Esperanza, caos y filas interminables en Ecatepec: la vacunaci¨®n en uno de los municipios m¨¢s mortales de la pandemia en M¨¦xico
Las primeras vacunas contra la covid-19 llegan a uno de los municipios m¨¢s poblados, marginados y azotados por la pandemia de M¨¦xico entre la confusi¨®n, el entusiasmo y una log¨ªstica rebasada
Apenas caen los primeros rayos de sol de la ma?ana y ya hay miles de personas esperando ser vacunadas contra la covid-19 en Ecatepec, un inmenso municipio del Estado de M¨¦xico con m¨¢s de 1,6 millones de habitantes en la periferia de Ciudad de M¨¦xico. La fila da la vuelta dos veces al Multideportivo de Las Am¨¦ricas y serpentea entre vendedores de tamales, agentes policiales y peque?os bancos que buscan aliviar una espera que pinta para ser larga. Sarah¨ª Anaya lleg¨® antes que todos. Se plant¨® desde las siete de la noche del lunes a las puertas del centro de vacunaci¨®n y lleva casi 16 horas apartando el lugar para sus familiares. ¡°Fue la noche m¨¢s horrible de mi vida¡±, confiesa, ¡°pero esperemos que valga la pena¡±. No ha dormido, no ha comido ni ha ido al ba?o, pero ella est¨¢ dispuesta a hacer lo que haga falta. La llegada de la vacuna a uno de los sitios m¨¢s poblados, marginados y azotados por la pandemia se ha vuelto una misi¨®n contra todo pron¨®stico: un hito donde se desvanece la sana distancia y donde reina el caos y la esperanza. Es una doble promesa: superar la emergencia sanitaria y dejar atr¨¢s la crisis econ¨®mica.
Anaya es la primera en la fila, pero 512 personas se vacunar¨¢n antes que su mam¨¢, de 62 a?os, y su suegra, de 77. Las autoridades impulsaron un sistema de registro por internet en las ¨²ltimas semanas, pero la mayor¨ªa de las personas que llegaron este martes no recibieron un mensaje ni una llamada para saber cu¨¢ndo les tocaba vacunarse. Se hab¨ªan contemplado 10 sedes para arrancar con la vacunaci¨®n, pero a ¨²ltima hora del lunes se anunci¨® que seis no iban a recibir gente por problemas de log¨ªstica. Algunas personas que hab¨ªan llegado a esos centros fueron llevadas en camionetas a los lugares que s¨ª iban a aplicar las vacunas. ¡°No es justo que jueguen as¨ª con nosotros¡±, se queja Ana Molina, que fue tra¨ªda desde el m¨®dulo de R¨ªo de la Luz, uno de los que cerraron sin previo aviso. En medio del cuello de botella y de los reclamos por quienes ¡°se colaron¡±, fueron los ciudadanos quienes se organizaron y apuntaron en pedacitos de papel los turnos, aunque despu¨¦s el personal de apoyo entr¨® al quite. Anaya tiene la ficha 513 y 514 porque poco m¨¢s de medio millar de adultos mayores de 60 a?os no alcanzaron vacuna un d¨ªa antes.
¡°Me he pasado la pandemia encerrada en mi casa, ya parezco murci¨¦lago¡±, dice entre risas Margarita Uribe, de 77 a?os. Hasta hace unos meses, Margot, como le gusta que la llamen, ven¨ªa al Multideportivo a nadar. Este martes ha vuelto al mismo sitio, pero ahora con la esperanza de volver a hacer ejercicio, despu¨¦s de ver las noticias. El s¨¢bado llegaron a M¨¦xico las primeras 200.000 dosis de la vacuna china de Sinovac y las autoridades sanitarias decidieron destinarlas exclusivamente a Ecatepec, un municipio que tiene el estigma de la violencia feminicida, la inseguridad, la falta de agua y la desidia de sus gobernantes.
