en la reforma urban¨ªstica, defiende. En los 100 millones se incluye la compra de dos fincas enteras por valor de 7,8 millones en Consell de Cent y Villarroel.

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