Cu¨¢les son y qu¨¦ ser¨¢ de las instalaciones construidas para Tokio 2020 que van a quedarse vac¨ªas en las Olimpiadas
Contratiempos y pol¨¦micas han perseguido a los Juegos Ol¨ªmpicos desde que en 2013 Jap¨®n fuera elegido para celebrarlos. El ¨²ltimo bache en el camino es la ausencia de p¨²blico en las gradas: m¨¢s de 700.000 butacas quedar¨¢n desocupadas
Tokio no sab¨ªa donde se met¨ªa cuando brind¨® por los Juegos en 2013. La disputa por el Estadio Ol¨ªmpico que gir¨® en torno a la propuesta que el estudio de Zaha Hadid (fallecida en 2016) hizo ese mismo a?o fue solo un augurio de lo que estaba por venir. Los Juegos de 2020 han sufrido un sinf¨ªn de contratiempos y pol¨¦micas, aunque -bien por la resiliencia japonesa, bien por intereses econ¨®micos- han decidido celebrarse. Hoy, la estampa de un grader¨ªo des¨¦rtico ante la generosa capacidad de aforo refleja lo que pudo ser, casi es y no ser¨¢. Un a?o y medio despu¨¦s de que Shinzo Abe, por entoces primer ministro japon¨¦s, declarase que ¡°los Juegos ser¨ªan la luz al final del t¨²nel y el triunfo de la humanidad¡±, se hace la devoluci¨®n de las entradas a todos los espectadores, extranjeros y japoneses. A pesar de los esfuerzos por apostar por la pluralidad y la inclusi¨®n, no va a ser eso a lo que se asocie Tokio 2020. Las Olimpiadas, que pretend¨ªan ser recordadas como los Juegos en los que la tecnolog¨ªa avanzaba de la mano de la sostenibilidad, lo ser¨¢n por sus m¨¢s de 700.000 butacas vac¨ªas.
En un momento hist¨®rico como este, en el que es vital reclamar la diversidad, el evento deportivo por excelencia era la oportunidad perfecta para crear ese sentimiento de uni¨®n que genera el deporte y recordar el origen de los Juegos. Las precauciones sanitarias tomadas han pasado por alto las medidas espaciales que pod¨ªa haber propuesto la arquitectura: estudiar las posibilidades de cada instalaci¨®n para hacer del singular entorno ol¨ªmpico algo menos fr¨ªo no se baraj¨® como opci¨®n. Como ya explicamos en ICON Design hace un a?o, ¡°las villas no pueden evitar ser hijas de su tiempo¡±, y la de Tokio 2020 se ha quedado paralizada y muda. Y es que el sonido de la arquitectura de los Juegos Ol¨ªmpicos marcha a intervalos, depende de la concentraci¨®n que necesite el atleta y de c¨®mo se desenvuelva en su modalidad. El p¨²blico contiene la respiraci¨®n primero y aplaude despu¨¦s. En Tokio 2020, sin embargo, las 42 sedes mantendr¨¢n un silencio tan prolongado que podr¨ªa estallar.
Son ocho las instalaciones permanentes que diferentes estudios de arquitectura japoneses han construido expresamente para los Juegos de 2020. Lo que no sab¨ªa ninguno de ellos cuando comenzaron los proyectos es que finalmente no podr¨ªan acoger ning¨²n tipo de p¨²blico durante las olimpiadas, aunque s¨ª m¨¢s adelante, ya que de alguna forma tienen que amortizar el coste de millones de euros que ha supuesto levantar en la capital nipona cada una de ellas.
Estadio Ol¨ªmpico (Tokio), de Kengo Kuma
El antiguo Estadio Ol¨ªmpico, proyectado exclusivamente para los Juegos de 1964 por Kenz¨ Tange, la figura de mayor influencia en la arquitectura japonesa tras la Segunda Guerra Mundial, se demoli¨® para construir una nueva propuesta. La de Zaha Hadid, ganadora en un principio, gener¨® cr¨ªticas por su forma (se dec¨ªa que parec¨ªa una tortuga), y su escala desproporcionada con el entorno adem¨¢s de por un presupuesto desorbitado (se acercaba a los dos mil millones de euros). Los ajustes no fueron suficientes para calmar a la escuadra japonesa -el primer ministro japon¨¦s reconoci¨® que hab¨ªan ¡°decidido volver al principio del plan del estadio Ol¨ªmpico-Paraol¨ªmpico de Tokio y empezar de cero¡±- y, finalmente, Kengo Kuma (arquitecto japon¨¦s y hombre, los dos aspectos propulsores de la protesta seg¨²n Hadid, que falleci¨® poco despu¨¦s de que se rechazara su propuesta) tom¨® el relevo. ¡°No quieren que un extranjero construya el estadio nacional en Tokio¡±, lleg¨® a recriminar la arquitecta iraqu¨ª.
Impulsado por la sostenibilidad, Tokio 2020 se inaugura en un estadio construido mayoritariamente en madera y repleto de vegetaci¨®n. Eso s¨ª, ni los 80.000 espectadores de Zaha Hadid, ni los 68.000 de Kengo Kuma presenciar¨¢n las pruebas de atletismo y de f¨²tbol que se celebrar¨¢n en el Estadio Ol¨ªmpico. En el futuro albergar¨¢ eventos deportivos polivalentes como competiciones de atletismo y f¨²tbol.
