Un ¡°hola¡± valorado en 13.000 euros: los famosos que cobran por mandar mensajes a sus admiradores

A cambio de precios entre los cinco y 13.000 euros, cualquiera puede conseguir que un famoso le env¨ªe un v¨ªdeo-mensaje personalizado. Tras cinco a?os de crecimiento internacional, la plataforma Cameo acaba de llegar a Espa?a con fichajes como Alaska, ...

A cambio de precios entre los cinco y 13.000 euros, cualquiera puede conseguir que un famoso le env¨ªe un v¨ªdeo-mensaje personalizado. Tras cinco a?os de crecimiento internacional, la plataforma Cameo acaba de llegar a Espa?a con fichajes como Alaska, Chenoa o Pau Gasol. La idea se le ocurri¨® en 2016 a Steve Galanis, un excorredor de bolsa de Chicago. Su amigo Martin Blencowe trabajaba como representante de jugadores de la NFL y le ense?¨® el v¨ªdeo que hab¨ªa grabado de uno de sus clientes, el defensa de los Seattle Seahawks Cassius Marsh, felicitando a unos amigos suyos por su reciente paternidad.

Dos hechos llamaron la atenci¨®n de Galanis: la emoci¨®n de los amigos al recibir el v¨ªdeo y la estad¨ªstica de que la mayor¨ªa de deportistas profesionales se queda sin dinero dos a?os despu¨¦s de su retirada. ¡°La fama no equivale a riqueza¡±, explic¨® Galanis a NPR. ¡°La gente es m¨¢s famosa que rica, especialmente en la era de las redes sociales¡±. Desde la llegada de la telerrealidad y de internet, con sus redes sociales y sus v¨ªdeos virales, la fabricaci¨®n de famosos se ha ido acelerando hasta generar un nuevo ecosistema de la celebridad: hoy hay m¨¢s famosos que nunca y son m¨¢s famosos que nunca.

El criterio para entrar en Cameo es tener un m¨ªnimo de 20.000 seguidores en Instagram. Se estima que existen cinco millones celebridades en el mundo. Muchas de ellas son tan conocidas que no pueden tener un trabajo normal o caminar por la calle sin que las aborden. A todos los dem¨¢s Cameo les ofrece la posibilidad de rentabilizar esa fama. All¨ª la notoriedad no significa lo mismo que en el mundo real. Se trata de un sistema neoliberal: un video-mensaje vale tanto como la gente est¨¦ dispuesta a pagar por ¨¦l. Una cara tan popular como Elijah Wood (Frodo en El se?or de los anillos) cobra lo mismo que la estrella de TikTok Jason Coffee. Haber participado en una pel¨ªcula o serie de culto garantiza una fuente de ingresos estable en Cameo. La aparici¨®n de Oliver y James Phelps, que interpretaban a los gemelos Wesley en la saga Harry Potter, colaps¨® la plataforma el pasado diciembre. James Marsters (Spike en Buffy, cazavampiros) siempre encabeza la lista de los m¨¢s solicitados, Tom Felton (Draco Malfoy en Harry Potter) est¨¢ entre los m¨¢s caros al cobrar 551 euros por v¨ªdeo y, por un peque?o extra, Ernie Hudson se pone el traje de Cazafantasmas y Larry Thomas el uniforme de chef del sopero Nazi en Seinfeld.

El actor Richard Dreyfuss se pone una camiseta de Tibur¨®n aunque no se lo pidan (cobra 636 euros). Lance Bass, integrante de la banda NSYNC, figura entre los m¨¢s populares porque tiene su propia frase estrella: despide todos sus v¨ªdeos con ¡°Bye Bye Bye¡±, el estribillo del hit de su banda de 1999. Por el contrario, Kristian Nairn, Hodor en Juego de tronos, dir¨¢ lo que ponga en el guion, pero rechaza las peticiones que solo le piden que mire a c¨¢mara y grite ¡°Hodor¡±.

