De alcohol y embutidos en el pasado al reinado de las legumbres: ?qu¨¦ se recomienda comer en Espa?a hoy?

Una gu¨ªa alimentaria es una herramienta dise?ada para ayudarnos a tomar decisiones saludables sobre los alimentos que consumimos. Generalmente, las crean expertos en nutrici¨®n y se basan en investigaciones cient¨ªficas. Adem¨¢s, debe adaptarse a la dieta habitual de la poblaci¨®n a la que se dirige, usando los alimentos habituales de la zona y tambi¨¦n a la cultura gastron¨®mica. Eso s¨ª, todas tienen un objetivo com¨²n: promover una alimentaci¨®n saludable.
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Una gu¨ªa alimentaria es una herramienta dise?ada para ayudarnos a tomar decisiones saludables sobre los alimentos que consumimos. Generalmente, las crean expertos en nutrici¨®n y se basan en investigaciones cient¨ªficas. Adem¨¢s, debe adaptarse a la dieta habitual de la poblaci¨®n a la que se dirige, usando los alimentos habituales de la zona y tambi¨¦n a la cultura gastron¨®mica. Eso s¨ª, todas tienen un objetivo com¨²n: promover una alimentaci¨®n saludable.

Estas gu¨ªas son un elemento gr¨¢fico sencillo que pueda ser comprensible para la mayor¨ªa de poblaci¨®n, incluidos los ni?os. Son muy habituales las que tienen forma de pir¨¢mide o de plato, aunque tambi¨¦n tenemos ruedas o incluso algunas con forma de olla, como las de Guatemala y Paraguay, o de pagoda, como la china.

Es Espa?a, hasta hace poco siempre hemos sido m¨¢s del equipo pir¨¢mide. Concretamente hasta el verano pasado, cuando se actualizaron las recomendaciones de alimentaci¨®n saludable a la poblaci¨®n espa?ola, con el Informe del Comit¨¦ Cient¨ªfico de la Agencia Espa?ola de Seguridad Alimentaria y Nutrici¨®n (AESAN). En diciembre se public¨® la versi¨®n resumida e ilustrada del mismo.

Y esta actualizaci¨®n ha supuesto un cambio muy destacable, ya que no solo hemos abandonado el modelo pir¨¢mide, sino que tambi¨¦n hemos dejado atr¨¢s otros lastres hist¨®ricos mucho peores. Para que hacernos una idea, veamos qu¨¦ cambios y novedades nos han tra¨ªdo las nuevas recomendaciones, para contrastarlas con la que era nuestra gu¨ªa alimentaria hasta ese momento.

Este trabajo, realizado bajo el marco del Ministerio de Consumo y la AESAN, tiene muchas cosas destacables:

• Por primera vez, en una gu¨ªa alimentaria oficial, se tienen en cuenta criterios de sostenibilidad de manera efectiva. Tambi¨¦n se nombra en alguna ocasi¨®n, y de forma t¨ªmida, el ¡°bienestar animal¡±.
• De la lectura del informe y del resultado final de las recomendaciones, podemos decir que parece que se han basado en evidencia cient¨ªfica actualizada, sin tener en cuenta intereses de la industria alimentaria. Esto os puede parecer algo de Perogrullo, ?c¨®mo va a manipular la industria alimentaria una gu¨ªa de salud p¨²blica? Bueno, se entender¨¢ cuando veamos de d¨®nde venimos.
• Se ha tenido en cuenta la configuraci¨®n demogr¨¢fica de la poblaci¨®n a la que se dirige (un 20% de la poblaci¨®n son personas mayores) y tambi¨¦n a otras caracter¨ªsticas de la ciudadan¨ªa: por ejemplo, la existencia de una gran prevalencia de sobrepeso.
• Se han enmarcado las recomendaciones dentro del patr¨®n cultural de la dieta mediterr¨¢nea, por ser aquella que cuenta con m¨¢s respaldo respecto a sus beneficios y sostenibilidad en nuestro pa¨ªs. Aunque el informe reconoce que en parte del territorio el patr¨®n tradicional es m¨¢s bien el denominado ¡°dieta atl¨¢ntica¡±.
• El informe actualiza tambi¨¦n las recomendaciones de actividad f¨ªsica.

Las nuevas recomendaciones nos dan indicaciones sencillas, de frecuencia de consumo, y tambi¨¦n existe un ¡°plato saludable¡± al estilo del archiconocido Plato de Harvard.

