Alemania y Espa?a median para reducir la tensi¨®n en el Mediterr¨¢neo oriental
Francia y Grecia defienden el fin de la pol¨ªtica de apaciguamiento con Turqu¨ªa y la imposici¨®n de sanciones
La mitad oriental del Mediterr¨¢neo se ha convertido en uno de los vecindarios m¨¢s conflictivos de la Uni¨®n Europea debido a las disputas por sus hidrocarburos, algo que pone a prueba la capacidad de actuaci¨®n del club comunitario. En este marco, la presidencia alemana de la UE, con la colaboraci¨®n de Espa?a, trata de mediar entre los actores enfrentados, mientras otros pa¨ªses como Francia o Grecia apuestan por acciones m¨¢s duras para poner coto a lo que consideran pol¨ªticas expansionistas de Turqu¨ªa.
El pasado 21 de julio, el Estado Mayor de Grecia puso a sus Fuerzas Armadas en estado de m¨¢xima alerta en respuesta a la declaraci¨®n de Turqu¨ªa que delimitaba un ¨¢rea al sur de la isla griega de Kastel¨®rizo como zona de prospecciones s¨ªsmicas. Ankara se preparaba para enviar un buque de exploraci¨®n de hidrocarburos escoltado por dos fragatas, y varios cazas sobrevolaron la zona. Un paso m¨¢s en la interminable escalada que vive el Mediterr¨¢neo Oriental y que ha llevado a estos dos pa¨ªses a un nivel de confrontaci¨®n no visto desde la d¨¦cada de 1990, cuando estuvieron a punto de ir a la guerra por el control de unos islotes. Una semana despu¨¦s, las aguas volvieron a su cauce, al menos temporalmente, y Ankara y Atenas se han comprometido a dialogar.
Entretanto han mediado las llamadas a ambas capitales de la canciller alemana, Angela Merkel. ¡°A esta presidencia [rotatoria de la UE] le interesa mucho reducir la tensi¨®n en el Mediterr¨¢neo¡±, explica una fuente diplom¨¢tica europea. Tambi¨¦n es fruto de las negociaciones emprendidas por el alto representante de la UE para Pol¨ªtica Exterior, Josep Borrell, que visit¨® Turqu¨ªa a inicios de mes, y de los esfuerzos de otros pa¨ªses. El pasado 27 de julio, la jefa de la diplomacia espa?ola, Arancha Gonz¨¢lez Laya, anunci¨® tras reunirse con su hom¨®logo turco, Mevl¨¹t ?avusoglu, que Ankara se hab¨ªa comprometido a ¡°pausar las exploraciones al menos durante un mes¡± para dar ¡°espacio al di¨¢logo¡±. Un d¨ªa despu¨¦s, la ministra viaj¨® a Grecia, donde la cuesti¨®n del Mediterr¨¢neo Oriental tambi¨¦n ocup¨® buena parte de su agenda.
La tensi¨®n en esta regi¨®n no ha dejado de aumentar en los ¨²ltimos a?os, pues en ella se superponen varios conflictos: las disputas mar¨ªtimas y a¨¦reas entre Turqu¨ªa y Grecia; la divisi¨®n de la isla de Chipre; las guerras de Libia y Siria; la pugna por la primac¨ªa regional entre turcos, egipcios, saud¨ªes, emirat¨ªes e israel¨ªes; la b¨²squeda rusa de puertos en el Mediterr¨¢neo... Todo ello sobre el trasfondo de los descubrimientos de importantes dep¨®sitos de gas submarino.
¡°Desde 2002 mantuvimos negociaciones exploratorias para abordar la cuesti¨®n de las fronteras mar¨ªtimas, pero la parte griega solicit¨® detenerlas en 2016. Ahora Alemania y Espa?a est¨¢n promoviendo un di¨¢logo y esas iniciativas son bienvenidas por Turqu¨ªa¡±, afirma una fuente diplom¨¢tica de este pa¨ªs. Los canales de comunicaci¨®n entre Turqu¨ªa y Grecia nunca se han cerrado completamente, ni siquiera en los momentos de mayor tensi¨®n, pero ahora no son negociaciones sino ¡°conversaciones sobre los t¨¦rminos del di¨¢logo¡±, puntualiza otra fuente implicada.
Ankara y Atenas est¨¢n enfrentados por la definici¨®n de sus aguas territoriales, sus Zonas Econ¨®micas Exclusivas (ZEE) -que se extienden hasta 200 millas n¨¢uticas del litoral-, y su plataforma continental, hasta 350 millas n¨¢uticas. Grecia se aferra a la letra de la Convenci¨®n de la ONU sobre la Ley del Mar, que Turqu¨ªa no ha firmado, para reclamar que la delimitaci¨®n se haga teniendo en cuenta todas sus islas habitadas, incluidas las que est¨¢n situadas frente a la costa turca. Ankara, en cambio, propone aplicar las pr¨¢cticas consuetudinarias usadas en otros casos y que las islas remotas puedan generar aguas territoriales pero no derecho a ZEE o a plataforma continental. ¡°No tiene sentido que una isla min¨²scula como Kastel¨®rizo, a dos kil¨®metros de la costa turca y a m¨¢s de 500 de la Grecia continental genere 40.000 kil¨®metros cuadrados de ZEE para Grecia, que deber¨ªan pertenecer a Turqu¨ªa¡±, se queja la fuente turca: ¡°Del mismo modo, Espa?a no reivindica que sus islotes frente a Marruecos [V¨¦lez, Chafarinas y Alhucemas] le otorguen derechos exclusivos sobre esas aguas¡±.
