¡°Las mujeres no son f¨¢bricas de beb¨¦s¡±: la demograf¨ªa como herramienta pol¨ªtica desata la ansiedad en la poblaci¨®n, seg¨²n la ONU

?Que hay crisis clim¨¢tica? La soluci¨®n pasa por convencer a las mujeres de tener menos hijos. ?Que las sociedades est¨¢n envejecidas? La medida recomendada es, entonces, la contraria, convencerlas para que tengan m¨¢s hijos. El elevado crecimiento demogr¨¢fico en algunos pa¨ªses y el envejecimiento de la poblaci¨®n en otros ¡ªen un planeta de recursos finitos y crecientemente inestable¡ª invita a algunos gobiernos a implantar pol¨ªticas de control para disminuir, aumentar o mantener la natalidad, un enfoque ¡°simplista¡± que reduce la humanidad a ¡°n¨²meros¡± y convierte el cuerpo de las mujeres en una herramienta sin contemplar sus derechos sexuales y reproductivos. Esta es la advertencia que se desprende del ¨²ltimo informe del Fondo de Poblaci¨®n de Naciones Unidas (UNFPA), hecho p¨²blico este mi¨¦rcoles, un an¨¢lisis que revela una creciente ¡°ansiedad¡± entre la poblaci¨®n ante la perspectiva del aumento exponencial de seres humanos en un mundo con crisis superpuestas y con poblaciones muy longevas.

¡°Los gobiernos est¨¢n haciendo un mayor uso de pol¨ªticas con una finalidad demogr¨¢fica, bien para reducir la tasa de natalidad o para aumentarla, lo que contribuye a la ansiedad de la poblaci¨®n, porque se transmite la idea de que hay un problema demogr¨¢fico que requiere una intervenci¨®n del poder p¨²blico¡±, explica Jaume Nadal Roig, dem¨®grafo y representante del UNFPA en Ucrania, en una conversaci¨®n con este diario. Este enfoque demogr¨¢fico incita a aplicar pol¨ªticas que, en lugar de ¡°promover que las mujeres puedan ejercer sus derechos sexuales y reproductivos, las instrumentaliza y las convierte en un medio para lograr un fin¡±, critica Nadal. Entre los casos m¨¢s extremos destacan pa¨ªses como Ir¨¢n, que ha implantado restricciones al aborto y ha prohibido que la sanidad p¨²blica ofrezca anticonceptivos gratuitos para impulsar la natalidad. O algunos Estados de India ¡ªun pa¨ªs que ha arrebatado a China el puesto del m¨¢s poblado del mundo¡ª, que promueven medidas para restringir los nacimientos, como pol¨ªticas de un m¨¢ximo de dos hijos por mujer.

La exposici¨®n a mensajes sobre la poblaci¨®n mundial parece estar ligada a una mayor preocupaci¨®n por el tama?o de la poblaci¨®n, la tasa de fertilidad y la inmigraci¨®n, seg¨²n el Fondo de Poblaci¨®n de Naciones Unidas

El pasado noviembre, la ONU anunci¨® que la humanidad hab¨ªa superado los 8.000 millones de personas, al mismo tiempo que dos tercios de la poblaci¨®n vive en lugares en los que el ¨ªndice de fecundidad ha ca¨ªdo por debajo del llamado ¡°nivel de reemplazo¡±, de 2,1 hijos por mujer. Esta cifra, que frecuentemente se enarbola como garant¨ªa de la estabilidad de la poblaci¨®n, se ha convertido en una l¨ªnea roja que lleva a gobiernos y medios de comunicaci¨®n a emplear t¨¦rminos catastrofistas como ¡°bomba demogr¨¢fica¡± ¡ªcuando se supera¡ª o ¡°descalabro demogr¨¢fico¡± ¡ªcuando no se alcanza¡ª, denuncia el UNFPA.

