La ampliaci¨®n de la UE es necesaria pero imposible
La Cumbre de Granada cobra extrema relevancia porque formalmente marcar¨¢ el comienzo del debate al m¨¢s alto nivel sobre la capacidad de los Veintisiete para integrar nuevos miembros
Poco a poco estamos haci¨¦ndonos a la idea de que la guerra de Ucrania va a tener enormes consecuencias para la composici¨®n y la naturaleza de la Uni¨®n Europea. Inmediatamente despu¨¦s de la invasi¨®n rusa, a finales de febrero de 2022, Ucrania toc¨® a la puerta de Europa. Era una llamada de auxilio que no pod¨ªa ser ignorada y los l¨ªderes de gobiernos europeos lo supieron ver. En junio de 2022, le otorgaron la condici¨®n de pa¨ªs candidato. Fue una se?al de apoyo moral y pol¨ªtico a un vecino asediado.
En aquel entonces, los gobiernos reacios ¡ªen Par¨ªs, La Haya o Lisboa¡ª todav¨ªa pod¨ªan pensar que aquel ofrecimiento no era m¨¢s que una promesa para el futuro, sin consecuencias inmediatas concretas. Pero el futuro lejano tambi¨¦n est¨¢ cada d¨ªa m¨¢s cerca. Adem¨¢s, despu¨¦s de Ucrania, la perspectiva de la adhesi¨®n se extendi¨® tambi¨¦n a Moldavia y Georgia, otros dos pa¨ªses asimismo en la zona de tiro de Rusia. Y eso despert¨® las esperanzas de los seis pa¨ªses balc¨¢nicos que llevan tanto tiempo en la sala de espera de la UE, como Serbia y Albania entre otros. Con estas incorporaciones, la Uni¨®n tendr¨ªa 36 miembros en total, frente a los 27 actuales. Esto detona enormes interrogantes sobre el dinero, el poder, la seguridad, apoyo de la opini¨®n p¨²blica y el futuro del proyecto europeo.
Un desayuno de 10 jefes de Gobierno en el Hotel Amigo de Bruselas, poco antes de las recientes vacaciones de verano, marc¨® el final del ¡°voltear hacia otro lado¡±. El presidente Emmanuel Macron, el canciller Olaf Scholz y el primer ministro Mark Rutte invitaron a siete colegas a un debate informal sobre la importancia de una gran ampliaci¨®n hacia el Este. Tambi¨¦n estuvieron all¨ª el presidente Pedro S¨¢nchez y sus hom¨®logos de Italia y Polonia. No pod¨ªan salir soluciones definitivas de un grupo tan reducido, pero dio inicio la conversaci¨®n. Esta continuar¨¢, sobre todo durante la cumbre de la UE en Granada, en la que Espa?a tiene por supuesto un papel de peso.
No obstante, en el Hotel Amigo se lleg¨® ya a una conclusi¨®n. Los l¨ªderes reconocieron que los ¡°deberes¡± de la ampliaci¨®n no solo recaen en los pa¨ªses candidatos. Es innegable que los aspirantes deben hacer todo tipo de reformas si quieren estar ¡°listos¡±, por ejemplo, para el mercado interior. La Comisi¨®n Europea supervisa ese proceso con gran atenci¨®n, informe tras informe, un a?o tras otro. Hay normas definidas.
Pero la Uni¨®n tambi¨¦n debe estar preparada. ?C¨®mo podr¨¢n seguir siendo manejables los asuntos con m¨¢s de 30 pa¨ªses? ?C¨®mo variar¨¢n los flujos financieros con tantos nuevos socios relativamente pobres? ?Habr¨¢ que reformar la pol¨ªtica agraria cuando se incorpore Ucrania, el gigante del cereal? ?Y qu¨¦ lecciones hemos aprendido de la gran ampliaci¨®n de 2004, que incluy¨® a Polonia y otros pa¨ªses de Europa del este, por ejemplo a prop¨®sito del Estado de derecho? ?Necesita la ampliaci¨®n un (gran) cambio de los tratados europeos o se podr¨¢ absorber dentro de las reglas del juego actuales?
En la jerga de la UE se habla de ¡°capacidad de absorci¨®n¡±, o de la capacidad de la Uni¨®n para integrar nuevos miembros. El t¨¦rmino da a entender que existe una medida objetiva (como en el caso de una esponja). Pero estamos hablando de aspectos abiertos y muy pol¨ªticos. No existe un criterio homologado ni una lista de respuestas correctas. Requerir¨¢ de criterio pol¨ªtico, de ponderar lo que se debe y lo que se puede hacer, considerando al mismo tiempo qui¨¦n quiere o rechaza qu¨¦.
