El reconocimiento de beb¨¦s fuera del matrimonio se abre paso en una China inmersa en una grave crisis demogr¨¢fica

La grave crisis demogr¨¢fica que atraviesa China ha colocado a las autoridades en una encrucijada: o tomar decisiones que puedan revertir el curso de los acontecimientos o aferrarse a un modus operandi que en el contexto actual est¨¢ menos justificado que nunca. Aunque el Gobierno central lleva varios a?os anunciando pol¨ªticas preferenciales para animar a la poblaci¨®n a tener m¨¢s hijos, parad¨®jicamente, no todas las mujeres que dan a luz cumplen con los par¨¢metros establecidos formalmente. Hasta la fecha, de entre las 31 provincias y regiones del pa¨ªs, solamente dos tienen estipulado de manera inequ¨ªvoca que todas las madres, independientemente de su estado civil, pueden registrar a sus hijos. Sichuan, hogar de casi 84 millones de habitantes, se sum¨® a esa lista esta semana, acabando con la implementaci¨®n de una normativa que no reconoc¨ªa en su totalidad a los ojos de la ley a aquellos reci¨¦n nacidos fuera de un n¨²cleo familiar donde un hombre y una mujer hayan contra¨ªdo matrimonio.

Sichuan, ubicada en el suroeste de China, permite desde este mi¨¦rcoles a todos sus residentes registrar cuantos hijos tengan, y simplificar¨¢ los tr¨¢mites burocr¨¢ticos para hacerlo. La nueva norma, que estar¨¢ en vigor durante cinco a?os, otorga un car¨¢cter m¨¢s inclusivo a la existente desde 2019, bajo la cual solamente las parejas casadas pod¨ªan registrar hasta dos reto?os. El objetivo, seg¨²n lee el comunicado de la Comisi¨®n de Salud sichuanesa, es ¡°promover un desarrollo demogr¨¢fico equilibrado y a largo plazo¡±. Sichuan es la quinta provincia m¨¢s poblada del gigante asi¨¢tico y la s¨¦ptima m¨¢s envejecida. Seg¨²n los datos m¨¢s recientes, el 21% de sus habitantes son mayores de 60 a?os.

La legislaci¨®n china no proh¨ªbe expl¨ªcitamente las familias monoparentales, sin embargo, las pol¨ªticas estatales establecen que la planificaci¨®n familiar es un deber ¡°de maridos y esposas juntos¡± (el matrimonio homosexual no est¨¢ aprobado). Bajo ese paraguas, los gobiernos locales redactan sus propios textos, los cuales, a menudo, reflejan estigmas sociales. Las normas hacia los hijos ¡°no planificados¡± (entre los que se incluyen los de padres no casados o los nacidos m¨¢s all¨¢ del l¨ªmite por pareja permitido) suelen ser severas y, con frecuencia, los progenitores de esos beb¨¦s enfrentan multas y discriminaciones. Han trascendido muchos casos de mujeres solteras embarazadas a las que se les ha negado el acceso a la sanidad p¨²blica y a un seguro m¨¦dico que cubra la baja de maternidad, y suelen no contar con respaldo legal si su empleador las despide por estar encintas. La revista digital china Sixth Tone cita una encuesta realizada en 2017 a 250.000 mujeres de entre 15 y 60 a?os en la que el 20% de las participantes asegur¨® haberse quedado embarazada sin estar casada en, al menos, una ocasi¨®n.

La flexibilizaci¨®n aprobada en Sichuan es especialmente significativa porque, en China, el registro de nacimiento suele ser necesario para solicitar acceso a servicios p¨²blicos y para obtener el registro de residencia, conocido como hukou, que concede a los ni?os derecho a prestaciones sociales, como sanidad y educaci¨®n. Las provincias de Cant¨®n (sur) y Shaanxi (noroeste) eliminaron el prerrequisito de estar casado en 2022. Anhui (centro) tambi¨¦n se est¨¢ planteando adoptar una pol¨ªtica similar, seg¨²n la prensa local.

Las reacciones a la noticia en redes han sido de lo m¨¢s variopintas, desde los que consideran que se trata de un parche que no aborda la preocupaci¨®n real sobre los costes de la vida, a los que especulan sobre el impacto que tendr¨¢ en las relaciones extramatrimoniales y si promover¨¢ la subrogaci¨®n ilegal. En medio del acalorado debate, un funcionario sanitario de Sichuan declar¨® que las nuevas provisiones ¡°no pretenden fomentar los partos antes del matrimonio, sino garantizar que las personas solteras puedan disfrutar de los servicios disponibles de atenci¨®n materno infantil¡±.