Pero el fin de semana la historia fue diferente. Jos¨¦ Luis Alom¨ªa, director general de Epidemiolog¨ªa, explic¨® que no solo se trata del punto en el pa¨ªs donde viven m¨¢s personas en situaci¨®n de pobreza y pobreza extrema, tambi¨¦n tiene indicadores de letalidad y mortalidad por la pandemia m¨¢s altos que la media nacional. El municipio rebasa los 28.000 casos confirmados y las 4.000 defunciones: una de cada siete personas que se ha contagiado de covid ha muerto, seg¨²n cifras oficiales. Se decid¨ªa entonces por avanzar en la vacunaci¨®n de los adultos mayores en Ecatepec: uno de los grupos m¨¢s vulnerables en una de las zonas m¨¢s golpeadas por la epidemia. ¡°Estoy muy contento, por primera vez sentimos que nos toman en cuenta¡±, asegura C¨¢ndido Quechol, de 68 a?os, todav¨ªa con la mano sobre el brazo tras recibir la vacuna. ¡°Hay algo de pol¨ªtica, algo de pandemia, algo de c¨®mo es vivir aqu¨ª en Ecatepec¡±, dice Armando Hern¨¢ndez, de 72.
Debajo del toldo blanco donde se aplican las vacunas parece otro universo. En un abrir y cerrar de ojos, diez equipos de dos personas cada uno aplican a toda velocidad las inyecciones. Las hieleras azules tienen 40 dosis que van y vienen para rellenarse, mientras agentes de la Guardia Nacional custodian el contenedor donde est¨¢ el resto de los viales. ¡°Lo estuve esperando desde hace mucho, pero ?ay! Me doli¨® cuando sent¨ª la aguja¡±, cuenta Elisa Jim¨¦nez, de 76 a?os. ¡°?A m¨ª no me doli¨® nada!¡±, responde sonriente su esposo Lucio Alba, de 79.
Despu¨¦s del pinchazo, los vacunados deb¨ªan esperar 30 minutos para ver si presentaban efectos secundarios como n¨¢useas, dolor de cabeza o escalofr¨ªos. ¡°Es muy importante que no bajen la guardia, que usen cubrebocas, que sigan guardando sana distancia¡±, pregona el doctor Luis Soto mientras camina por las sillas donde esperan los mayores de 60 a?os. Soto dice que lo que m¨¢s le preocupa a la gente no es cu¨¢ndo recibir¨¢ la segunda dosis o las contraindicaciones, sino si pueden seguir tomando sus medicinas, comiendo lo que acostumbran y seguir con sus vidas. Algunos como ?ngel L¨®pez, de 97 a?os, llegaron con su tanque de ox¨ªgeno; muchos como Martha Polo, de 77 a?os, son hipertensos y diab¨¦ticos, otras como Guadalupe Aguilera, de 66 a?os, luchan contra el c¨¢ncer.
Conforme fluyen las vacunas, los r¨ªos de gente empiezan a bajar. Llegado el mediod¨ªa, el Centro Cultural y Deportivo de Las Am¨¦ricas, otra sede de vacunaci¨®n a menos de dos kil¨®metros de distancia, ya ha agarrado ritmo y atiende a pr¨¢cticamente todas las personas sin necesidad de esperar. Se corri¨® la voz y los que hac¨ªan fila en el Multideportivo se fueron a toda prisa a probar suerte. ¡°El otro centro estaba imposible, pero era importante conseguir la vacuna¡±, dice Leobardo Navarro, de 88 a?os. ¡°La gente aqu¨ª sale mucho con o sin pandemia¡±.
En mayo pasado, un grupo de familiares irrumpi¨® en el Hospital de Las Am¨¦ricas, en la misma zona, luego de recibir la noticia de que sus seres queridos hab¨ªan fallecido. Desesperados porque no pod¨ªan verlos, los deudos atacaron a m¨¦dicos y enfermeras, llegaron al patio trasero del sanatorio y abrieron, una tras otra, 25 bolsas de cad¨¢veres para buscarlos. Las Am¨¦ricas protagoniz¨® uno de los momentos m¨¢s duros de la pandemia que se recuerdan en el pa¨ªs, hoy concentra la mayor¨ªa de las primeras dosis que llegaron a Ecatepec.
¡°Qui¨¦n sabe, igual y vivo otros 20 a?os m¨¢s¡±, bromea Isabel Tenorio, que en dos semanas cumplir¨¢ 100 a?os. Su hijo falleci¨® por covid-19, pero quiere ¡°seguir dando guerra¡± y cocinar, tejer y ver a su familia sin miedo a contagiarse, aunque para eso todav¨ªa falta. Es lo mismo que esperan sus cuatro hijos, 14 nietos, nueve bisnietos y su tataranieta; unas 3.600 personas previstas para vacunarse este martes en las tres sedes del fraccionamiento de Las Am¨¦ricas, y m¨¢s de 220.000 adultos mayores de 60 a?os en todo Ecatepec.
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