Plaza Deportiva Musashino Forest (Tokio), de Nihon Sekkei
Dise?ado por el estudio nip¨®n Nihon Sekkei, el estadio se plante¨® con capacidad para albergar diferentes eventos deportivos y culturales. La instalaci¨®n, vecina del Estadio Ajinomoto y el campo de atletismo Nishi, crea una base deportiva en el Oeste de Tokio. Una idea que refuerza, seg¨²n los propios arquitectos, el gran aler¨®n de la entrada del edificio. En los Juegos 2020 funcionar¨¢ como espacio deportivo polivalente en el que se jugar¨¢n los partidos de b¨¢dminton y pentatl¨®n moderno (esgrima). Se suman 7.200 asientos vac¨ªos.
Arena Ariake (Tokio), de Kume Sekkei
Levantada al Norte de Ariake, la construcci¨®n de la sede pod¨ªa haberse evitado. El aumento de costes de los Juegos hizo que se planteara la posibilidad de celebrar los partidos de voleibol en el Yokohama Arena, una instalaci¨®n que ya exist¨ªa. Pero la decisi¨®n final fue continuar con el proyecto con la intenci¨®n de utilizarlo como centro deportivo y cultural despu¨¦s de las Olimpiadas. La futura utilidad de este edificio de cubierta convexa y estructura plateada con vistas a la bah¨ªa no est¨¢ nada clara. Por el momento deja 15.000 plazas libres.
Centro de Gimnasia de Ariake (Tokio), de Nikken Sekkei y Shimizu Corporation
Esta sede tiene, en realidad, un car¨¢cter temporal. Una vez terminen los Juegos se retirar¨¢n las gradas para que el espacio pase a ser una sala de exposiciones permanente. El proyecto, construido mayoritariamente en madera por su car¨¢cter sostenible, hace tambi¨¦n un gui?o a lo que fue un antiguo estanque de almacenamiento de este mismo material. Sus l¨ªneas horizontales definen un volumen que controla su altura y es acorde a la escala del lugar.
El edificio que celebrar¨¢ las exhibiciones de gimnasia r¨ªtmica, art¨ªstica y de trampol¨ªn es un espacio semiabierto. La explanada donde los espectadores se situar¨ªan est¨¢ colocada al aire libre y, sin embargo, ser¨¢n otros 12.000 huecos que se suman al total de ausencias.
Estadio de Hockey de Oi (Tokio)
Otra de las sedes abiertas completamente al exterior que tampoco acoger¨¢ p¨²blico. El Estadio de Hockey de Oi, construido especialmente para Tokio 2020, se caracteriza por su pista azul y por la sencillez que define la secci¨®n del proyecto. Una especie de zeta invertida que consigue un grader¨ªo cubierto y que recoge en su parte inferior el resto del programa. Las intenciones futuras pasan por utilizarlo para la pr¨¢ctica de este mismo deporte, pero se estrenar¨¢ con 15.000 asientos vac¨ªos.
Centro Acu¨¢tico de Tokio (Tokio), de Yamashita Sekkei y Cox Architecture
Se trata del edificio donde se desarrollar¨¢n algunos de los deportes favoritos por la audiencia: nataci¨®n, nataci¨®n art¨ªstica y saltos. La construcci¨®n alberga una piscina principal de diez carriles, una secundaria y una tercera para los saltos, todas ellas con suelos y paredes m¨®viles. Los arquitectos quisieron himenajear la cultura japonesa con una cubierta inspirada en el origami y la papiroflexia. Esta sede con m¨¢s de 15.000 butacas espera ser la piedra angular de la nataci¨®n japonesa despu¨¦s de Tokio 2020.
Villa Ol¨ªmpica, Tokio
La sede en la que tradicionalmente se hospedan los atletas -all¨ª descansan, se concentran y socializan- ha sido edificada con madera reciclable y t¨¦cnicas tradicionales japonesas de construcci¨®n. Ubicado en el distrito costero de Harumi, el recinto est¨¢ rodeado por el mar y cuenta con una plaza de 5.300 metro cuadrados con una estructura de madera que sujeta la cubierta de acero y bamb¨². La idea de utilizar 40.000 piezas de madera donada por 63 municipios nipones para crear esta ¨¢rea recreativa fue criticada por ser poco sostenible ya que supuso la deforestaci¨®n de bosques. Sin embargo, los constructores afirman que la instalaci¨®n se desmontar¨¢ tras los Juegos para devolver toda esa madera y que pueda ser reutilizada. Del mismo modo, las camas de los deportistas, hechas de cart¨®n reciclable, se desmontar¨¢n cuando Tokio 2020 acabe para darles nuevos usos.
A pesar de la incertidumbre que persigue a estas Olimpiadas, vac¨ªas las sedes o no, Tokio 2020 ser¨¢n los juegos de la adaptaci¨®n a las circunstancias. El reflejo de las controversias de nuestro tiempo, en lo bueno y en lo malo. Los Juegos Ol¨ªmicos han enfatizado la necesidad de reflexi¨®n desde m¨¢s puntos de vista que el convencional. El tiempo ser¨¢ el que diga si haberlos celebrado fue un ¨¦xito o una derrota sanitaria.
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