Los beneficios para la salud mental de poder ver tres ¨¢rboles desde casa

As¨®mese a la ventana de casa: ?ve tres ¨¢rboles? ?En su barrio, hay un 30% de cobertura vegetal? ?Vive a menos de 300 metros de un parque? Las preguntas corresponden a la regla 3-30-300 propuesta por el silvicultor urbano Cecil Konijnendijk para crear ciudades m¨¢s saludables, porque el verde (sean ¨¢rboles, plantas o vegetaci¨®n en cubiertas) ayuda a mitigar las altas temperaturas, a prevenir inundaciones y mejora la salud de la poblaci¨®n. El Instituto de Salud Global (ISGlobal) acaba de publicar un estudio, realizado en Barcelona, que muestra que vivir cerca de ¨¢rboles y zonas verdes tiene correlaci¨®n con una mejor salud mental y un menor consumo de medicamentos. Esta misma entidad cient¨ªfica, impulsada por la Fundaci¨®n La Caixa, ha codirigido otro trabajo con el Servicio Forestal de Estados Unidos (USDA) que demuestra que plantar ¨¢rboles en la calle puede salvar vidas. En este caso, la ciudad estudiada es Portland.

Los investigadores del ISGlobal explican que el estudio sobre la regla 3-30-300 en Barcelona es el primero que la mide en una urbe. La buena noticia es que constata la mejora que produce: sabemos el camino. La mala, que la ciudad saca una nota desastrosa: solo el 4,7% de la poblaci¨®n cumple con los tres preceptos de la regla de espacios verdes. Un 62,1% cuenta con un espacio verde ¡°importante¡± a menos de 300 metros, el 43% s¨ª tiene al menos tres ¨¢rboles a 15 metros de casa y solo el 8,7% vive en una zona con ¡°suficiente verdor circundante¡±. Y la peor cifra: casi el 23% de los vecinos no cumple con ninguna de las tres disposiciones. ¡°Hay una necesidad urgente de proporcionar m¨¢s espacios verdes a la ciudadan¨ªa. Quiz¨¢s tengamos que desenterrar asfalto y plantar m¨¢s ¨¢rboles, lo que no solo mejorar¨¢ la salud, sino que reducir¨¢ los efectos de isla de calor y contribuir¨¢ a la captura de CO?¡å, se?ala Mark Nieuwenhuijsen, autor principal del estudio.

El informe tom¨® datos de la Encuesta de Salud P¨²blica 2016 de la Agencia de Salud P¨²blica del Ayuntamiento de Barcelona, que evaluaba la salud mental de los vecinos de entre 15 y 97 a?os. De media, el 18% declaraba tener mala salud mental, el 8,3% que hab¨ªa visitado a un psic¨®logo en el ¨²ltimo a?o y entre el 8,1% y el 9,4% que hab¨ªa tomado tranquilizantes o antidepresivos en los ¨²ltimos dos d¨ªas. Lo que hicieron los investigadores fue cruzar los datos de la encuesta municipal (y zonas de residencia de los encuestados), con indicadores de espacios verdes, sensores y mapas de cubierta terrestre. La muestra es muy representativa, se?alan los investigadores. El trabajo revel¨® que el cumplimiento de la regla completa ¡°se asoci¨® claramente con una mejor salud mental, menos uso de medicaci¨®n y menos visitas al psic¨®logo¡±, que registr¨® una asociaci¨®n estad¨ªsticamente significativa en el caso de recurrir a profesionales, seg¨²n el ISGlobal. Y de las tres variables, la que m¨¢s pesa es la cobertura verde en el entorno.

La investigadora Evelise Pereira, tambi¨¦n participante en el trabajo, explica que Barcelona (que cuenta con 584 hect¨¢reas de parques urbanos, 242.000 ¨¢rboles sumando calles y parques, y 1.156 hect¨¢reas de verde urbano) puede parecer una ciudad con mucha cobertura verde, ¡°pero los parques de Collserola y Montju?c pesan mucho en el global, cuando poca gente los tiene cerca¡±. ¡°En Barcelona hay pocos parques y hay plazas muy duras, la cubierta vegetal no est¨¢ bien distribuida¡±, apunta. ¡°Es mucha la gente que no tiene suficientes ¨¢rboles, cobertura ni parques cerca¡±, admite Pereira, que apuesta por ¡°intervenir a distintas escalas, para beneficiar a distintas edades: ¨¢rboles para todos, plantas y zonas verdes para los ni?os¡­¡±.

