Trucos para fingir que sabes de vino

Existen. Est¨¢n cerca. Todos conocemos alguno. Son los expertos que siempre reclaman el derecho a escoger el vino cuando vais a cenar ¡°porque ellos saben m¨¢s¡±, los que luego lo prueban poniendo cara de estar descifrando el universo y que hablan de riesling y gew¨¹rztraminer como si en lugar de tipos de uva fueran sus compa?eros de instituto. Son los que saben de vino, esa raza aparte que no desaprovecha ni una ocasi¨®n de dejarte claro que ellos juegan en la liga de los profesionales, y que t¨² como mucho podr¨¢s optar a llevarles el sacacorchos (si te portas bien).

Si siempre has querido ser uno de ellos, pero no te da la vida para subirte a esa monta?a de conocimiento, sigue los consejos que te damos a continuaci¨®n: si lo haces con convicci¨®n, todo el mundo te tomar¨¢ por uno de los Elegidos. Si no, te servir¨¢ para desenmascarar a m¨¢s de uno (o, en ¨²ltima instancia, para echarte unas risas). Para elaborar esta gu¨ªa he pedido ayuda a mis compa?eros Mikel L¨®pez Iturriaga y Jordi Luque -que me consta alguna que otra botella han probado en su vida- y a Pascual Drake, que sabe de esto de verdad pero igualmente se ha dignado a colaborar con los simples mortales. Muchas gracias a todos: os debo una copa.

No bebas, degusta

Cuando pruebes un vino, haz todo el ritual de mirar a trav¨¦s, agitar la copa para ver la l¨¢grima -la l¨¢grima que m¨¢s conoces es la de la rumba de Peret, concretamente de bailarla en el pueblo ciego de clarete a granel, pero eso aqu¨ª no lo sabe nadie-, oler, traguito, cara de concentraci¨®n. Aunque no sepas distinguir un Don Sim¨®n de un barolo: que no decaiga.

Pero con contenci¨®n

Aunque hayas visto que los profesionales de la cata pasean el vino por la boca para notar sus matices, c¨®rtate un poco con eso. A lo mejor a ti te parece que se te v¨¦ muy convincente, pero el resto de la mesa no tendr¨¢ muy claro si haces g¨¢rgaras o has sido pose¨ªdo por una grulla perturbada.

Di que t¨² eso ya lo conoces

Cuando un sumiller te proponga un vino que no has probado nunca, responde "ese me entusiasma". El sumiller te dir¨¢ ¡°excelente elecci¨®n¡± -seguramente pensar¨¢ que vas de farol, pero tienes la suerte de que ser educado forma parte de su trabajo- y el resto de la mesa se quedar¨¢ arrobado por tu mundo y tu conocimiento vin¨ªcola.

Normaliza el tap¨®n de rosca

Si te sirven un vino con tap¨®n de rosca, no te horrorices. En lugar de eso, afirma que en Francia es lo m¨¢s normal y que es perfecto para los vinos j¨®venes. Esto no lo decimos nosotros, lo dice Pascual Drake, que sabe de vinos de verdad.

Nunca pidas el vino m¨¢s caro de la carta

Si lo haces, no solo te dejar¨¢s una pasta sino que adem¨¢s no quedar¨¢s como un entendido. Pedir el vino m¨¢s caro pensando que es el mejor es demasiado evidente, y adem¨¢s es posible que su precio est¨¦ disparado, por una cuesti¨®n de demanda o de popularidad de la DO, m¨¢s que por su calidad. Los autores del libro Wine Follie, Madeline Puckett y Justin Hammack, van m¨¢s all¨¢ y recomiendan pedir directamente el m¨¢s barato.

Di cosas en franc¨¦s

No digas que el vino huele, sino que tiene ¡®bouquet¡¯. ?A?ada del vino? Nah, mejor ¡®mill¨¦sime¡¯. Dicen que si pronuncias 'terroir' con, naturalidad absoluta, mucho acento y sin que se te escape la risa te convalidan una estancia de dos a?os en un ¡®chateau¡¯ de Burdeos, aunque no sepas ni situarlo en el mapa. Aqu¨ª va una lista-diccionario que te puede ayudar con esto. Si tambi¨¦n dices ¡®retrogusto¡¯, te doblan la puntuaci¨®n.

Finge que conoces las a?adas

Sin venir a cuento, cuando alguien mencione una fecha en una conversaci¨®n, por mirada intensita y di "qu¨¦ gran a?o para (inserte aqu¨ª el tipo de vino que le apetezca, total, nadie lo va a comprobar). Cuanto menos tenga que ver la fecha con el vino, m¨¢s patente quedar¨¢ tu profundo amor por esta bebida.

