Coral Elizondo: ¡°Hablar de educaci¨®n inclusiva es hablar de democracia¡±
Defensora y divulgadora educativa considera que si sigue habiendo tanto debate y tanta polarizaci¨®n en torno a este tema es porque, como sociedad, ¡°seguimos sin trascender al concepto de integraci¨®n y sin entender verdaderamente lo que es la inclusi¨®n¡±
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Cuenta Coral Elizondo, maestra, psic¨®loga, orientadora educativa y especialista en educaci¨®n inclusiva, que cuando aborda el tema de la educaci¨®n inclusiva en sus formaciones suele recurrir a un poema de Eduardo Galeano, Los nadies: ¡°Los nadies: los hijos de nadie, los due?os de nada / Los nadies: los ningunos, los ninguneados, corriendo la liebre, muriendo la vida, jodidos, rejodidos¡±. ?Qui¨¦nes son esos ¡°nadies¡± en el sistema educativo?, le pregunto desde el otro lado de la l¨ªnea telef¨®nica d¨ªas antes de que participe en el webinar ¡®Atenci¨®n a la diversidad y educaci¨®n inclusiva con emoci¨®n¡¯, organizado por EduCaixa. ¡°Son los que tienen asociados recursos de necesidades educativas especiales, los que se quedan en los m¨¢rgenes, pero tambi¨¦n todos aquellos alumnos que se salen de lo normal, de una normalidad subjetiva que adem¨¢s creamos nosotros¡±, responde sin dudarlo. Defensora y divulgadora de la inclusi¨®n educativa, un derecho reconocido en el art¨ªculo 24 de la Convenci¨®n sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, Elizondo considera que si sigue habiendo tanto debate y tanta polarizaci¨®n en torno a este tema es porque, como sociedad, ¡°seguimos sin trascender al concepto de integraci¨®n y sin entender verdaderamente lo que es la inclusi¨®n¡±.
PREGUNTA. La integraci¨®n, entiendo, es quedarse a medio camino
R. La educaci¨®n inclusiva ser¨ªa la idea del ¡°todos¡±, mientras que en la integraci¨®n solo caben ¡°algunos¡±. La integraci¨®n nace a finales de los a?os 80, ya casi en los 90, cuando se integra en el aula a este alumnado con discapacidad intelectual que, por decirlo de alguna manera, siempre ha sido visto como el m¨¢s complicado. La realidad es que entonces no est¨¢bamos preparados para acoger esa diversidad en el aula, ya que ven¨ªa a romper un poco con lo que se ven¨ªa haciendo, con el mito del estudiante promedio, con esa consideraci¨®n de que todas las personas aprenden igual y, por tanto, hay que ense?ar a todas las personas, igual.
P. ?Qu¨¦ diferencia a la inclusi¨®n de la integraci¨®n?
R. La Unesco hace hincapi¨¦ en tres aspectos para definir la inclusi¨®n: que las personas est¨¦n presentes, participando y obteniendo logros. Eso quiere decir que las reconoces, que est¨¢n en el aula y que t¨² utilizas metodolog¨ªas que tienen en cuenta a todo el alumnado. Porque habitualmente lo que ocurre es que este alumnado est¨¢ presente, cierto, pero pocas veces participan, porque est¨¢n dentro del aula haciendo casi siempre cosas diferentes. Eso es segregar, seguir normalizando las injusticias. T¨² no te puedes permitir tener en el aula a ni?os y ni?as sin darle una respuesta de calidad. Eso es seguir transitando entre la integraci¨®n y la inclusi¨®n sin entender qu¨¦ es la inclusi¨®n. Incluir es acoger, hacer sentir al ni?o que forma parte de, crear v¨ªnculos y redes de apoyo, cuidar. Incluir es presencia, participaci¨®n y logros para todo el alumnado, sin dejar a nadie en los m¨¢rgenes y poniendo el foco en los m¨¢s vulnerables.
P. Cito literalmente el art¨ªculo 24 de la Convenci¨®n sobre los derechos de las personas con discapacidad: ¡°Los Estados Partes reconocen el derecho de las personas con discapacidad a la educaci¨®n. Con miras a hacer efectivo este derecho sin discriminaci¨®n y sobre la base de la igualdad de oportunidades, los Estados Partes asegurar¨¢n un sistema de educaci¨®n inclusivo a todos los niveles¡±.
R. Es que la educaci¨®n inclusiva es un derecho desde el a?o 2006. Y cabe recordar que Espa?a ratific¨® y firm¨® la Convenci¨®n en 2008, por lo que desde ese momento entr¨® a formar parte del ordenamiento jur¨ªdico espa?ol y se puso a la altura de la Constituci¨®n. Sin embargo, la LOE, la LOMCE y la LOMLOE han contemplado la inclusi¨®n como un principio y en todas las normativas de las Comunidades Aut¨®nomas que las desarrollan pasa lo mismo. Esto lleva a confusi¨®n, porque al considerarse un principio parece que no te obliga, se toma como algo orientativo, que uno lo hace si quiere o puede. Pero la realidad es que es un derecho y que estamos en la obligaci¨®n de ofrecer una educaci¨®n inclusiva como parte de una educaci¨®n de calidad que incluya a todo el alumnado. Ese es el reto que tenemos encima de la mesa de la educaci¨®n espa?ola ahora mismo: ?Seremos capaces de garantizar lo que marca el objetivo de desarrollo sostenible n¨²mero cuatro? ?Seremos capaces de garantizar una educaci¨®n inclusiva y equitativa de calidad a todo el alumnado?