Jaime De Wenetz, director de Cameo en Espa?a, se?ala que el famoso decide cu¨¢nto cobrar, aunque la plataforma se ofrece a orientarles. ¡°Si eres conocido a nivel local, recomendamos que adaptes tu precio al mercado local. Pau Gasol ha jugado en tres equipos de la NBA, de manera que su tarifa [273 euros] est¨¢ pensada para Estados Unidos. Los fans de Chenoa est¨¢n m¨¢s localizados en Espa?a [su precio es de 86 euros]¡±. De Wenetz pone como ejemplo a Rober Dragos (Oslo en La casa de papel), que despu¨¦s de las navidades decidi¨® reducir su precio a la mitad ¡°y la demanda se dispar¨®, porque para la gente no es lo mismo pagar casi 100 euros que menos de 50¡å. Cameo se queda con el 25% de lo que ganen.

Afinar hasta encontrar la cifra exacta es un arte. El actor Brian Baumgartner, conocido por interpretar al contable Kevin en The Office, fue la estrella m¨¢s exitosa de Cameo en 2020. Gan¨® un mill¨®n de euros. Y eso que en sus v¨ªdeos no puede emular su personaje porque sus rasgos m¨¢s definitorios pertenecen legalmente a la cadena NBC. Fernando Cayo, que interpreta al Coronel Tamayo en La casa de papel, aclara que en cualquier caso ¨¦l no imita a sus personajes en sus v¨ªdeos. ¡°Interpretar es mi trabajo, no me gusta sacarlo fuera. Yo env¨ªo mis v¨ªdeos como Fernando Cayo. Y me lo paso genial haci¨¦ndolo¡±, indica el actor.

La plataforma tuvo que insistirle, pero al final se anim¨® por la recomendaci¨®n de un compa?ero. ¡°Me daba curiosidad y, aparte, much¨ªsima gente me ped¨ªa cosas por redes sociales, por la calle o a la salida del teatro [actualmente protagoniza El peligro de las buenas compa?¨ªas en Madrid]. Ya no piden aut¨®grafos, sino que mande saludos a sus familiares, a sus amigos o a sus parejas¡±. Cayo apenas ha rechazado peticiones, solo alguna procedente de marcas, porque la mayor¨ªa consisten en ¡°mensajes de apoyo, de ¨¢nimo, de cari?o, para gente que se va a presentar a un examen, que tiene problemas de salud. O grupos de amigos, deportes, pe?as que se re¨²nen y quieren celebrarse a s¨ª mismos¡±.

Al igual que Cayo, muchas celebridades espa?olas se mostraron reticentes, seg¨²n cuenta Jaime De Wenetz. Ahora hay m¨¢s de 300. ¡°No se cre¨ªan que iba a haber gente dispuesta a pagar por un video-mensaje suyo, pero todo el que lo prueba contin¨²a. No hemos tenido ni una sola baja en Espa?a. Lo prueban, ven que tienen solicitudes, y como les van bien las cosas deciden destinar una parte a organizaciones ben¨¦ficas¡±, explica. Algunas celebridades indican en su perfil de Cameo que colaboran con alguna organizaci¨®n ben¨¦fica, aunque no explicitan qu¨¦ porcentaje destinan y, tal y como reconoce De Wenetz, la plataforma no comprueba si el famoso realmente env¨ªa el dinero a la ONG. Una celebridad puede activar la pesta?a solidaria y luego quedarse con todo el dinero que le llega. De Wenetz promete, eso s¨ª, que desde hace unas semanas Cameo destina el 80% de sus beneficios a asociaciones de ayuda a los refugiados ucranianos y que han animado a sus celebridades a hacer lo mismo.

Fernando Cayo est¨¢ entre los espa?oles m¨¢s solicitados, junto con Gasol, Enrique Arce (Arturito en La casa de papel) y Alaska. Las figuras internacionales predilectas por los clientes espa?oles son el cantante Bon Jovi, el actor de la telecomedia The inBetweeners James Buckley o Jordan Belfort, el excorredor de bolsa al que interpret¨® Leonardo DiCaprio en El lobo de Wall Street y que varios usuarios de Cameo definen como ¡°el puto amo¡±. El ¨²ltimo fichaje de Cameo Espa?a es Inmagic, una maga de C¨®rdoba de 19 a?os que tiene m¨¢s de 11 millones de seguidores en TikTok.