En cuanto a frecuencia de consumo, nos proponen lo siguiente:

Consumo diario:

• Hortalizas: al menos 3 raciones al d¨ªa de 150-200 gramos.
• Frutas: al menos 2-3 raciones al d¨ªa de 120-200 gramos.
• Cereales: de 3 a 6 raciones al d¨ªa de 40-60 gramos de pan o 60-80 gramos de pasta o arroz, en funci¨®n de tu actividad f¨ªsica, mejor integrales.
• Legumbres: al menos 4 raciones a la semana de unos 170 gramos cocidas, hasta llegar a un consumo diario.
• Frutos secos: 3 raciones o m¨¢s a la semana, hasta llegar a raci¨®n diaria de 20-30 gramos.
• Aceite de oliva: en todas las comidas como ali?o y para la preparaci¨®n de alimentos.
• L¨¢cteos: m¨¢ximo de 3 raciones, sin consumo m¨ªnimo. Sin az¨²car a?adido y bajos en sal. Por su elevado impacto ambiental se aconseja reducir su consumo si ya se toman otros alimentos de origen animal.
• Agua: del grifo, siempre que tengas sed.

Consumo semanal:

• Pescados: al menos 3 raciones a la semana de 125-150 gramos, priorizando el pescado azul.
• Huevos: m¨¢ximo 4 huevos a la semana, sin consumo m¨ªnimo.
• Carne: de 0 a 3 raciones a la semana de 100-125 gramos, priorizando la carne blanca, con el consejo de reducir el consumo ¡°por tu salud y la del planeta¡± y aumentar el de legumbres.

Algo que llama la atenci¨®n a simple vista es que el ¨²nico alimento de origen animal del que no se considera un consumo cero es el pescado. La gu¨ªa contempla como saludable un consumo cero de carne, huevos y l¨¢cteos, eso es muy llamativo y reafirma la idea que la industria alimentaria no ha metido baza, porque al menos el c¨¢rnico y el l¨¢cteo son unos lobbies poderosos que no hubieran consentido tal cosa. Y sin duda, si hay un alimento que ha salido coronado de estas nuevas recomendaciones son las legumbres, cuyo consumo se anima a que sea diario y se incide en sus propiedades tanto nutricionales como a nivel de sostenibilidad.

Es decir, las nuevas recomendaciones proponen un modelo muy flexible, con una clara preferencia por la prote¨ªna vegetal sobre la animal, sin alcohol ni alimentos insanos, y llamando a que se organice la dieta teniendo en cuenta criterios de sostenibilidad. Poco m¨¢s se puede pedir: en todo caso, que se valore que no matar peces tambi¨¦n podr¨ªa ser una opci¨®n v¨¢lida atendiendo a criterios de bienestar animal, que tienen a¨²n un peso muy bajo en esta gu¨ªa.

Puede que estas recomendaciones parezcan de sentido com¨²n, incluso b¨¢sicas. Pero si echamos un vistazo a de donde ven¨ªamos, creo que podremos apreciar que el cambio ha sido enorme:

?De d¨®nde venimos?

Quiz¨¢ os est¨¦is preguntando a qu¨¦ recomendaciones sustituyen las actuales: pues bien, la anterior propuesta era de 2016 y la firmaba la SENC (Sociedad Espa?ola de Nutrici¨®n Comunitaria) en su informe t¨¦cnico ¡°Gu¨ªas alimentarias para la poblaci¨®n espa?ola (SENC, diciembre 2016); la nueva pir¨¢mide de la alimentaci¨®n saludable¡±. La SENC, para situarnos, tiene como ¡°empresas colaboradoras¡± a una extensa lista que se puede consultar en su web y que incluye a Campofr¨ªo, a Provacuno, a Danone, a Cu¨¦tara, a CocaCola, a Cerveza y Salud, a la Fundaci¨®n para la Investigaci¨®n del Vino y la Nutrici¨®n, a Inlac, a Interporc, a Puleva, a Kellogs¡¯s, a Pepsico, a Unilever o a Nestl¨¦, entre otras.