¡°Persisten muchos tab¨²es y prejuicios sobre las madres solteras. No veo que haya un cambio en la mentalidad de la sociedad y, por tanto, tampoco creo que se vayan a producir avances dr¨¢sticos en el discurso oficial¡±, comentaba el mes pasado en una entrevista para este peri¨®dico la dem¨®grafa Peng Xiujiang, investigadora s¨¦nior en el Centro de Estudios Pol¨ªticos de la Universidad de Victoria (Australia).

La nueva disposici¨®n en Sichuan se implanta apenas un mes despu¨¦s de que China anunciase un desplome hist¨®rico en la tasa de natalidad y su primera contracci¨®n poblacional en las ¨²ltimas seis d¨¦cadas, un giro que, seg¨²n los expertos, podr¨ªa marcar el inicio de un periodo de declive para la segunda potencia econ¨®mica mundial. De hecho, las estimaciones m¨¢s recientes predicen que el gigante asi¨¢tico ceder¨¢ este a?o el primer puesto como la naci¨®n m¨¢s poblada del planeta a India.

Tina Jiang (nombre ficticio), de 30 a?os, cuenta por tel¨¦fono que cree que el paso dado en Sichuan es un arma de doble filo: por un lado, ¡°es bueno que las mujeres no tengan que estar ligadas a un matrimonio para tener hijos¡±, pero, por otro, ¡°nos a?ade presi¨®n¡±; teme que se pueda instrumentalizar para ¡°tratarnos como m¨¢quinas de hacer beb¨¦s¡±. Cada vez son m¨¢s las j¨®venes que rechazan el matrimonio y la maternidad, por diversos motivos. En el caso de Jiang, que estudi¨® en el extranjero, porque prioriza su carrera y ¡°felicidad personal¡±. Tambi¨¦n menciona los elevad¨ªsimos costes de la vida y la reducci¨®n de ingresos durante los tres a?os de lucha contra la covid-19. Las cifras oficiales reflejan esa tendencia: una encuesta de 2021 de la Comisi¨®n Nacional de Salud muestra que las mujeres en edad f¨¦rtil tienen ¡°poca voluntad¡± por tener hijos, y en 2022 la tasa de fecundidad del pa¨ªs (el n¨²mero promedio de hijos que nacer¨ªan por mujer) fue de 1,3, muy por debajo del 2,1 que hace falta para que la poblaci¨®n se mantenga estable.

El proceso demogr¨¢fico a la baja de China es fruto, en gran medida, de la pol¨ªtica del hijo ¨²nico que rigi¨® entre 1980 y 2015 para frenar el crecimiento excesivo de la poblaci¨®n. Durante d¨¦cadas, aquella estrategia estatal oblig¨® a muchas mujeres a adoptar decisiones dr¨¢sticas y traum¨¢ticas, como a abortar de manera forzosa o someterse a m¨¦todos de esterilizaci¨®n, debido a la presi¨®n social y a la imposibilidad de pagar las sanciones. La obsesi¨®n en aquellos a?os de priorizar el nacimiento de un var¨®n ha provocado, adem¨¢s, una enorme brecha de g¨¦nero entre la poblaci¨®n en edad reproductiva.

Pero, incluso ante las presiones demogr¨¢ficas, el Partido Comunista chino muestra reticencias a renunciar por completo al control sobre la planificaci¨®n familiar. El Gobierno promueve desde 2021 pol¨ªticas preferenciales de acceso a la vivienda, mayor flexibilidad laboral o ayudas fiscales y a la educaci¨®n con el objetivo de ¡°crear un entorno favorable al matrimonio y la fertilidad¡± y animar a las parejas casadas a tener hasta tres hijos. No obstante, ese mismo a?o la Comisi¨®n Nacional de Salud rechaz¨® una propuesta de abrir la congelaci¨®n de ¨®vulos a las mujeres solteras, alegando ¡°problemas ¨¦ticos y de salud¡±, pese a que los hombres no tienen ning¨²n tipo de restricci¨®n a la hora de someterse a procesos de fertilidad. Tambi¨¦n en 2021, el Consejo de Estado ¨Cel Ejecutivo¨C se marc¨® la meta de reducir el n¨²mero de interrupciones del embarazo que no se deban a una ¡°necesidad m¨¦dica¡±. Algunas voces cr¨ªticas, como la activista feminista L¨¹ Pin, denuncian que Pek¨ªn contin¨²a usando a las mujeres como ¡°una herramienta para alcanzar los objetivos nacionales¡± y ¡°devolverlas a los roles de g¨¦nero¡± dentro de un sistema que solo entiende por ¡°familia¡± a aquella formada por parejas heterosexuales.