Adem¨¢s de influencers, exestrellas de Hollywood (Lindsay Lohan) o artistas veteranos (Jos¨¦ Feliciano, Gloria Estefan), Cameo incluye celebridades accidentales como Zoe Roth, conocida por un meme en el que, de ni?a, sonre¨ªa mirando a c¨¢mara con una casa en llamas de fondo. Cobra 27 euros. Tambi¨¦n est¨¢ en la plataforma Hide the Pain Harold, un modelo de la tercera edad cuyas fotos de banco de im¨¢genes sonriendo aunque visiblemente dolorido son casi un dialecto visual en Twitter. O Charles McDowell, cuya foto de arresto se viraliz¨® por el gran tama?o de su cuello y que graba sus v¨ªdeos desde prisi¨®n con un amigo sujetando el m¨®vil a trav¨¦s de una vitrina. Hay hasta pol¨ªticos, como el expresidente de M¨¦xico Vicente Fox o la candidata a la vicepresidencia republicana de la Casa Blanca en 2008 Sarah Palin, que promete enviar el v¨ªdeo en menos de 24 horas.

La telerrealidad es una fuente inagotable de celebridades. Una de las que est¨¢ m¨¢s de moda es Simon Leviev, conocido como El timador de Tinder que estafaba miles de euros a sus novias. Leviev, cuyo nombre real es Shimon Hayut, critic¨® a Netflix por hacer una serie documental sobre ¨¦l, pero ahora ha abrazado su fama y por 91 euros env¨ªa video-mensajes parodiando su modus operandi: ¡°Jessica, Charlie est¨¢ huyendo porque sus enemigos lo persiguen, ?necesita que le env¨ªes dinero! Y tambi¨¦n quiere desearte un feliz d¨ªa de San Valent¨ªn¡±. Las v¨ªctimas de la estafa de Leviev, Pernilla Sjoholm y Cecilie Fjellh?y, consideraron ¡°devastador¡± que Cameo ¡°colabore con un estafador¡±. Ellas han fichado por Memmo, la plataforma sueca que hace competencia a Cameo en Europa.

De Wenetz indica que Leviev no incumple ninguna de las tres reglas de Cameo: ni desnudos, ni violencia, ni discursos de odio. ¡°Es un asunto delicado¡±, admite. ¡°Cuando se plante¨® Cameo fueron apareciendo figuras que hacen cosas que no est¨¢n bien, pero se tuvo que poner unos l¨ªmites que nos sirven en estos casos para tomar las decisiones de s¨ª o no. Seguro que hay formas de interpretarlo. Hay que poner unas bases y seguirlas¡±. Dos celebridades han sido expulsadas de Cameo, pero sus responsables no quieren revelar de qui¨¦nes se trata.

La quinta celebridad m¨¢s exitosa de 2020 en Cameo fue Carole Baskin, la activista texana por los derechos de los felinos que se hizo famosa en contra de su voluntad gracias a la serie documental de Netflix Tiger King, donde se insinuaba que hab¨ªa asesinado a su marido y se lo hab¨ªa dado de comer a sus tigres. Baskin intent¨® denunciar a la productora de la serie, pero d¨ªas despu¨¦s tir¨® la toalla, se abri¨® un perfil en Cameo y escribi¨® en su bio ¡°Joe Exotic intent¨® matarme¡±. Recaud¨® 90.000 euros en una semana, una cifra r¨¦cord para la plataforma, en marzo de 2020.

Para entonces, la covid-19 estaba apunto de revolucionar Cameo. Muchos artistas se quedaron sin su principal fuente de ingresos de repente (convenciones de fans, conciertos en bares, eventos de empresa) y Cameo ofrec¨ªa una manera f¨¢cil, r¨¢pida y sin intermediarios de ganar dinero desde sus casas. Para los clientes, resultaba una manera sencilla de hacer un regalo o mandar ¨¢nimos a un ser querido a trav¨¦s de la distancia. Durante el primer mes del confinamiento el cat¨¢logo de famosos aument¨® en un 77% y el de peticiones en un 176%. En julio de 2020, Cameo hab¨ªa multiplicado por siete su valor respecto al a?o anterior. A lo largo de 2020 los beneficios se multiplicaron por cuatro, gracias a los 1.3 millones de video-mensajes enviados.

La creciente popularidad de Cameo ha ido atrayendo a figuras de mayor relevancia como Caitlyn Jenner (2.300 euros por v¨ªdeo), el exboxeador invicto Floyd Mayweather Jr (el m¨¢s caro de la plataforma: 13.650) o Brian Cox, el protagonista de Succession ganador del Emmy, quien promete en su v¨ªdeo de presentaci¨®n que por 634 euros estar¨¢ ¡°encantado de mandarte a tomar por culo¡± como su personaje Logan Roy.

