Europa: todo lo que sea necesario, de nuevo
El problema de Alemania con el gas ruso es un problema com¨²n al que puede hacerse frente con los recursos de la Uni¨®n
¡°El Banco Central Europeo har¨¢ lo que sea necesario (whatever it takes) para mantener el euro¡±, la frase pronunciada en julio de 2012 por el entonces presidente del BCE, Mario Draghi, ha pasado a la historia como la demostraci¨®n de que una firme determinaci¨®n, claramente expresada en el momento oportuno, es capaz de poner coto a una formidable tormenta financiera y a todos los c¨¢lculos de los mercados y los especuladores. ¡°La Uni¨®n Europea har¨¢ lo que sea necesario para garantizar las fronteras a Ucrania y su derecho a elegir libremente a sus gobernantes y su futuro¡±, ser¨ªa hoy quiz¨¢s la f¨®rmula imprescindible del Consejo Europeo para dejar claro que no se abandonar¨¢ a Ucrania bajo ninguna circunstancia.
Lo que sea necesario significa lo que significa: no habr¨¢ vacilaci¨®n, no disminuir¨¢ la presi¨®n sobre Rusia, se llegar¨¢ hasta donde sea preciso para mantener el derecho de Ucrania. No esperen los mercados, dijo el BCE, que vayamos a aceptar la salida del euro de Grecia, de Espa?a o de Italia, porque jam¨¢s lo consentiremos, iremos contra ustedes, los especuladores, con todas nuestras fuerzas, resistiremos hasta arruinarlos y ganaremos esta guerra¡, y los mercados lo creyeron. No espere el Gobierno ruso que la Uni¨®n Europea busque una salida para Putin a costa de la voluntad de los gobernantes democr¨¢ticos de Ucrania, porque no es la UE la que tiene que encontrar una salida para el r¨¦gimen de Putin, sino el aut¨®crata quien debe esforzarse en encontrar la manera de acabar esta guerra totalmente injustificada. Europa resistir¨¢, resisti¨® en 2012 para proteger su moneda y resistir¨¢ en 2022 para proteger las libertades y todo lo que representa en el concierto mundial. Pensar otra cosa ser¨ªa certificar la muerte de la Uni¨®n.
La mayor¨ªa de los expertos afirma que la presi¨®n sobre Putin no ser¨¢ suficiente hasta que se logre terminar con las ventas de gas y petr¨®leo ruso en Europa, es decir, fundamentalmente en Alemania, y es cierto que hay que tener muy presente la angustia alemana por un eventual desabastecimiento de energ¨ªa que ponga en peligro su industria y su crecimiento econ¨®mico. Pero ese es precisamente el sentido ¨²ltimo de la Uni¨®n Europea, la base sobre la que fue construida: poder hacer frente a necesidades diferentes convirti¨¦ndolas en necesidades europeas. El problema de Alemania con el gas ruso es un problema com¨²n al que puede hacerse frente con todos los recursos de la Uni¨®n y de sus aliados, de manera que el sacrificio germano sea menor, tal y como ha defendido Luis Garicano en el Parlamento Europeo. Pero si es necesario, toda Europa har¨¢ lo que tenga que hacer y Putin no debe tener la menor duda de que acabar¨¢ arruinado.
La escritora Margaret Atwood escribi¨® hace poco: ¡°A veces me preguntan cu¨¢l considero que es el problema m¨¢s importante al que nos enfrentamos hoy. La crisis clim¨¢tica encabeza la lista, porque lo que le est¨¢ haciendo al planeta determinar¨¢ mucho de lo que es materialmente posible para la especie humana en los pr¨®ximos 50 a?os. Pero, m¨¢s inmediatamente, hay otra pregunta importante que nos hacen los tiempos que vivimos. Esa pregunta es: ?qu¨¦ tipo de sistema pol¨ªtico deber¨ªamos elegir? Si se trata de democracia abierta, tenemos mucho trabajo por delante. Debemos arremangarnos, fortalecer nuestra determinaci¨®n, resistir las serpientes de los falsos argumentos¡ Tiempos desesperados requieren remedios desesperados, y nuestros tiempos son desesperados. Propondr¨¦ algo simple. No se asuste. Piense cuidadosamente. Escriba claramente. Actuar de buena fe. Repetir¡±.
En el fondo, la propuesta de Atwood deber¨ªa formar parte del frontispicio de un nuevo proyecto de Constituci¨®n europea. La que se elabor¨® en 2004 y nunca lleg¨® a ser ratificada, pese a que la firmaron los jefes de Estado y Gobierno de los entonces 25 pa¨ªses de la Uni¨®n (Polonia, Hungr¨ªa y los tres b¨¢lticos acababan de ingresar), fijaba como objetivo ¡°ofrecer a sus ciudadanos un espacio de libertad, seguridad y justicia¡±. No nos asustemos, Europa no se desmoronar¨¢ salvo que perdamos de vista esa Constituci¨®n, escrita o no, que se sustenta sobre el respeto de la dignidad, la libertad, la democracia, la igualdad y el Estado de derecho. Pensemos con cuidado, escribamos con claridad, actuemos de buena fe y dejemos perfectamente claro que haremos ¡°todo lo que sea necesario¡± para proteger nuestros valores.
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