La cuesti¨®n del gas
A esta disputa se a?ade el conflicto en Chipre, dividido desde 1974 entre la Rep¨²blica de Chipre -poblada mayoritariamente por habitantes de lengua griega y que controla el sur de la isla- y la Rep¨²blica Turca del Norte de Chipre, hogar de la comunidad turcochipriota, ocupada por las Fuerzas Armadas de Turqu¨ªa y sin reconocimiento internacional. En los ¨²ltimos a?os, Turqu¨ªa ha enviado barcos de guerra a aguas chipriotas para hostigar a las empresas (mayoritariamente europeas) que tratan de extraer el gas submarino, pues entiende que Nicosia no tiene potestad para gestionar los recursos naturales del pa¨ªs sin la aprobaci¨®n conjunta de la comunidad turcochipriota.
Estas acciones han provocado que cada vez haya m¨¢s Gobiernos y partidos dentro de la Uni¨®n Europea que apuesten por cesar la estrategia de apaciguamiento respecto a Turqu¨ªa y sustituirla por una pol¨ªtica de duras sanciones, as¨ª como romper unas negociaciones de adhesi¨®n que llevan a?os en v¨ªa muerta. En este bloque destaca Francia, pa¨ªs con intereses en el gas chipriota a trav¨¦s de la multinacional Total, que adem¨¢s ha chocado con Ankara por el conflicto libio (donde apoyan a bandos enfrentados) y ha reforzado su alianza con Emiratos ?rabes Unidos, uno de los principales clientes de la industria armament¨ªstica gala pero tambi¨¦n enemigo estrat¨¦gico de la actual Turqu¨ªa.
Sin embargo, otro grupo de pa¨ªses, entre ellos Alemania, Espa?a e Italia, prefiere mantener las l¨ªneas de di¨¢logo abiertas con Ankara, pues temen que, de romperse, Turqu¨ªa acabe definitivamente fuera de la esfera de influencia de la UE y la OTAN, siendo como es un socio crucial en aspectos comerciales, migratorios y de seguridad. ¡°Es cierto que, pese a ser un pa¨ªs candidato y tener la obligaci¨®n de alinearse progresivamente con la UE, Turqu¨ªa est¨¢ divergiendo en sus pol¨ªticas. Pero es precisamente ese proceso de adhesi¨®n el que nos permite tener una palanca para intervenir en Turqu¨ªa. Si se rompe, Turqu¨ªa ser¨¢ como Kazajist¨¢n, un pa¨ªs del que podremos quejarnos lo que queramos pero no se nos escuchar¨¢¡±, apunta Nacho S¨¢nchez Amor, relator sobre Turqu¨ªa del Parlamento Europeo: ¡°Adem¨¢s, una ruptura supondr¨ªa dejar abandonada a esa mitad de turcos que son democr¨¢ticos y proeuropeos¡±.
Espa?a se ha convertido en uno de los pocos gobiernos amigos que le quedan a Turqu¨ªa dentro de la UE. Y su voz se escucha en Ankara. Se ha dado ahora la alineaci¨®n de que tanto el jefe de la diplomacia europea como el relator del Parlamento Europeo son espa?oles, y que el Ministerio de Exteriores espa?ol cuenta con un equipo versado en el dosier turco: Gonz¨¢lez Laya tuvo que tratar la Uni¨®n Aduanera con Turqu¨ªa en su paso por la Comisi¨®n Europea y el secretario de Estado para la UE, Juan Gonz¨¢lez-Barba, fue embajador en Ankara y pas¨® por la legaci¨®n de Atenas. ¡°Somos un pa¨ªs que no tiene conflictos con Turqu¨ªa y para el que Turqu¨ªa no es un asunto interno como s¨ª lo es para otros pa¨ªses [Alemania, Austria, Francia, Holanda]. Tampoco somos un socio sospechoso para Chipre o Grecia, a los que siempre hemos defendido ante los actos unilaterales de Turqu¨ªa. As¨ª que Espa?a est¨¢ en una buena posici¨®n para mediar¡±, opina S¨¢nchez Amor.
Algunas de las l¨ªneas en las que trabaja la mediaci¨®n hispano-alemana son que Grecia y Turqu¨ªa acuerden compartir las aguas en disputa hasta que se resuelva el conflicto, y encauzar un nuevo proceso de negociaciones de reunificaci¨®n en Chipre, tras los fracasos de 2004 y 2017. La divisi¨®n de la isla mediterr¨¢nea continuar¨¢ generando tensiones en el Mediterr¨¢neo si no se soluciona, pues Grecia y Turqu¨ªa son, por Constituci¨®n, garantes de la soberan¨ªa de Chipre, hecho que utilizan sin pudor para avanzar sus intereses. ¡°Lo apremiante no es tanto llegar a una soluci¨®n como iniciar un nuevo di¨¢logo en Chipre, y entonces podr¨ªamos discutir modelos para compartir entre grecochipriotas y turcochipriotas los ingresos generados por los hidrocarburos, como pide Turqu¨ªa¡±, explica una fuente espa?ola.
Pero desde el lado griego no terminan de fiarse de las intenciones de una Turqu¨ªa con cada vez mayores ambiciones exteriores y pretenden utilizar la pr¨®xima reuni¨®n del Med7 (Francia, Espa?a, Portugal, Italia, Grecia, Malta y Chipre), convocado por el presidente franc¨¦s Emmanuel Macron para finales de agosto, a fin de pactar una lista de nuevas sanciones a Turqu¨ªa que se a?ada a las ya existentes y se aplique inmediatamente en caso de que Ankara retome sus acciones unilaterales.
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