Espa?a, que durante este semestre preside el Consejo de la UE, tiene ante s¨ª una tarea importante. En estos seis meses hay que dar una orientaci¨®n definitiva al debate sobre la ampliaci¨®n, emprender los trabajos preliminares, determinar los marcos de actuaci¨®n y tal vez esbozar un calendario. Junto con las instituciones de la UE y el pr¨®ximo pa¨ªs en ocupar la presidencia, B¨¦lgica, el Gobierno espa?ol puede conducir el proceso.
La Cumbre de Granada cobra extrema relevancia ya que formalmente marcar¨¢ el comienzo de este debate al m¨¢s alto nivel gubernamental en la UE, y Pedro S¨¢nchez tendr¨¢ un papel crucial como anfitri¨®n. Se re¨²nen en la Alhambra, en plena frontera suroeste de Europa y casi enfrente del norte de ?frica. La migraci¨®n proveniente de T¨²nez, as¨ª como de otros lugares, ser¨¢ por supuesto parte de la agenda. Pero los debates estrat¨¦gicos necesariamente tendr¨¢n que mirar hacia el Este, hacia Ucrania y Rusia. La ampliaci¨®n de la UE forma parte de la respuesta geopol¨ªtica a la guerra.
En cualquier caso, el debate ser¨¢ intenso. Todas estas decisiones supondr¨¢n grandes tensiones p¨²blicas en los pr¨®ximos a?os. Por un lado, est¨¢ el imperativo geoestrat¨¦gico (ya mencionado) de integrar inequ¨ªvocamente a Ucrania y los Balcanes en el orden europeo. Por otro, hay una profunda inquietud sobre la cohesi¨®n y el funcionamiento de la Uni¨®n cuando se incorporen pa¨ªses con estructuras estatales d¨¦biles, adem¨¢s de dudas razonables sobre el apoyo democr¨¢tico que esto podr¨ªa recibir.
Por ejemplo, la opini¨®n p¨²blica en Francia y Pa¨ªses Bajos no es entusiasta al respecto. Por supuesto, son notablemente solidarios con Ucrania en la lucha contra Vlad¨ªmir Putin. Pero, para los votantes de Burdeos o Rotterdam, la ayuda armament¨ªstica es una cosa ligeramente distinta, m¨¢s remota a la posibilidad de que eso signifique tener que contribuir m¨¢s al presupuesto de la UE o hacer una dr¨¢stica reforma de la Pol¨ªtica Agraria Com¨²n, la PAC. En esos Estados miembros, un refer¨¦ndum sobre la ampliaci¨®n significa un gran reto.
?Qu¨¦ hacer cuando algo es al mismo tiempo, necesario e imposible? La soluci¨®n cl¨¢sica es dejar pasar el tiempo. Postergar, esperar, reformar, ver si la cambia situaci¨®n. Por otra parte, un aplazamiento interminable crea frustraci¨®n (no hay m¨¢s que pensar en los Balcanes).
A finales de agosto, Charles Michel, presidente del Consejo Europeo, introdujo la dimensi¨®n temporal. En Eslovenia dijo que ¡°2030¡å era una buena fecha para llevar a cabo una nueva ampliaci¨®n. Demasiado tarde para unos, absurdamente pronto para otros. Algunos, adem¨¢s, le acusan de distorsionar el examen objetivo (por m¨¦ritos) de los candidatos. Pero Michel tiene raz¨®n al decir que tener una fecha crea una din¨¢mica, marca una fecha l¨ªmite.
Recientemente, el polit¨®logo b¨²lgaro Ivan Krastev, experto en la regi¨®n, calific¨® de ¡°ciencia ficci¨®n¡± la idea de que, gracias a las reformas, los pa¨ªses balc¨¢nicos se parecer¨ªan mucho m¨¢s al resto de la UE en solo siete a?os. Se les puede dejar entrar, pero no se puede tener todo de golpe.
Adem¨¢s de dejar pasar el tiempo, hay otra salida para el dilema de la que tambi¨¦n se est¨¢ empezando a hablar: simplificar la transici¨®n entre miembros y no miembros, entre los que est¨¢n dentro y los que est¨¢n fuera. A finales de mayo, la presidenta de la Comisi¨®n, Ursula von der Leyen, sugiri¨® una adhesi¨®n gradual o parcial. De nuevo, esta soluci¨®n tendr¨ªa sus inconvenientes, pero, en una situaci¨®n sin soluciones perfectas, esta podr¨ªa ser una forma de avanzar.
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