Cameo tiene un bot de inteligencia artificial que revisa todas las peticiones y ¡°detecta construcciones de frases o im¨¢genes¡±, seg¨²n su creador, que pueden infringir las normas y la bloquea hasta que una persona la revisa. ¡°Pero claro, el bot no detecta si se trata de una broma o si el recipiente del v¨ªdeo est¨¢ en la c¨¢rcel¡±, indica refiri¨¦ndose al v¨ªdeo en que Carole Baskin cantanba el cumplea?os feliz a un hombre condenado por pedofilia.

El abogado Rudolph Giuliani hizo, sin darse cuenta, campa?a contra uno de sus clientes. Brett Favre, Andy Dick y Soulja Boy recitaron mensajes antisemitas. El c¨®mico Nick Ciarelli le pidi¨® a varios culturistas que le echasen la bronca a un ni?o por comer demasiados dulces y el v¨ªdeo recopilatorio tuvo 1000 retuits y 167000 reproducciones. El youtuber Jack Massey hizo peticiones cada vez m¨¢s extravagantes para comprobar hasta d¨®nde estaba dispuesta a llegar la gente por dinero y public¨® el resultado en un v¨ªdeo de 17 minutos.

Estas bromas llevaron a John Egan, CEO de la agencia de an¨¢lisis de mercados tecnol¨®gicos L¡¯Atelier, a comparar a las celebridades de Cameo con ¡°bufones de la corte¡±. El periodista de GQ Thomas Barrie coincide en que ¡°hay algo indudablemente indigno en la imagen de un cantante saltando al capricho de sus fans, ver a un famoso grabando un v¨ªdeo-mensaje en su habitaci¨®n por 50 euros erosiona r¨¢pidamente cualquier aura de misterio que pueda tener¡±.

El cliente de Cameo puede dejar una rese?a en la que punt¨²a de cero a 5 estrellas su satisfacci¨®n con el video-mensaje. En cierto modo, la plataforma invierte las din¨¢micas de poder tradicionales de la celebridad: por unos cuantos euros y durante un par de minutos, es ahora el an¨®nimo quien tiene el poder sobre el famoso, supuestamente la parte privilegiada.

El nombre de la plataforma es el t¨¦rmino que describe la intervenci¨®n breve de una persona famosa en una pel¨ªcula. En este caso, el famoso aparece en tu vida interpretando el papel de ¡°persona que sabe qui¨¦n eres¡±. Ese v¨ªdeo, en el que la celebridad mira a los ojos de su admirador, lo llama por su nombre y le dice exactamente lo que quiere o¨ªr, genera durante unos segundos una ilusi¨®n de igualdad, de reciprocidad y de intimidad. ¡°Es prostituci¨®n del talento¡±, se?ala Nico Cary, director de la agencia de creadores de contenido Influentially. ¡°Es vulgar y es cutre¡±. Seg¨²n ¨¦l, los v¨ªdeos resultan inc¨®modos de ver y hasta grimosos porque ¡°sabemos que todo es falso, sabemos que el famoso no quiere hacerlo¡±.

Fernando Cayo discrepa. A ¨¦l le encanta relacionarse con las personas que admiran su trabajo y considera que eso del misterio es ¡°una cosa de otra ¨¦poca¡å y que ahora el p¨²blico valora la cercan¨ªa. ¡°Yo me curro los v¨ªdeos, quiero que sean profesionales, divertidos y humanos. Ahora se celebra la cercan¨ªa, desde Rosal¨ªa hasta los actores de Marvel. Dwayne Johnson sale en su cocina comi¨¦ndose unas tortitas hablando sobre algo que le preocupa de manera cercana y prosaica. Hay que cambiar la mentalidad¡±, asegura.

Cameo est¨¢ introduciendo nuevas prestaciones como que el cliente, por un dinero extra, se asegure de que el famoso vea su foto o su v¨ªdeo de petici¨®n. ¡°La misi¨®n de Cameo es crear las conexiones [entre famoso y admirador] m¨¢s personalizadas y m¨¢s aut¨¦nticas del planeta¡±, asegura Steve Galanis. Parad¨®jico, teniendo en cuenta que no puede haber nada menos personal o aut¨¦ntico que pagar a alguien para que haga algo que de otra manera no har¨ªa.

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