Es necesario un cambio en la sanidad p¨²blica para atender los casos de infertilidad
Si los resultados en t¨¦rminos de tasa de gestaci¨®n son mayores en los centros privados no es por los profesionales, sino por la falta de medios, el tiempo de espera y la limitaci¨®n de ciclos en la pr¨¢ctica p¨²blica
Desde 2008 hasta la actualidad, el n¨²mero de tratamientos de reproducci¨®n asistida en Espa?a ha aumentado casi un 50%, seg¨²n los ¨²ltimos datos de la European Society of Human Reproduction and Embryology (ESHRE), siendo la t¨¦cnica de donaci¨®n de ovocitos la que m¨¢s se ha incrementado, de forma que este es el principal pa¨ªs de Europa en cuanto a n¨²mero de ciclos de reproducci¨®n asistida. Este aumento tiene una f¨¢cil explicaci¨®n que se debe a diversos factores: los tratamientos son m¨¢s accesibles y conocidos por la poblaci¨®n, se obtienen mejores resultados y, sobre todo, el posponer la maternidad, con el consiguiente aumento de la edad de la mujer, hace que aumente la demanda. En junio, se conmemora el Mes Internacional del Cuidado de la Fertilidad, una iniciativa de la Asociaci¨®n Americana de Fertilidad para dar visibilidad, conocer y prevenir los problemas y dificultades para tener hijos.
Espa?a tiene una de las mayores medias de edad de la mujer para el nacimiento de su primer hijo ¡ªseg¨²n el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE), este dato fue de 32,60 a?os en 2021¡ª y uno de los ¨ªndices de natalidad m¨¢s bajos de Europa: menos de 1,3 hijos por mujer. Adem¨¢s, tambi¨¦n ostenta el dudoso honor de ser el pa¨ªs de Europa con la proporci¨®n m¨¢s alta de madres mayores de 40 a?os. M¨¢s del 30% de las mujeres que siguieron un tratamiento de fecundaci¨®n in vitro en 2019 con sus propios ¨®vulos ten¨ªan m¨¢s de 40 a?os, y este porcentaje se eleva al 75% en la donaci¨®n de ovocitos. A este retraso de la maternidad han contribuido de forma notable las tasas de desempleo juvenil, las brechas de g¨¦nero y los contratos basura, lo cual conlleva otro problema: cuando una mujer quiere conseguir un embarazo y est¨¢ cerca de los 40 a?os, la Sanidad P¨²blica no cubre los tratamientos.
Nuestra sanidad cubre los tratamientos de reproducci¨®n asistida hasta esa edad, sin incluir la donaci¨®n de ovocitos y, con pocas excepciones, el diagn¨®stico gen¨¦tico preimplantacional. Las pacientes tienen un tiempo de espera medio de un a?o en la mayor¨ªa de los centros p¨²blicos, y todo ello explica que el 75% de los tratamientos de reproducci¨®n asistida se realicen en los centros privados. Todo esto conlleva un importante determinante socioecon¨®mico, ya que no todos los pacientes pueden abordar el gasto que conlleva un tratamiento privado.
Algunos estudios, adem¨¢s, han demostrado que los resultados en t¨¦rminos de tasa de gestaci¨®n son mayores en los centros privados que en los centros p¨²blicos, no debido a los profesionales ¡ªque en muchas ocasiones son los mismos¡ª, sino a la falta de medios, el tiempo de espera y la limitaci¨®n de ciclos en la pr¨¢ctica p¨²blica, lo que lleva a los pacientes a buscar atenci¨®n en las cl¨ªnicas privadas. Esta situaci¨®n est¨¢ incrementada en los pacientes con mayores ingresos que, directamente, acuden a la medicina privada.
Las intenciones de la ley espa?ola son buenas, as¨ª como la posibilidad de contar con unidades p¨²blicas que atiendan los casos de infertilidad. Pero los resultados y la pr¨¢ctica demuestran que es necesario un cambio.
Idealmente, se podr¨ªa pensar en dotar de m¨¢s recursos a la medicina p¨²blica, pero esto podr¨ªa conducir a un gasto inabordable por el sistema p¨²blico de salud. Aunque la decisi¨®n de tener hijos pueda sostenerse s¨®lidamente con el principio de autonom¨ªa, choca con las limitaciones que han de imponerse por el principio de justicia cuando el ejercicio de tal derecho supone graves inconvenientes en la distribuci¨®n de recursos limitados y en las prioridades establecidas dentro de una pol¨ªtica sanitaria.
Quiz¨¢s, habr¨ªa que empezar por el principio, facilitando a los j¨®venes unos recursos que les permitan poder formar una familia y no tener que recurrir a la reproducci¨®n asistida. Y cuando as¨ª se requiera, la sanidad p¨²blica deber¨ªa proporcionar los medios adecuados para conseguirlo.
*Roc¨ªo N¨²?ez Calonge es doctora en Biolog¨ªa y experta en reproducci¨®n asistida y bio¨¦tica.
Puedes seguir Mamas & Papas en Facebook, Twitter o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter quincenal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.