La Haya falla a favor de Chile y rechaza que deba negociar la salida al mar con Bolivia

Ambas partes, sin embargo, han sido animadas ¡°a continuar dialogando en busca de una soluci¨®n¡±. El litigio lleg¨® a la CIJ en 2013, cuando Bolivia demand¨® a Chile para recuperar una salida al oc¨¦ano. No ped¨ªa con ello la devoluci¨®n de una parte del territorio perdido en la Guerra del Pac¨ªfico?(1879-1884), sino desbloquear el ¡°tap¨®n¡± geogr¨¢fico creado entonces, refrendado con la firma del tratado de paz de 1904. El caso hab¨ªa creado gran expectaci¨®n en ambos pa¨ªses e inundado las redes sociales en Bolivia. Ello se debe, en parte, al optimismo mostrado en todo momento por el presidente, Evo Morales. El mandatario hab¨ªa dado las gracias ¡°al pueblo (...) porque siempre permaneci¨® unido¡±, seg¨²n dijo, poco antes de la lectura del fallo. Chile prefiri¨® la cautela. ¡°Hemos escuchado demasiadas cosas del presidente Morales. Escuchemos a los jueces¡±, fue la respuesta oficial antes del anuncio del tribunal.

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Bolivia y Paraguay son los ¨²nicos pa¨ªses de Am¨¦rica Latina sin salida al mar. La Paz la perdi¨® en la Guerra del Pac¨ªfico, que la enfrent¨®, junto con Per¨², a Chile. Desde entonces, seg¨²n los historiadores, Bolivia fue privada de 400 kil¨®metros de costa y unos 120.000 kil¨®metros cuadrados de territorio. Aunque el pa¨ªs dispone de libre tr¨¢nsito de personas y mercanc¨ªas para llegar al oc¨¦ano, desde la firma del tratado de 1904 ha intentado revisar dicho acuerdo repetidas veces. Las autoridades bolivianas reclaman?un acceso soberano al mar, no un mero derecho de paso.

Lo novedoso de este caso es que no pidieron al tribunal de La Haya la devoluci¨®n de territorios, ni la reforma del tratado existente. Esperaban que sancionara la obligaci¨®n de Chile de negociar el diferendo ¡°de buena fe, por vulneraci¨®n de las promesas en ese sentido hechas por Chile, que parece sufrir amnesia colectiva¡±, en palabras de la jurista francesa Monique Chemillier, representante boliviana ante la CIJ.

Morales ha considerado ¡°pol¨ªtica de Estado¡± demandar a Chile porque su Constituci¨®n califica el mar como ¡°patrimonio de la humanidad¡±. Sin olvidar la enorme riqueza pesquera a esa altura del Pac¨ªfico. Ante ello, Chile hab¨ªa asegurado ante la corte que ¡°Bolivia ha ignorado el contexto de la Guerra del Pac¨ªfico y la CIJ no es un tribunal de historia, sino de derecho¡±.

El caso se puso en marcha en? 2015, cuando los jueces internacionales se declararon competentes. Durante las audiencias, en 2018, Claudio Grossman, el representante chileno, dijo que su pa¨ªs ¡°ha conversado y seguir¨¢ conversando con Bolivia, pero el territorio chileno y su soberan¨ªa no est¨¢n sujetos a conversaci¨®n¡±. Roberto Ampuero, ministro de Exteriores chileno, a?adi¨® entonces que Bolivia ¡°busca victimizarse y presenta argumentos distorsionados¡±. La Paz, seg¨²n indic¨®, ¡°ejerce como ning¨²n otro pa¨ªs el acceso a los puertos chilenos del Pac¨ªfico¡±.

¡°Bolivia tiene plena autonom¨ªa aduanera en los puertos chilenos de Arica y Antofagasta y tiene el derecho a mantener mercanc¨ªa en tr¨¢nsito por 12 meses, con almacenamiento sin costo para sus importaciones. Y 60 d¨ªas de almacenamiento gratuito para sus exportaciones, franquicias que no extienden a ning¨²n otro pa¨ªs, ni a los propios empresarios chilenos¡±, reza el libro Vocaci¨®n de paz. La pol¨ªtica exterior de Chile, de la canciller¨ªa chilena.

En 2013 La Paz pidi¨® a la CIJ ¡°que obligue a Santiago a negociar de buena fe un acuerdo pronto y efectivo¡±, para que la primera recupere su salida mar¨ªtima. Evo Morales, que se ha implicado personalmente, present¨® en 2014 la memoria de la demanda. La corte escuch¨® al a?o siguiente las alegaciones de ambas partes. Era el paso previo para decidir si ten¨ªa competencia en el caso.

La CIJ dirime litigios entre Estados, en su mayor¨ªa fronterizos, y demandantes y demandados aceptan de entrada la decisi¨®n que pueda adoptarse. Pero la jurisdicci¨®n puede ser contestada y eso hizo Chile hace tres a?os. En opini¨®n de Santiago, no hac¨ªa falta abordar la cuesti¨®n ¡°porque no existe un derecho que pueda calificarse de expectaticio y genere obligaciones legales¡±. Es decir, rechazaba los argumentos bolivianos, centrados en ¡°las expectativas generadas en las conversaciones mantenidas por ambos pa¨ªses a lo largo del tiempo de que acabar¨ªa pact¨¢ndose una soluci¨®n¡±. Morales lo llama as¨ª, ¡°derecho expectaticio¡±, y aunque es una figura legal poco frecuente, consider¨® que val¨ªa para que la CIJ obligue a su vecino a pactar.