¡°Vista la estructura urbana de Barcelona y su densidad de poblaci¨®n (16.000 habitantes por kil¨®metro cuadrado), hay poco espacio disponible para hacer parques y tener espacios abiertos. De ah¨ª que los espacios disponibles para cambiar sean las calles y las cubiertas de los edificios¡±, entiende Pereira, que destaca ¡°la importancia de iniciativas como la Superilla [supermanzana] o la conversi¨®n de calles del Eixample en ejes verdes¡± del equipo de la alcaldesa Ada Colau. ¡°No podemos sacar edificios, pero s¨ª asfalto¡±. La transformaci¨®n de las calles, a?ade, ¡°tambi¨¦n tiene beneficios para la comunidad, una movilidad m¨¢s saludable y la cohesi¨®n social¡±. La Superilla supone plantar 400 ¨¢rboles, ha anunciado el Ayuntamiento, y tambi¨¦n m¨¢s verde. Pasar del 1% al 12% del espacio. Pereira se?ala la importancia de que haya tanto ¨¢rboles como plantas a distintas escalas. Crear jardines, apunta, beneficia a los ni?os, que tienen una estatura menor.

En el estudio realizado sobre la ciudad de Portland (en Oreg¨®n, costa oeste de Estados Unidos), la particularidad es que los investigadores contaban con los datos, precisos, de la ONG Amigos de los ?rboles, que lleva tres d¨¦cadas plantando ejemplares en la ciudad. La conclusi¨®n es que el n¨²mero de ¨¢rboles se asocia a una reducci¨®n significativa de la mortalidad no accidental (por enfermedad, del 20%) y cardiovascular (6%), cuando los ¨¢rboles tienen 15 a?os o m¨¢s. Cuanto m¨¢s viejos y grandes son los ejemplares, mayor es su efecto beneficioso. ¡°Conservar los ¨¢rboles maduros puede ser especialmente significativo para la salud p¨²blica¡±, se?ala el instituto.

A diferencia de estudios que utilizan im¨¢genes de sat¨¦lite que no distinguen los diferentes tipos de vegetaci¨®n, en este caso la ONG tiene registrado cu¨¢ndo y donde plant¨® casi 50.000 ¨¢rboles entre 1990 y 2019. Los investigadores analizaron los ¨¢rboles en un ¨¢rea censal con 4.000 habitantes y asociaron la informaci¨®n con la mortalidad por causas cardiovasculares, respiratorias o no accidentales, con datos de la Autoridad Sanitaria de Oreg¨®n. Result¨® que en los barrios donde m¨¢s ¨¢rboles se hab¨ªan plantado, las tasas de mortalidad eran menores, y sobre todo en hombres y mayores de 65 a?os.

El estudio no aporta evidencia directa sobre los mecanismos por los que los ¨¢rboles mejoran la salud, pero el hecho de que los ejemplares m¨¢s mayores tengan m¨¢s efecto positivo ¡°es revelador¡±, porque tienen m¨¢s capacidad para absorber contaminaci¨®n, moderar el calor y reducir el ruido: tres factores relacionados con el aumento de la mortalidad. ¡°Sugiere que plantar ¨¢rboles en las calles beneficia a ambos¡±, afirma Geoffrey H. Donovan, del Servicio Forestal del USDA y primer investigador del trabajo.

Payam Dadvand, investigador del ISGlobal y autor principal del estudio, a?ade que ¡°los resultados proporcionan una s¨®lida base cient¨ªfica para guiar intervenciones tangibles, como plantar ¨¢rboles, destinadas a aumentar la longevidad de los residentes urbanos¡±. ¡°Podemos ir al Ayuntamiento y decirles que por cada n ¨¢rboles que plantes, puedes evitar m hospitalizaciones o mortalidad¡±, apunta. Dadvand es m¨¢s cr¨ªtico con las superilles materializadas hasta la fecha, por la escasez de nuevo verde. Se?ala que se plantan pocos nuevos ¨¢rboles y ¡°a menudo incluso no los plantan correctamente y los colocan en enormes cajas de plantas¡±.

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