El ala ultra de los republicanos cierra filas en torno al exmarine acusado de asfixiar a un vagabundo en Nueva York

El ala dura de los republicanos ha encontrado un nuevo bander¨ªn de enganche cuando empiezan a rugir los motores de las primarias para las elecciones de 2024. El exmarine blanco Daniel Penny, que el 1 de mayo caus¨® la muerte por asfixia a un vagabundo negro con trastornos mentales en el metro de Nueva York, ha sido aupado a las andas del hero¨ªsmo por el candidato a la Casa Blanca Ron DeSantis, que ha calificado al veterano de ¡°buen samaritano¡±; Nikki Haley, tambi¨¦n aspirante a la presidencia, que ha pedido a la gobernadora de Nueva York que le indulte, o el empresario registrado asimismo en las primarias Vivek Ramaswamy, que don¨® 10.000 d¨®lares para su defensa.

Penny asfixi¨® a Jordan Neely, de 30 a?os, que se ganaba unas monedas como doble de Michael Jackson y viv¨ªa en la calle, despu¨¦s de que este empezara a gritar en un vag¨®n de metro, diciendo que ten¨ªa hambre y no le importaba morir. La v¨ªctima, que no agredi¨® a ning¨²n pasajero, fue inmovilizada por el exmilitar con una llave al cuello que ha sido prohibida por varios departamentos de polic¨ªa por su peligrosidad. Al cabo de unos minutos Neely dej¨® de moverse y, aunque el episodio fue grabado en v¨ªdeo por un pasajero, Penny no fue detenido. Dos semanas despu¨¦s -una tardanza muy criticada por activistas y pol¨ªticos dem¨®cratas-, fue imputado por homicidio imprudente y qued¨® en libertad bajo fianza de 100.000 d¨®lares.

Los republicanos m¨¢s radicales se han volcado con Neely, igual que hicieran durante la campa?a presidencial de 2020 con Kyle Rittenhouse, un adolescente blanco que en agosto de ese a?o mat¨® con un rifle de asalto a dos hombres e hiri¨® a otro durante una larga noche de protestas contra el racismo y la brutalidad policial en Wisconsin. Rittenhouse fue finalmente absuelto y la derecha ha desplegado toda su potencia de fuego medi¨¢tica para que Neely corra la misma suerte. La ofensiva medi¨¢tica pasa sobre todo por Twitter, donde su propietario, Elon Musk, celebr¨® con un me gusta un post de la ultra entre los ultras Marjorie Taylor Greene: ¡°Jordan Neely era un criminal violento que deber¨ªa haber estado entre rejas¡±. La congresista por Georgia se refer¨ªa al historial de 40 arrestos de la v¨ªctima por alteraci¨®n del orden p¨²blico o por colarse en el metro, incidentes debidos en parte a los altibajos de su estado.

El triste fin de Neely no significa para los republicanos la constataci¨®n de que algo falla en la atenci¨®n a las personas con trastornos mentales en Nueva York, o de la inhumana vida de decenas de miles de sin techo -adem¨¢s de las err¨¢ticas pol¨ªticas municipales al respecto-, sino una oportunidad para usar al exmarine como ariete contra los dem¨®cratas. Puede que su destino judicial sea lo de menos; lo importante para la facci¨®n republicana m¨¢s extremista es arremeter contra el fiscal de Manhattan, Alvin Bragg, sobre quien recae la instrucci¨®n del caso y el mismo que investig¨® e imput¨® a Donald Trump por 34 delitos relacionados con el pago de un soborno a una actriz porno.

