El Brexit acecha a los europeos m¨¢s vulnerables en el Reino Unido
Los comunitarios en situaci¨®n precaria o mayores afrontan m¨¢s dificultades que el resto para regularizar su estancia antes de julio
Casi un mill¨®n de inmigrantes decidieron abandonar el Reino Unido y volver a sus pa¨ªses durante 2020, seg¨²n el Observatorio de Inmigraci¨®n de la Universidad de Oxford (MO, en sus siglas en ingl¨¦s). La imposibilidad de encontrar trabajo, la falta de ayudas sociales por su situaci¨®n irregular y una soledad aumentada por el confinamiento motivaron este ¨¦xodo. La nueva Ley de Inmigraci¨®n aprobada por el Gobierno de Boris Johnson, vigente desde el 1 de enero, complicar¨¢ mucho el regreso de los que quieran intentarlo en un futuro. Pero es la aplicaci¨®n definitiva del Brexit, a mediados de este a?o, la que amenaza con convertirse en una bomba de relojer¨ªa para los miles de personas convencidas de disfrutar ya en este pa¨ªs de una vida estable y asentada.
¡°El problema vendr¨¢ a mediados de a?o, con las personas mayores que comiencen a experimentar problemas, y se den cuenta, por ejemplo, de que ni siquiera ten¨ªan el pasaporte renovado despu¨¦s de tantos a?os¡±, reconoc¨ªa recientemente a EL PA?S una fuente de los servicios diplom¨¢ticos espa?oles en el Reino Unido. El Gobierno conservador puso en marcha, a partir de marzo de 2019, el llamado EU Settlement Scheme (Programa de Asentamiento para Ciudadanos de la UE). A trav¨¦s de un servicio en l¨ªnea, cualquier residente comunitario en territorio brit¨¢nico pod¨ªa solicitar su residencia con la presentaci¨®n de su pasaporte y alg¨²n documento que acreditara una estancia previa de al menos seis meses (contrato de alquiler, impuesto municipal o recibo de electricidad y gas). Una vez reconocida y aceptada la petici¨®n por el Ministerio del Interior, los derechos de movilidad, trabajo o asistencia social y sanitaria previos al Brexit se manten¨ªan intactos.
Hasta la fecha, seg¨²n fuentes oficiales, poco m¨¢s de cinco millones de personas (de ellas, al menos 246.000 espa?oles) han adquirido el nuevo estatus (al iniciarse la negociaci¨®n del Brexit se estimaba en unos 3,6 millones los comunitarios en el Reino Unido). Y hasta el 30 de junio de 2021 la ventanilla sigue abierta, a condici¨®n de demostrar una residencia previa al 31 de diciembre de 2020, cuando concluy¨® el periodo de transici¨®n. ¡°La mayor¨ªa de los ciudadanos de la UE que viven en el Reino Unido son j¨®venes y con altos niveles de educaci¨®n, y no deber¨ªan tener problema en entender y utilizar un proceso de petici¨®n que se ha simplificado al m¨¢ximo¡±, ha afirmado Madeleine Sumption, la directora del MO. ¡°Pero amenaza con presentar muchas m¨¢s dificultades para ciertos grupos de personas que, o bien desconocen ese proceso, o pertenecen a colectivos vulnerables que sufren exclusi¨®n social o abusos¡±, a?ade.
Las cifras censales del Reino Unido son difusas, pero el MO calcula en aproximadamente 140.000 las personas que llegaron a este pa¨ªs hace m¨¢s de 30 a?os. Su edad media ronda los 68 a?os, y muchos de ellos tienden a pensar que est¨¢n exentos del nuevo esquema, o ni siquiera saben de su existencia. En el caso de los hijos nacidos en territorio brit¨¢nico, la ley no les concede de inmediato la nacionalidad, por lo que los padres tambi¨¦n deben registrarlos en el mismo esquema. Las cifras previas apuntaban a la existencia en esa situaci¨®n de cerca de 700.000 menores.
El holand¨¦s Wiard Sterk, uno de los impulsores de la campa?a The3Million en defensa de los derechos de los ciudadanos comunitarios ante el Brexit, advierte de que, incluso en el caso de que un 70% o un 80% de residentes complete con ¨¦xito el proceso de regularizaci¨®n, la posible cifra de personas que se ver¨¢n desprotegidas es preocupante. ¡°Nos encontramos con casos similares a los del esc¨¢ndalo Windrush, en los que muchas personas carecen de documentaci¨®n a pesar de haber residido en este pa¨ªs casi toda su vida¡±. El Windrush fue el primer barco que transport¨® hasta el Reino Unido a finales de los a?os cuarenta a centenares de afrocaribe?os procedentes de las colonias brit¨¢nicas. Durante el Gobierno de la conservadora Theresa May, muchos de ellos quedaron varados en sus pa¨ªses de origen cuando, al concluir su viaje de visita, no pudieron volver a entrar al territorio brit¨¢nico.
¡°El Gobierno ya ha dejado claro que quien cumpla los requisitos para acogerse al esquema y tenga motivos razonables para haberse saltado el plazo tendr¨¢ nuevas oportunidades de presentar la petici¨®n¡±, explicaba a EL PA?S Kevin Foster, el secretario de Estado de Inmigraci¨®n, en una entrevista reciente. Pero el Ejecutivo de Boris Johnson no ha definido a¨²n claramente cu¨¢les ser¨ªan esos motivos razonables, mientras las nuevas reglas de inmigraci¨®n, mucho m¨¢s restrictivas, ya est¨¢n en vigor.
Diversas organizaciones humanitarias han denunciado la situaci¨®n de todos los ciudadanos comunitarios en circunstancias de vulnerabilidad que han acabado por engrosar las cifras de los sin hogar en el Reino Unido. Se calcula que podr¨ªan sumar hasta 2.000, la mayor¨ªa procedentes de Polonia y Rumania. ¡°Su expulsi¨®n ser¨ªa el ¨²ltimo recurso, y antes proceder¨ªamos a pedirles que abandonaran voluntariamente el pa¨ªs con ayudas p¨²blicas. Si se niegan, podemos vernos obligados a expulsarles¡±, reconoc¨ªa a Politico un portavoz del Ministerio del Interior. El Gobierno de Johnson ha puesto en marcha un plan de retorno voluntario, que incluye a los ciudadanos comunitarios residentes en el Reino Unido, con ayudas de hasta 2.300 euros, pero se desconoce de momento el n¨²mero de personas que se ha acogido a la oferta.
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