P. ?Seremos capaces?
R. Estamos caminando hacia ello. La educaci¨®n inclusiva siempre es un proceso. Encontraremos docentes y centros educativos maravillosos que est¨¢n caminando hacia la inclusi¨®n. Y digo caminando porque la educaci¨®n inclusiva conlleva una reflexi¨®n constante, ya que cada a?o el contexto, el aula y los alumnos son diferentes, lo que obliga a tener muchas estrategias, recursos, medidas organizativas, metodol¨®gicas y curriculares para poder avanzar. Que haya muchas personas que est¨¦n ya a favor de esa educaci¨®n inclusiva significa que su mirada ya reconoce la diversidad y que ven el valor humano de todos los ni?os. ?Qu¨¦ hay quienes no? Eso es porque siguen pensando que estos ni?os vienen a bajar el ritmo, que es mejor que est¨¦n en otros centros, etc.
P. Muchas veces esas resistencias vienen desde las propias familias de ni?os con discapacidad.
R. Esa es otra mirada. Y la entiendo. Si t¨² tienes un ni?o ya escolarizado en un colegio de educaci¨®n especial, es normal que quieras que siga ah¨ª, porque es posible incluso que como familia ya hayas pasado por la escolarizaci¨®n ordinaria y haya sido un fracaso, de forma que te sientes m¨¢s seguro teniendo escolarizado a tu hijo o hija en un centro de educaci¨®n especial. Pero a la vez esto es algo muy triste, porque hablar de educaci¨®n inclusiva supone hablar de ¨¦tica, de compromiso, de transformaci¨®n, de cambio. Si no existe nada de eso y un ni?o tiene que acabar en un centro de atenci¨®n especial porque no es debidamente atendido en la escuela ordinaria, deber¨ªamos plantearnos qu¨¦ estamos haciendo como personas y como sociedad, c¨®mo estamos permitiendo la segregaci¨®n en la educaci¨®n y desde la educaci¨®n sin hacer nada para evitarlo.
P. ?Hace falta formaci¨®n del personal docente?
R. Hace falta informaci¨®n y formaci¨®n. Hacer entender que una cosa es aceptar que tienes diversidad en el aula y otra muy distinta acoger esa diversidad. Eso es un reto, un desaf¨ªo, una oportunidad para crecer. Y lo primero para ello es reconocer a los otros en tanto otros, lo que se conoce como alteridad. Esa mirada hacia la inclusi¨®n es la que rompe con la idea de lo que es normal y lo que es diferente. Porque, adem¨¢s, diversos somos todos y dependiendo de d¨®nde ponga cada uno el l¨ªmite entre lo que es normal y lo que no lo es, se ensancha o se acota esa variabilidad humana. La inclusi¨®n educativa, precisamente, parte de que la variabilidad humana es lo normal y no lo excepcional, de que no tendr¨ªamos que hablar de atender a los diversos, porque como dec¨ªa, diversos somos todos.
P. ?Qu¨¦ beneficios tiene la inclusi¨®n educativa para todos los implicados?
R. Hablar de educaci¨®n inclusiva es hablar de democracia. Hay que partir de esa base. Cuando t¨² en tu centro educativo tienes una mirada inclusiva est¨¢s creando tambi¨¦n estructuras democr¨¢ticas: est¨¢s respetando al otro en tanto que otro, est¨¢s escuchando, est¨¢s compartiendo, est¨¢s ofreciendo un curr¨ªculo inclusivo que ofrece igualdad de oportunidades para todo el alumnado.
P. ?Sigue siendo el curr¨ªculo una barrera de acceso?
R. Imagina que vas con la sillita de tu hijo y, para entrar a un edificio, te encuentras con unas escaleras. Es una barrera. Te toca coger la silla en brazos y subirlas. En cambio, si adem¨¢s de las escaleras tuvieses una rampa y un ascensor, podr¨ªas elegir, tendr¨ªas opciones. El curr¨ªculo muchas veces, por su rigidez, act¨²a igual que esas escaleras. Por eso es tan necesario trabajar en un dise?o curricular universal, para que cuando un docente se ponga a preparar su programa did¨¢ctico para explicar un tema, tenga en cuenta a todo el alumnado desde el inicio y ofrezca opciones para todos ellos, desde a la ni?a con altas capacidades hasta al ni?o con una discapacidad intelectual. Esta mirada hacia el aprendizaje que parte de la base de que no todos aprendemos igual nos lleva a un dise?o universal y a evitar las adaptaciones curriculares posteriores, que es lo que sucede en la actualidad. Ahora tenemos un curr¨ªculo r¨ªgido para todos y a ¡°los nadie, los ningunos y los ninguneados¡± les hacemos adaptaciones normalmente descontextualizadas, por lo que los empujamos a los m¨¢rgenes, les impedimos participar.
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