Quiz¨¢ eso explica por qu¨¦ en esa pir¨¢mide, que era la Gu¨ªa Alimentaria vigente en nuestro pa¨ªs hasta hace meses, encontr¨¢ramos representadas cosas tan chocantes como: vino y cerveza (s¨ª, dos bebidas alcoh¨®licas), cuatro tipos de embutido (cuatro, s¨ª), pero solo un tipo de legumbre. Tambi¨¦n snacks, boller¨ªa, pasteles, sobre de az¨²car y caramelos (un total de 7 dulces y snacks, contadlos vosotros mismos). Eso s¨ª, como ¡°consumo opcional¡±, pero ocupando m¨¢s de un tercio de la imagen.

Esta pir¨¢mide, ten¨ªa una hermanita peque?a llamada ¡°pir¨¢mide de la hidrataci¨®n¡± en la que aparec¨ªan latas de refrescos varias veces, tanto en su versi¨®n edulcorada como azucarada, zumos, botellas de agua inspiradas en la conocida botella azul de Solan de Cabras, pero por ejemplo, ninguna bebida vegetal, que por lo visto no ten¨ªan cabida. El refresco de cola s¨ª, la leche de soja, no.

Dejo en manos de los lectores si consideran que hubo relaci¨®n alguna entre las poderosas empresas que colaboran con la SENC y los alimentos representados en una Gu¨ªa Alimentaria para el pa¨ªs, o si esas industrias tuvieron m¨¢s peso en las recomendaciones que los nutricionistas. Lo que s¨ª puedo asegurar es que la evidencia cient¨ªfica no ha cambiado tanto de 2016 a 2023. As¨ª que en una de las dos gu¨ªas, no se revis¨® bien.

Si queremos ver un ejemplo de pir¨¢mide bien hecha para poder comparar, de la misma ¨¦poca que la de la SENC, las nutricionistas solemos usar la australiana de 2015 (abajo). Os reto a mirarla detenidamente y encontrar en ella alimentos no saludables. Buscad el alcohol, las carnes procesadas, los dulces o los snacks. No est¨¢n. Mirad ahora la organizaci¨®n: ?qu¨¦ hay en la base? No son cereales. Mirad las opciones incluidas en el grupo proteico: m¨¢s presencia de legumbres (que aparecen en la base) y derivados que de carne. O el grupo l¨¢cteo tan distinto al de la SENC. Y fijaos qu¨¦ hay en la punta, no son piruletas. Es una pir¨¢mide para una poblaci¨®n que est¨¢ literalmente al otro lado del mundo, pero que nos sirve perfectamente. Y ya por ¨²ltimo, fijaos en quien la firma (no es por ser corporativista, pero...). En el mismo a?o 2016, las nutricionistas australianas manejaban una evidencia cient¨ªfica muy distinta a la que se manejaba por aqu¨ª.

Venimos de un pasado muy turbio en lo que a recomendaciones de alimentaci¨®n oficiales se refiere. Para que os hag¨¢is una idea, hemos pasado de tener una web llamada lacteosinsustituibles.es, firmada por el entonces Ministerio de Agricultura, Alimentaci¨®n y Medioambiente junto a la FENIL (Federaci¨®n Nacional de Industrias L¨¢cteas) a unas recomendaciones en las que las raciones de l¨¢cteos semanales empiezan en cero. Tampoco hace falta que recalque que quiz¨¢ las recomendaciones gubernamentales de ingesta de l¨¢cteos no son muy imparciales si van de la mano de la industria.

De ah¨ª venimos, de esa pir¨¢mide azucarada y de esas recomendaciones guiadas por intereses econ¨®micos. Por eso, como os dec¨ªa, tenemos tanto que celebrar con las nuevas recomendaciones basadas en evidencia cient¨ªfica y en criterios de sostenibilidad, aunque no nos parezcan perfectas, desde luego nos han sacado de un lugar bastante oscuro.

NUTRIR CON CIENCIA es una secci¨®n sobre alimentaci¨®n basada en evidencias cient¨ªficas y en el conocimiento contrastado por especialistas. Comer es mucho m¨¢s que un placer y una necesidad: la dieta y los h¨¢bitos alimenticios son ahora mismo el factor de salud p¨²blica que m¨¢s puede ayudarnos a prevenir numerosas enfermedades, desde muchos tipos de c¨¢ncer hasta la diabetes. Un equipo de dietistas-nutricionistas nos ayudar¨¢ a conocer mejor la importancia de la alimentaci¨®n y a derribar, gracias a la ciencia, los mitos que nos llevan a comer mal.

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