La ret¨®rica demogr¨¢fica de hecatombe poblacional, seg¨²n el organismo, afecta negativamente a la opini¨®n p¨²blica mundial. Una encuesta encargada por el UNFPA y realizada por YouGov a 7.797 personas de ocho pa¨ªses (Brasil, Egipto, Francia, Hungr¨ªa, India, Jap¨®n, Nigeria y Estados Unidos) desvela que se percibe como ¡°demasiado alto¡± el n¨²mero de personas que habita el planeta. ¡°La exposici¨®n a mensajes sobre la poblaci¨®n mundial parece estar ligada a una mayor preocupaci¨®n por el tama?o de la poblaci¨®n, la tasa de fertilidad y la inmigraci¨®n¡±, analiza el informe. Esta percepci¨®n es preocupante en un contexto en el que, seg¨²n el organismo de la ONU, seis de cada siete personas dicen ¡°sentirse inseguras¡± en un mundo amenazado por la crisis clim¨¢tica y en el que las tensiones se han multiplicado desde la pandemia de covid-19, con la invasi¨®n rusa de Ucrania, niveles hist¨®ricos de desplazamientos masivos, econom¨ªas debilitadas y escasez de alimentos y energ¨ªa.

S¨ª es cierto, reconocen los expertos de la ONU, que el tama?o de la poblaci¨®n entra?a complejos retos en su relaci¨®n con el reparto de la riqueza, el consumo de recursos naturales y combustibles o la existencia de suficientes infraestructuras, servicios de salud o programas de pensiones para asistir a la poblaci¨®n. Sin embargo, estos problemas de ¨ªndole econ¨®mica o clim¨¢tica no deber¨ªan ser abordados desde un punto de vista demogr¨¢fico, seg¨²n sostienen los autores del informe.

Los retos de ¨ªndole econ¨®mica o clim¨¢tica no deber¨ªan ser abordados desde un punto de vista demogr¨¢fico, sostienen los autores del informe

Por ejemplo, seg¨²n detecta el informe, en algunos pa¨ªses donde los gobiernos implantan pol¨ªticas para aumentar el ¨ªndice de fertilidad, ¡°se puede llegar a limitar el aborto, una medida que suele ir acompa?ada de otras como la negaci¨®n de la educaci¨®n sexual en los colegios o las dificultades para acceder a m¨¦todos anticonceptivos¡±, explica Nadal. ¡°Es una tendencia a nivel global¡±, a?ade el dem¨®grafo, que recuerda que las pol¨ªticas en sentido contrario, de limitaci¨®n de la natalidad, tambi¨¦n han supuesto hist¨®ricamente una violaci¨®n de los derechos, como las esterilizaciones forzadas de mujeres ind¨ªgenas de Am¨¦rica o de poblaciones gitanas de Europa.

¡°Las mujeres no son f¨¢bricas de beb¨¦s¡±, clama Natalia Kanem, directora ejecutiva del UNFPA. ¡°La pregunta correcta no es si la poblaci¨®n es demasiado alta o baja, sino si todas las personas viven en libertad y se respetan sus derechos reproductivos¡±, asegur¨® el pasado jueves durante la presentaci¨®n del informe a la prensa, unos d¨ªas antes de su publicaci¨®n. Su conclusi¨®n es que, cuando se trata a la poblaci¨®n como n¨²meros y no como personas, los derechos humanos caen en el olvido.

Los datos lo corroboran. La ¨²ltima encuesta del UNFPA sobre el estado de la poblaci¨®n mundial realizada en 68 pa¨ªses desvela que el 44% de las mujeres en pareja no puede tomar decisiones sobre el cuidado de su salud, sus relaciones sexuales o los m¨¦todos anticonceptivos. El resultado de esta situaci¨®n es que ¡°casi la mitad de todos los embarazos no son deseados¡±, una supresi¨®n del derecho humano b¨¢sico de las mujeres a decidir libre y responsablemente si desean tener hijos y, en el caso de que as¨ª sea, cu¨¢ntos ser¨¢n y cu¨¢ndo los tendr¨¢n.

