Rejuvenecer las pensiones
Es leg¨ªtimo exigir a quienes se oponen a la reforma que expliciten los costes y beneficios de su alternativa. S¨®lo sabemos que no incluir¨ªa los impuestos ¡°escondidos¡±, ¡°confiscatorios¡± y ¡°revolucionarios¡± que supuestamente contiene esta, pero ?nos pueden dar alg¨²n detalle m¨¢s?
La relaci¨®n de los espa?oles con las pensiones es asombrosa. Mientras ten¨ªamos jubilaciones m¨ªseras, no nos quej¨¢bamos. Pero, a medida que han crecido en n¨²mero e importe medio, nos hemos puesto a protestar. Como se?ala la soci¨®loga Elisa Chuli¨¢, la opini¨®n p¨²blica empez¨® a desconfiar del sistema de pensiones a partir de los 90. Y, desde entonces, todo son recelos hacia las propuestas para reformarlo.
Y, s¨ª, nuestro sistema de pensiones es mejorable, pero hay pocos mejores en todo el planeta. ?En cu¨¢ntos pa¨ªses cobra un pensionista un porcentaje mayor de su ¨²ltimo sueldo? ?En cu¨¢ntos rinde m¨¢s cada euro cotizado al sistema? ?En cu¨¢ntos se ha reducido tanto la tasa de pobreza entre la gente mayor? Nuestras pensiones son un ¨¦xito.
La reforma del Gobierno despierta preguntas leg¨ªtimas. ?Se ajustan las pensiones al reto demogr¨¢fico? Tenemos una de las tasas de fecundidad m¨¢s bajas, y una de las esperanzas de vida m¨¢s altas, del mundo. ?Es el sistema sostenible o se disparar¨¢ el d¨¦ficit p¨²blico? ?No se disparar¨¢n los gastos adicionales por encima del aumento de ingresos previsto? ?No es la subida de las cotizaciones insuficiente, ineficiente e insolidaria?
Quiz¨¢s es una reforma de m¨ªnimos, para superar el umbral de la Comisi¨®n y recibir los fondos de recuperaci¨®n. Quiz¨¢s una reforma como la del PP en 2013, con su implacable ¨ªndice de revalorizaci¨®n de las pensiones, guste m¨¢s en c¨ªrculos ortodoxos. Pero la Comisi¨®n, como la polic¨ªa, no es tonta y, si el primer acuerdo que cerr¨® es con Espa?a, sabiendo que luego desfilar¨ªan otros miembros, es porque era una referencia ¨®ptima.
Los hombres y mujeres de negro entienden, como Voltaire, que lo perfecto es enemigo de lo bueno. Y, antes que una reforma ideal, es preferible una como la de Escriv¨¢, que tiene m¨¢s visos de perdurar porque pone en el eje el mantenimiento del poder adquisitivo de las pensiones. Y, guste o no, ese es el mandato democr¨¢tico, refrendado en 2020 por los principales partidos del arco parlamentario: PSOE, PP, Ciudadanos, Unidas Podemos y PNV.
Es licito ir contra esa directriz, pero es leg¨ªtimo exigir a quienes se oponen a la reforma que expliciten los costes y beneficios de su alternativa. S¨®lo sabemos que no incluir¨ªa los impuestos ¡°escondidos¡±, ¡°confiscatorios¡± y ¡°revolucionarios¡± que supuestamente contiene esta, pero ?nos pueden dar alg¨²n detalle m¨¢s? @VictorLapuente
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.