Catalu?a tras el 12-M: los retos m¨¢s all¨¢ del ¡®proc¨¦s¡¯
La renuncia a la unilateralidad del independentismo permite recuperar el debate sobre los servicios p¨²blicos, la econom¨ªa y las infraestructuras
Con los peores resultados acad¨¦micos de los ¨²ltimos a?os, un sistema sanitario con listas de espera permanentes e incidencias cronificadas en la red ferroviaria, Catalu?a afronta las elecciones de este domingo con la posibilidad de pasar p¨¢gina tras m¨¢s de una d¨¦cada de conflicto pol¨ªtico. Por primera vez la campa?a ha centrado en el debate en asuntos cotidianos. Escuelas, impuestos, sequ¨ªa, seguridad, alquileres. Ni rastro de promesas concretas sobre la cuesti¨®n nacional. Junts ha abandonado de momento la apuesta por la unilateralidad y se ha unido a la v¨ªa pragm¨¢tica de ERC. La independencia aguarda esta vez en la sala de espera.
Quiz¨¢s la primera muestra del cambio de paradigma que vive Catalu?a fue el veto de los comunes a los presupuestos auton¨®micos, el pasado mes de marzo. La raz¨®n: el Hard Rock. Y con el debate dedicado al emergencia clim¨¢tica, los partidos centraron sus propuestas en el d¨ªa a d¨ªa. En aquello que ocurre m¨¢s all¨¢ del proc¨¦s y que ha tenido una presencia discontinua a lo largo de los ¨²ltimos 12 a?os. El Centre d¡¯Estudis d¡¯Opini¨® (CEO, el CIS catal¨¢n) valida la transformaci¨®n de los intereses sociales: el cambio clim¨¢tico es el problema m¨¢s importante para los catalanes, seg¨²n el ¨²ltimo bar¨®metro.
El PSC ha centrado su discurso en la moderaci¨®n y los consensos para ¡°abrir una nueva etapa¡± e iniciar la ¡°tercera transformaci¨®n¡± de Catalu?a. ERC ha buscado sacar brillo a su gesti¨®n de Gobierno, mientras que Comunes y CUP han apostado por un mensaje medioambiental y social. El PP, que ofrece propuestas para las empresas y aut¨®nomos, ha coincidido con Vox en la lucha contra la inseguridad. Junts y Ciudadanos son probablemente las formaciones que m¨¢s han apelado al proc¨¦s desde polos opuestos. Las elecciones se presentan como la posibilidad de ofrecer soluciones a los grandes retos que afronta Catalu?a tras el 12-M:
Educaci¨®n. El reto mayor es mejorar la calidad del sistema y que ello se note en los resultados de los alumnos. Las alarmas saltaron hace unos meses con los preocupantes resultados de los ex¨¢menes de competencias b¨¢sicas (que impulsa la Generalitat) y de los informes internacionales PIRLS y PISA. Las lenguas, la comprensi¨®n lectora y las matem¨¢ticas -los pilares b¨¢sicos del aprendizaje- son los puntos donde m¨¢s flaquean los alumnos catalanes, que quedan claramente por debajo de la media espa?ola y europea seg¨²n PISA. El Departamento de Educaci¨® ha aprobado un plan de mejora de estas materias esenciales, pero limitado a unos 200 centros.
El sector busca la forma de afrontar la segregaci¨®n escolar (el 32% de menores est¨¢ en situaci¨®n de vulnerabilidad) e implementar medidas equitativas. La llamada escuela inclusiva, que propone normalizar la presencia de alumnos con necesidades especiales en aulas ordinarias, presenta objetivos bondadosos, pero padece una falta ingente de recursos. Otra de las carpetas pendientes encontrar la forma de incrementar el uso y la calidad del catal¨¢n, tanto dentro como fuera de las aulas, tras la p¨¦rdida de su presencia especialmente en los institutos.
Sanidad. Faltan manos y se acumulan las patolog¨ªas en el ¨¢mbito de la salud. La sanidad se ha convertido en una especie de pozo sin fondo en el que los profesionales muestran su malestar de forma permanente y los usuarios sufren unas listas de espera cr¨®nicas. La obra de Govern de ERC ser¨¢ recordada por la pretensi¨®n de ofrecer mejoras a los profesionales y por haber iniciado unas reformas que han quedado a medio camino. Tras inyectar 780 millones en incrementos salariales, el Govern orden¨® a los grandes hospitales no consolidar los contratos temporales para que estos profesionales encuentren acomodo en los dispositivos medianos para garantiza la equidad territorial.
Adem¨¢s, la consejer¨ªa present¨® un plan para centralizar a los pediatras para mejorar su calidad profesional a costa de alejarlos de las familias. El nuevo Ejecutivo tendr¨¢ que estudiar estas propuestas y la forma de dotar de m¨¢s autonom¨ªa a los centros sanitarios. Los profesionales admiten que la burocracia y el sistema funcionarial resta eficiencia a un sistema ahogado por las necesidades de una poblaci¨®n cada vez m¨¢s longeva.
Financiaci¨®n. La reclamaci¨®n de una mejora del sistema de financiaci¨®n es uno de los debates m¨¢s veteranos en Catalu?a. Junts y ERC la negociaron con el PSOE cuando Pedro S¨¢nchez necesitaba sus votos para su investidura y existe un compromiso para sacarlo adelante, aunque no sobre cu¨¢l ser¨¢ su configuraci¨®n final. Su reivindicaci¨®n es hist¨®rica y transversal, como demostr¨® el pasado marzo que una veintena de organizaciones econ¨®micas y empresariales se unieran en un ejercicio sin precedentes para reclamar la actualizaci¨®n.
