Morata, frente a la maldici¨®n de Diego Costa

Tras tres intensas semanas de negociaciones para encauzar una operaci¨®n muy compleja por la multitud de actores implicados en ella, ?lvaro Morata (Madrid, 26 a?os) aterriz¨® el s¨¢bado por la noche en Madrid y el domingo pas¨® reconocimiento m¨¦dico. El delantero regresa como cedido hasta el verano de 2020 a la que fue su primera casa, el Atl¨¦tico de Madrid. Getafe, Real Madrid, en dos etapas, Juventus y Chelsea han sido sus destinos desde que abandonara la cantera rojiblanca con 15 a?os. ¡°Yo empec¨¦ jugando en el Atleti y la gente que sabe de d¨®nde vengo sabe mi historia y lo que significa para m¨ª esto. El pasado es el pasado y no se puede cambiar y estoy muy orgulloso de ello¡±, explic¨® Morata ante el remolino de reporteros que el s¨¢bado le aguardaban en el aeropuerto de Barajas.

Que Higua¨ªn terminara en el Chelsea; Piatek en el Mil¨¢n; que Gelson Martins saliera cedido del club rojiblanco al M¨®naco, as¨ª como que probablemente el Wolverhampton se haga en propiedad con los derechos del Jonny, eran los requisitos necesarios para que se cerrara esta transacci¨®n multibanda a la que a¨²n le restan algunos flecos. El principal es que el Chelsea pueda recuperar a Morata al final de este curso, siempre y cuando no sea para vender al jugador. Si se diera este caso, a su vez el Atl¨¦tico podr¨ªa ejecutar una opci¨®n de compra, pero a un elevado precio. Estos t¨¦rminos se est¨¢n afinando entre las partes, as¨ª como los m¨¢rgenes de d¨ªas que habr¨ªa en las ventanas de fichajes para que un club u otro ejerzan sus opciones.

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Como Diego Costa, Morata responde al perfil que m¨¢s se ajusta al ideal de delantero que Simeone tiene en su cabeza para consolidar su querencia por un Atl¨¦tico vertical y de contragolpe. Un delantero de zancada potente y con capacidad para aguantar el bal¨®n y estirar al equipo cuando se repliegue en campo propio. Morata, adem¨¢s, supera a Costa en el juego a¨¦reo.

El historial de lesiones del delantero hispanobrasile?o, su rendimiento por debajo de lo esperado, y su enfrentamiento con el club por el aumento de sueldo que reclama, dispar¨® el inter¨¦s rojiblanco por traerle en esta ventana de fichajes, Simeone ya intent¨® su contrataci¨®n hace dos temporadas. Un par de meses antes, durante el cruce de cuartos de final de la Liga de Campeones contra el Madrid, Simeone ya le susurr¨® a su flamante fichaje cuando este calentaba en la banda: ¡°Vente conmigo el a?o que viene¡±.

El Cholo pretende ahora dotar al equipo de un jugador que haga sentir a Costa que tiene competencia. La edad de este, 30 a?os, tambi¨¦n provoca que desde los despachos del club se vea a Morata como una apuesta de futuro si finalmente pudieran ejercer la opci¨®n de compra. Sevilla y Barcelona tambi¨¦n mostraron inter¨¦s en contratarle. Seg¨²n el entorno del jugador, este descart¨® el Barcelona al conocer que el Atl¨¦tico tambi¨¦n entraba en la puja por contratarle. Regresar a Madrid, enfundarse una camiseta por la que siempre sinti¨® simpat¨ªa pese a declararse madridista, y la creencia de que tiene m¨¢s posibilidades de jugar en el equipo de Simeone que en el de Valverde fueron los principales resortes que han empujado al futbolista a un regreso en el que el entrenador argentino lleva tiempo empe?ado.

¡°Tiene condiciones para jugar en el esquema de Simeone. En el juvenil jugaba como delantero de referencia, a veces ca¨ªa a banda, incluso como volante tambi¨¦n le utiliz¨¢bamos. Tiene sacrificio y puede darle goles al equipo, pero no solo los suyos, tambi¨¦n genera espacios para los dem¨¢s¡±, dice Armando de la Morena, que le entren¨® en las categor¨ªas inferiores rojiblancas. Morata abandon¨® la Academia rojiblanca al verse taponado por Borja Bast¨®n, que se perfilaba con sus goles como la gran joya de la cantera.

Morata viene a atajar los problemas que ha tenido Simeone para encajar a un nueve desde que el propio Diego Costa abandon¨® el club para fichar por el Chelsea en el verano de 2014. Mandzukic, Fernando Torres, Jackson Mart¨ªnez, Vietto, Gameiro, Kalinic y el propio Costa no han podido consolidarse como delanteros de referencia. Solo Torres, cuando tuvo continuidad, encaj¨® en un sistema de juego en el que en ataque priman la velocidad y la verticalidad y registr¨® cifras goleadoras por encima de la decena de goles.

Pinchazos

En estos a?os, el Atl¨¦tico ha dependido de la capacidad goleadora de Antoine Griezmann. Al frances le gusta jugar con un nueve de referencia que le permita jugar de sat¨¦lite por todo el frente de ataque. Ahora tendr¨¢ dos para elegir.

Para Morata, su fichaje por el Atl¨¦tico tambi¨¦n supone un desaf¨ªo. Ni en sus dos etapas en el Real Madrid, ni en la Juventus, ni en el Chelsea alcanz¨® la condici¨®n de titular indiscutible. Esto nunca fue un obst¨¢culo para ser una pieza de mercado apetecible y valorada: ya suma 151 millones en traspasos. La Juve apost¨® por ¨¦l pagando 28 millones de euros cuando era un jugador residual en el primer equipo del Madrid y Florentino P¨¦rez desembols¨® 30 para que regresara un a?o despu¨¦s. El Chelsea, por la insistencia de Antonio Conte, lo compr¨® en junio de 2017 por 80 millones de euros, en el que parec¨ªa ser el trayecto definitivo hacia un club en el que consolidarse. En Londres, tras un buen comienzo, los problemas de espalda que padeci¨® le cortaron su progresi¨®n. Durante meses, su d¨ªa a d¨ªa fue un calvario, del entrenamiento a la cama, con multitud de viajes a Alemania para ser infiltrado mediante inyecciones que le causaban fuertes dolores. Hubo momentos, en los que ni siquiera pod¨ªa conducir por las insoportables molestias. Esas dolencias le costaron la titularidad y tambi¨¦n su exclusi¨®n del Mundial de Rusia, en lo que ha sido una de sus mayores decepciones de su carrera. El Atl¨¦tico es su oportunidad para levantarla.