Aprende qu¨¦ son los taninos

Ya s¨¦ que esto iba de hacerse el listo sin hacer ni el huevo, pero invierte unos minutos de tu vida en enterarte de que los taninos son una sustancia qu¨ªmica natural, de origen vegetal, que se encuentra en el vino y que procede de las partes s¨®lidas del racimo -como la piel, el hollejo o las pepitas- y/o de la madera de las barricas, o te pillar¨¢n seguro. Aqu¨ª tienes algo m¨¢s de informaci¨®n para empezar.

Cuidado con lo de descifrar sabores

Si es tinto sabe a cereza picota y frutas rojas. Si es blanco, a pl¨¢tano y fruta madura. No te l¨ªes con vainillas, maderas, mieles o caf¨¦ porque es posible que metas la pata, y si despu¨¦s de cuatro botellas te pones creativo y el tinto te sabe a fabada, mejor tampoco lo digas: a lo mejor es porque vas un poco pedo.

Huele el tap¨®n

Cuando abras una botella -o el sumiller te lo deje al lado, como una ofrenda inc¨®moda con la que nadie sabe muy bien qu¨¦ hacer-, olfatea el corcho con la misma intensidad con la que tu perro huele el culo a sus amigos del parque. Da igual que el aroma no te diga nada: queda bien.

Emoci¨®nate mucho hablando de un vino

Pero solo con uno en concreto: si lo haces muy a menudo puede que tu grupo de amigos empiece a dejarte de lado por intensito. Tampoco hace falta que llegues a las l¨¢grimas: un nivel de emoci¨®n ¡°ma?ana me voy de vacaciones¡± ser¨¢ suficiente.

No devuelvas botellas

Al menos no lo hagas para impresionar, a no ser que realmente est¨¦ picada o tenga otro defecto: lo ¨²nico que impresionar¨¢ ah¨ª es tu mala educaci¨®n. Y ni se te ocurra hacerlo porque tenga poso: el poso es una parte del vino. Si te molesta, dec¨¢ntalo y hasta luego Mari Carmen.

Desprecia lo conocido

Siempre que alguien diga que le gustan los crianzas, m¨ªrale con una mezcla de pena y superioridad: t¨² sabes perfectamente que los vinos con mucha madera no se llevan. Con los del Bierzo o de Toro directamente puedes poner los ojos en blanco, aunque ya no rasquen.

Di que los Rioja y los Ribera son viejunos

El punto de antes llega el extremo con los Riojas o los Ribera del Duero: pedir una denominaci¨®n de origen que conoce todo Cristo es como decir que tu grupo favorito es La Oreja de Van Gogh o Melendi. El mainstream del vino. Si es natural o biodin¨¢mico hazle la ola, aunque tenga sabor a sidra revenida.

Marida carne con blanco y pescado con tinto

As¨ª quedar¨¢ clar¨ªsimo que t¨² vives libre de esos prejuicios viejunos. Si adem¨¢s de fardar quieres disfrutarlo, piensa que el color no lo determina todo en un vino, y que la carne y el pescado tambi¨¦n tienen muchos matices. Por ejemplo, algunos tintos j¨®venes y ligeros le pueden ir de muerte a un at¨²n, una caballa o una raya guisada, y los picantones, el pollo o un tartar de ternera entran estupendos con un blanco seco.

No le llames ¡®caldo¡¯

Por favor, no lo hagas. No solo es un sin¨®nimo poco acertado -algo de responsabilidad tiene la prensa especializada-, sino que adem¨¢s te har¨¢ parecer repelente y te pondr¨¢ m¨¢s a?os encima que una camiseta de la gira 89-90 de Julio Iglesias. Firmada.

Nunca jam¨¢s digas ¡°este con una Coca Cola har¨ªa un kalimotxo estupendo¡±

Aunque lo pienses tan fuerte que crees que te pueden o¨ªr. Aunque saliera en el New York Times y se pusiera de moda en Nueva York. Que no se te escape. No. De verdad.

No chulees al sumiller

Por mucho que quieras hacer ver que sabes de vino, ¨¦l sabe m¨¢s. ?Verdad que si est¨¢s con Messi en un campo de f¨²tbol no te dedicar¨ªas a intentar quitarle la pelota, sino a disfrutar de su juego? Pues lo mismo aqu¨ª: si es un buen profesional y te recomienda algo, lo est¨¢ haciendo para que disfrutes m¨¢s de la cena.

Bebe vino

Y ten una bodega y un bodeguero de referencia: habla con ellos, preg¨²ntales, prueba cosas nuevas -nuevas para ti-, profundiza en lo que m¨¢s te guste, qu¨ªtate los complejos y las man¨ªas. Y disfruta, disfruta mucho del vino. Al final, entre chuza y chuza, aprender¨¢s algo de verdad y todo.