La ministra de Hacienda, Mar¨ªa Jos¨¦ Montero, se ha comprometido a negociar su actualizaci¨®n, aunque el dominio del PP en el grueso de las comunidades aut¨®nomas no lo pone f¨¢cil. Junts y ERC reclaman una negociaci¨®n entre el Estado y la Generalitat y un modelo basado en la recaudaci¨®n por parte de la Agencia Tributaria Catalana de todos los impuestos y, a partir de ah¨ª, la determinaci¨®n de un porcentaje que se transferir¨ªa al Gobierno central para pagar sus servicios en Catalu?a y una cuota de solidaridad para repartir con las autonom¨ªas que lo requieran. Es un modelo similar al que tienen Pa¨ªs Vasco y Navarra.
Infraestructuras. El d¨¦ficit de inversi¨®n en infraestructuras fue uno de los detonantes del proc¨¦s. El Govern encuentra complicidad entre el mundo empresarial para denunciar que no solo las inversiones introducidas en los Presupuestos Generales del Estado no se corresponden al peso de Catalu?a en el PIB espa?ol, sino que cuando se tienen que ejecutar esos compromisos hay un reguero que se queda por el camino.
A ese problema se le suma otro: la complejidad que supone sacar adelante proyectos de calado en Catalu?a por la oposici¨®n territorial que muchas veces despiertan. La ampliaci¨®n del aeropuerto de Barcelona es actualmente el proyecto m¨¢s visible, con ideas enfrentadas sobre si es imprescindible y c¨®mo se tiene que hacer. El otro gran debate se sit¨²a en torno a la transferencia de la red de Rodalies de Renfe, un traspaso pactado sin mucha concreci¨®n entre el PSOE y ERC y que ya tiene comisiones de trabajo funcionando.
Sequ¨ªa. La sequ¨ªa ser¨¢ el elefante en la habitaci¨®n para el nuevo Govern. La crisis h¨ªdrica que atraviesa Catalu?a desde hace m¨¢s de tres a?os ya fue un detonante que llev¨® a los Comunes a rechazar los presupuestos por el consumo de agua que requer¨ªa el proyecto del Hard Rock en Salou (Tarragona). Aunque la comunidad haya rebajado el nivel de alerta por sequ¨ªa, el futuro Ejecutivo tendr¨¢ que apuntalar las inversiones que se han realizado en infraestructuras hidrol¨®gicas para afrontar los futuros episodios de escasez de agua con mayor independencia de las lluvias.
Hasta ahora, la Generalitat ha invertido en la ampliaci¨®n y construcci¨®n de desalinizadoras y regeneradoras de agua en Foix, Tordera, Blanes, la Costa Brava o Barcelona, para que la comunidad produzca los recursos h¨ªdricos necesarios y que m¨¢s de seis millones de personas no tengan que sufrir nuevas restricciones en el consumo de agua. Ser¨¢ prioritario profundizar en la recuperaci¨®n de los acu¨ªferos y en la reparaci¨®n de las redes de abastecimiento de los municipios. El sector primario tambi¨¦n tendr¨¢ que sufrir reestructuraciones: Catalu?a es la segunda comunidad en n¨²mero de macrogranjas (900) de Espa?a, solo por detr¨¢s de Arag¨®n. Entre todas ellas, consumen el 30% del agua de los embalses que gestiona la Generalitat, seg¨²n la Agencia Catalana del Agua (ACA).
Cultura. El 2% del presupuesto global de la Generalitat para el Departamento de Cultura es el gran horizonte por el que lleva a?os luchando el sector catal¨¢n. La consejer¨ªa ha aumentado su presupuesto en un 89% (264 millones de euros) durante la legislatura, pero el fracaso presupuestario alej¨® al mundo de la cultura la mayor asignaci¨®n presupuestaria de su historia: 566 millones de euros, un 1,7% del presupuesto total. El audiovisual catal¨¢n ha sido el gran protagonista del proyecto fallido que destinaba 52,3 millones de euros, de los cuales 38,6 (el 74%) eran para las producciones en catal¨¢n. Ferran Cera presidente de la Federaci¨®n de Productores Audiovisuales (Proa), establece las prioridades del sector: ¡°Urge despolitizar la Corporaci¨®n Catalana de Medios (CCMA) y el Consell Audiovisual. Debemos profesionalizarlos¡±.
Adem¨¢s, explica Cera, es necesario poner en marcha el HUB Audiovisual Catalunya Media City por sus efectos ¡°en la formaci¨®n, en la cultura digital, en los videojuegos y en lo audiovisual¡±. El proyecto de conexi¨®n con la ciudadan¨ªa del Centre d¡¯Arts Santa M¨°nica, la digitalizaci¨®n y las instalaciones del Arxiu Nacional de Catalunya, el presupuesto de la Filmoteca de Catalu?a y la lengua son las carpetas pendientes para el pr¨®ximo Govern.
Informaci¨®n elaborada por Bernat Coll, Dani Cordero, Amparo P¨¦rez, Ivanna Vallesp¨ªn y Luis Velasco.
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