La ocasi¨®n de alimentar el discurso de la inseguridad, que los republicanos achacan a las administraciones dem¨®cratas, ha sido oportunamente aprovechada. Bragg, que adem¨¢s es afroamericano, es la diana perfecta por su supuesta tibieza a la hora de enfrentar la delincuencia, pese a que los niveles actuales de criminalidad son comparables a los de hace una d¨¦cada, cuando pasaba por ser la ciudad m¨¢s segura de EE UU. Mensajes como los de Taylor Greene llueven sobre mojado. El 17 de abril, antes de que Neely muriera por ¡°compresi¨®n del cuello¡±, seg¨²n el forense, el Comit¨¦ Judicial de la C¨¢mara de Representantes, bajo control republicano, celebr¨® una inusual sesi¨®n en Nueva York, escuchando a ¡°v¨ªctimas de delitos violentos en Manhattan¡±, para incriminar a Bragg.

¡°Tienen un manual para ganar elecciones que se basa en explotar lo peor de la naturaleza humana para conseguir divisi¨®n y miedo¡±, ha dicho el dem¨®crata Jumaane Williams, tambi¨¦n afroamericano, defensor del pueblo de Nueva York. ¡°Y si en ello intervienen adem¨¢s la raza y la clase social, es como si fuera Navidad para ellos¡±. La degeneraci¨®n de la vida urbana, la quiebra del imperio de la ley y el orden, pero tambi¨¦n el combate a todo lo que suene woke, son desde hace tiempo los motores republicanos. Algunos Estados bajo su control aprobaron en 2020, tras la ola de protestas contra el racismo, penas m¨¢s graves para los manifestantes.

GiveSendGo, la p¨¢gina de recaudaci¨®n de fondos abierta por los abogados de Neely, de inspiraci¨®n cristiana y conocida por albergar campa?as de apoyo a imputados por el asalto al Capitolio y al citado Rittenhouse, ha recaudado m¨¢s de dos millones de d¨®lares mientras el paneg¨ªrico en torno a Neely engorda cuanto m¨¢s se encona la batalla pol¨ªtica. ¡°H¨¦roe¡±, incluso ¡°Superm¨¢n del metro¡±, le llam¨® el representante Matt Goetz (el mismo que en su d¨ªa ofreci¨® un puesto de becario a Rittenhouse una vez exonerado por la justicia). ¡°Tenemos suerte de contar con almas valientes como ¨¦l, dispuestas a hacer lo correcto¡±, dijo Tim Pool, un conocido creador de podcast de extrema derecha, que don¨® 20.000 d¨®lares a la causa. ¡°Estamos con los buenos samaritanos como Daniel Penny¡±, tuite¨® DeSantis, con un enlace a la p¨¢gina de recaudaci¨®n de fondos. ¡°Mostr¨¦mosle a este marine [que] EE UU le cubre las espaldas¡±, animaba el flamante candidato a la presidencia. ¡°Debemos derrotar a los fiscales financiados por Soros, detener la agenda procrimen de la izquierda y recuperar las calles para los ciudadanos respetuosos con la ley¡±, incidi¨®, haci¨¦ndose eco de informaciones no confirmadas de que el financiero y fil¨¢ntropo George Soros orquest¨® la acusaci¨®n contra Trump.

¡°Un buen samaritano ayuda a los que tienen problemas, no los ahoga¡±, clam¨® durante el funeral de Neely en una iglesia de Harlem, el 19 de mayo, el reverendo Al Sharpton. Mientras los abogados de Penny siguen haciendo caja gracias al fervor republicano -m¨¢s de 40.000 personas han contribuido hasta ahora-, la campa?a de recaudaci¨®n de fondos para sufragar los gastos del funeral y el entierro de Neely apenas si hab¨ªa alcanzado la semana pasada los 130.000 d¨®lares. Lejos de Twitter, visible pese al cenagal en que se ha convertido ¨²ltimamente, en tablones de mensajes y plataformas marginales que re¨²nen a la derecha m¨¢s profunda, los comentarios, en t¨¦rminos mucho m¨¢s racistas y violentos, se multiplican a la par que los bulos y la desinformaci¨®n. ¡°Un vago negro menos por las calles de Nueva York. Buen trabajo, soldado¡±, dec¨ªa un comentario an¨®nimo en 4chan. Otro ped¨ªa una cuerda y un poste para el dem¨®crata Bragg.

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