Cuando tu barrio es zona de riesgo para una aplicaci¨®n de transporte
En la ciudad brasile?a de S?o Paulo, las 'apps' Uber y 99 tienen sus propios indicadores de qu¨¦ regiones suponen un peligro para su servicio
¡°?Vives en un ¨¢rea de riesgo? ?Es peligroso recogerte?¡±. As¨ª fue como un conductor de la aplicaci¨®n de transporte 99 me dijo, en septiembre de 2019, que Vila Marari, el barrio donde vivo en S?o Paulo, es una zona de riesgo seg¨²n el indicador interno de la empresa. No fue una sorpresa. Antes de Uber y 99, muchos taxistas se negaban a hacer el trayecto de cinco kil¨®metros entre la ¨²ltima estaci¨®n de metro y Vila Marari. Aunque el robo frecuente de autom¨®viles y el asesinato de un conductor hace muchos a?os ayudaron a cristalizar la percepci¨®n de inseguridad en la zona, eso no disminuye los inconvenientes para los vecinos. Algunos conductores de aplicaciones ya me han hecho salir del coche en plena madrugada, en el centro de la ciudad, al saber cu¨¢l era mi destino.
Vila Marari forma parte de uno de los muchos barrios dormitorio nacidos en la periferia por la industrializaci¨®n de los a?os sesenta. Un 40% de las familias vive con una renta de entre dos y cinco salarios m¨ªnimos (de 489 a 1.224 d¨®lares al mes) en un ¨¢rea donde coexisten edificios de clase media y casas nuevas. En el distrito donde su ubica hubo 275 robos y 132 hurtos en coches de enero a noviembre, seg¨²n la polic¨ªa. No hubo ning¨²n homicidio. En Perdizes, un distrito de clase media alta, hubo 79 robos y 705 hurtos de veh¨ªculos, adem¨¢s de cuatro homicidios en el mismo periodo.
La aplicaci¨®n 99 no bloquea las regiones consideradas peligrosas, pero Uber lo hace con barrios enteros. Para resolver la falta de servicio en Heli¨®polis, una gran favela de S?o Paulo, Uber acord¨® con la asociaci¨®n de vecinos el a?o pasado la creaci¨®n de seis puntos virtuales y un punto fijo de recogida.
Con el argumento de que sus ¡°zonas de riesgo son din¨¢micas¡±, 99 no respondi¨® a la petici¨®n del listado de barrios de S?o Paulo se?alados. Sin embargo, las consultas realizadas por este diario entre los conductores consideran pr¨¢cticamente toda la periferia de S?o Paulo como ¨¢rea peligrosa. De noche algunas ¨¢reas del centro se consideran peligrosas, informan esos ch¨®feres.
La justificaci¨®n de 99 es que la plataforma se dise?¨® para equilibrar la seguridad que exig¨ªan los conductores sin tener que excluir los lugares violentos. ¡°El ¨¦xito de esta ecuaci¨®n se ve en las tasas de cancelaci¨®n de la aplicaci¨®n: tanto en el centro econ¨®mico como en las periferias de las ciudades, el ¨ªndice de cancelaciones por parte de los conductores no ha cambiado, y lo seguimos muy de cerca¡±, inform¨® 99 en un comunicado.
Pero la percepci¨®n de los pasajeros es diferente. Los conductores aceptan llevarlos a un ¨¢rea de riesgo cuando parten de un barrio c¨¦ntrico. Pero generalmente no recogen viajeros en esas zonas, lo que significa que el precio aumenta a medida que aumenta la demanda, como cuenta la publicista Angel Pinheiro, que vive en Diadema, una ciudad de la periferia, y trabaja en un barrio rico. Detalla que en octubre pidi¨® un viaje a las once de la noche, pero el conductor de Uber rechaz¨® el servicio. ¡°Es que, t¨ªa, tu direcci¨®n aparece como Diadema. No nos gusta ir all¨ª. Y menos a estas horas¡±, justific¨® el conductor, seg¨²n Pinheiro que intent¨®, sin ¨¦xito, argumentar que el barrio era tranquilo.
Pinheiro inform¨® a Uber, que calific¨® la situaci¨®n como ¡°inaceptable¡±. ¡°Reafirmamos que Uber no aprueba este tipo de experiencia, al contrario, buscamos constantemente tomar todas las medidas posibles para que no suceda¡±, le respondi¨® la compa?¨ªa por medio de un mensaje.
La relaci¨®n estereotipada entre la violencia y la periferia
Marcelo Batista Nery, investigador del N¨²cleo de Estudios de la Violencia de la Universidad de S?o Paulo, sostiene que ¡°algunas herramientas pueden generar impactos sociales complicados¡±. ¡°(El navegador) Waze y Correos tambi¨¦n trabajan con herramientas similares, que definen ¨¢reas de riesgo¡±, dice. Seg¨²n ¨¦l, el problema de clasificar un lugar como violento ¡ª¡°adem¨¢s de los inconvenientes de no poder solicitar el transporte que se desea, o de que la correspondencia no llegue¡±¡ª radica en estigmatizar al vecindario.
En 2012, una aplicaci¨®n de Microsoft dise?ada para ayudar a los peatones a evitar ¡°barrios inseguros¡± se vio envuelta en una pol¨¦mica porque, al basarse en percepciones del p¨²blico, se consider¨® que reforzaba los estereotipos respecto de los barrios pobres de mayor¨ªa negra. ¡°Hay lugares con ciertas caracter¨ªsticas que tienden a asociarse con m¨¢s violencia, pero esto no tiene relaci¨®n entre estar en el centro o la periferia. Es un problema que no se confirma en los estudios urbanos hist¨®ricos. No se puede crear una relaci¨®n de causa y efecto entre la violencia y el centro y la periferia, o las personas pobres y ricas¡±, dice Nery.
La compa?¨ªa 99, que mapea las zonas peligrosas desde 2017, basa su clasificaci¨®n en un cruce de problemas reportados por conductores y clientes y datos de la Secretar¨ªa de Seguridad P¨²blica. ¡°Creemos que es importante darles a los conductores la libertad de tomar la mejor decisi¨®n en funci¨®n de su propio contexto y experiencia. Por ejemplo, hay conductores que viven en estas regiones y prefieren trabajar ah¨ª¡±, informa la empresa.
Uber afirma que la aplicaci¨®n puede impedir solicitudes de viaje desde ¨¢reas con lo que denomina ¡°desaf¨ªos de seguridad p¨²blica en determinados d¨ªas y horarios¡±. Explica que identifica riesgos en tiempo real a partir del an¨¢lisis de datos de millones de trayectos realizados diariamente. ¡°La herramienta, que utiliza algoritmos que aprenden autom¨¢ticamente de los datos, bloquea los trayectos potencialmente m¨¢s arriesgados, a menos que el usuario proporcione detalles adicionales¡±, informa en un comunicado. La aplicaci¨®n tambi¨¦n permite que los conductores cancelen los trayectos por razones de seguridad.
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