El problema no es el de hace d¨¦cadas, seg¨²n incide Nadal, de no disponibilidad de m¨¦todos anticonceptivos o del coste de los mismos, sino otros: la falta de acceso a la informaci¨®n ¡ªcomo preguntas sobre los efectos secundarios¡ª o la distancia a las que muchas mujeres viven de los centros de salud, especialmente en los pa¨ªses con menos recursos. ¡°Muchas mujeres se ven obligadas a usar m¨¦todos anticonceptivos inyectables para no tener que negociar su utilizaci¨®n¡±, critica por su parte Kanen, que sit¨²a la contracepci¨®n como una herramienta fundamental para empoderar a las mujeres.

Crisis clim¨¢tica

La ret¨®rica de una poblaci¨®n ¡°demasiado alta¡± es una forma simplista, seg¨²n el informe del UNFPA, de justificar ¡°una infraestructura sobrecargada, la crisis clim¨¢tica, la p¨¦rdida de biodiversidad, la inestabilidad econ¨®mica, el hambre y las amenazas a la seguridad¡±. ¡°El 10% de la poblaci¨®n es responsable del 50% de las causas de los gases de efecto invernadero¡±, subraya Jaume Nadal, lo que pone de manifiesto ¡°que aquellos pa¨ªses con tasas de fecundidad bajas y que las quieren aumentar son los que producen la mayor parte del CO2¡å. Es decir, reducir las tasas de fecundidad no resolver¨¢ la crisis clim¨¢tica porque los pa¨ªses que registran m¨¢s nacimientos son los que menos han contribuido al cambio clim¨¢tico, pese a ser quienes m¨¢s sufren sus consecuencias, refuerza Kanen. Las soluciones pasan, seg¨²n el UNFPA, por otras intervenciones como ¡°pautas de consumo sostenibles o inversi¨®n en energ¨ªas renovables¡±.

Pero adem¨¢s, una reducci¨®n de la poblaci¨®n no tendr¨ªa efectos a corto ni medio plazo. ¡°Dos tercios del crecimiento demogr¨¢fico que se producir¨¢ hasta 2050 se explican por el llamado ¡®momento demogr¨¢fico¡¯, una inercia provocada por la juventud actual de la poblaci¨®n mundial y por el crecimiento en la esperanza de vida¡±, concreta Nadal.

Tampoco aumentar la natalidad en los pa¨ªses con poblaciones envejecidas tendr¨ªa efectos inmediatos, sostiene el informe del UNFPA: no resolver¨ªa el pago actual de las pensiones y podr¨ªa generar efectos no deseados como mayores gastos en educaci¨®n o sistemas de salud. En este caso, las medidas que, seg¨²n los expertos, fortalecer¨ªan de manera m¨¢s eficaz los sistemas de protecci¨®n social son las pol¨ªticas de igualdad encaminadas a favorecer una mayor incorporaci¨®n de la mujer al mercado laboral, en las mismas condiciones que los hombres, con una estructura de apoyo que le permita reconciliar el rol productivo con el reproductivo. Y que, al mismo tiempo, los hombres contin¨²en incorpor¨¢ndose a las tareas dom¨¦sticas.

Por otro lado, ¡°la inmigraci¨®n tiene que ser parte de la discusi¨®n, ya que los inmigrantes elevan las ratios de fertilidad¡±, sostiene Kanem. La experta del UNFPA rechaza as¨ª la teor¨ªa del ¡°gran reemplazo¡±, que acu?¨® Renaud Camus hace poco m¨¢s de una d¨¦cada y que ahora defiende la ultraderecha blanca, seg¨²n la cual las mayores tasas de natalidad de la poblaci¨®n inmigrante terminar¨¢n por sustituir a la poblaci¨®n originaria ¡ªy blanca¡ª de los pa¨ªses de acogida.

Y ante la manipulaci¨®n de las cifras demogr¨¢ficas, que, seg¨²n el investigador del UNFPA Michael Hermann, acaba siempre en una ¡°merma de los derechos humanos¡±, solo hay un ant¨ªdoto posible: reforzar la ¡°resiliencia demogr¨¢fica¡±, es decir, la habilidad para adaptarse y anticipar los retos de una poblaci¨®n que ha fluctuado a lo largo de toda la historia. Porque, seg¨²n concluye la agencia de la ONU, ¡°el cambio en la poblaci¨®n es algo que se debe planificar, no temer¡±.

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