De Par¨ªs a Par¨ªs, el feliz renacimiento de Djokovic
Tras tocar fondo en 2016, despu¨¦s de lograr su primer Roland Garros, el serbio acecha el r¨¦cord de Nadal y Federer con un esprint que le ha aportado siete grandes desde entonces: ¡°No quiero parar aqu¨ª¡±
A diferencia de otras celebraciones, adornadas de rugidos, show y gestos liberatorios, Novak Djokovic festej¨® este ¨²ltimo ¨¦xito en Roland Garros desde la mesura. El n¨²mero uno, de 34 a?os, regal¨® su raqueta a un ni?o que hab¨ªa estado apoy¨¢ndole desde la grada durante la final contra Stefanos Tsitsipas ¨C¡±ha estado todo el partido en mi o¨ªdo, haciendo de entrenador: ?Mete la bola dentro!¡±¨C y despu¨¦s elev¨® el trofeo de campe¨®n sin artificios. A continuaci¨®n, se march¨® al vestuario para festejar su 19? grande en la intimidad ¨Ca uno de Rafael Nadal y Roger Federer¨C, junto a los miembros de su equipo, sus familiares y algunos allegados, y posteriormente se dirigi¨® a la sala de conferencias. All¨ª transmiti¨® un mensaje directo: su obra no solo no est¨¢ acabada, sino que le queda mucho trabajo por delante.
¡°No quiero parar aqu¨ª, quiero volver aqu¨ª al menos una o dos veces m¨¢s¡±, se refer¨ªa a Par¨ªs, punto de encuentro y desencuentro consigo mismo, entre aquel superdotado que en 2016 a?adi¨® la ¨²nica muesca que le faltaba a su rev¨®lver y que luego, despu¨¦s de conseguirlo, cay¨® al vac¨ªo hasta convertirse un deportista an¨ªmicamente derruido. ¡°Fue el mejor momento de mi carrera, pero me sent¨ªa como un globo deshinchado, sufr¨ª una crisis de motivaci¨®n¡±, explicaba hace poco m¨¢s de un mes en Roma, rebobinando hacia el oscuro periodo que sucedi¨® a ese 6 de junio, cuando derrib¨® al escoc¨¦s Andy Murray y, por fin, ingres¨® en el club de esos poqu¨ªsimos elegidos (solo son ocho) que han logrado conquistar los cuatro trofeos del Grand Slam.
¡°Hab¨ªa perdido tres finales, dos de ellas en partidos dur¨ªsimos contra Nadal y la otra frente a Wawrinka, en 2015, y cuando lo logr¨¦ me sent¨ªa exhausto. En t¨¦rminos emocionales, me cost¨® un a?o y medio recuperarme. Tambi¨¦n tuve lo del codo [estuvo m¨¢s de medio a?o sin competir, tras someterse a una operaci¨®n], y b¨¢sicamente volv¨ª a encarrilarme en 2018¡±, relataba el de Belgrado, que a principios de ese a?o le comunic¨® a su esposa su deseo de retirarse. ¡°Cay¨® y cay¨®, fue a peor y se frustr¨®. Nos pusimos a llorar, pero le dije que no era la hora¡±, reconoci¨® Jelena Ristic en una entrevista. ¡°Despu¨¦s de eso, su cuerpo le dijo basta. Ya no le respond¨ªa¡±, precisaba en un encuentro con este peri¨®dico Pepe Imaz, un exjugador que asesora psicol¨®gicamente al n¨²mero uno y que, seg¨²n muchos, fue una de las causas del apag¨®n.
?El Golden Slam? He logrado muchas cosas que la gente me dec¨ªa que no conseguir¨ªa
Poco a poco, Djokovic fue restableci¨¦ndose y recuperando el apetito. Tras un ensayo fallido con Andre Agassi y el checo Radek Stepanek, volvi¨® a aliarse con su t¨¦cnico de toda la vida, el eslovaco Marian Vajda. Despu¨¦s de ese dif¨ªcil ¡°viaje interior¡± recuper¨® la br¨²jula, e inesperadamente renaci¨® hace tres a?os en Wimbledon. Piedra a piedra, Nole fue reconoci¨¦ndose. La fiera hab¨ªa vuelto. Desde esa victoria en Londres fue remontando el vuelo y adue?¨¢ndose otra vez de la escena; a partir de ah¨ª, festej¨® siete grandes y recort¨® distancias con sus dos grandes rivales, Nadal (35) y Federer (39). En el mismo periodo, el espa?ol (seis majors) resisti¨® el envite, pero no as¨ª el de Basilea, que en los cinco ¨²ltimos a?os se ha quedado en tres, el ¨²ltimo de ellos a principios de 2018 en Australia.
¡°Los Grand Slams son mi motivaci¨®n para entrenarme cada d¨ªa al cien por cien¡±, afirm¨® el domingo, mientras se le planteaba la posibilidad de lograr el Golden Slam; es decir, ganar el p¨®quer de grandes y el oro ol¨ªmpico. ¡°Todo es posible. He conseguido muchas cosas que mucha gente me dec¨ªa que no lograr¨ªa¡±, expres¨®. ¡°Ahora estoy en esta posici¨®n, ante esa posibilidad, pero en 2016 tambi¨¦n lo estaba, y ahora solo hay dos semanas entre Roland Garros y Wimbledon. Es complicado porque la transici¨®n tiene que ser lo m¨¢s r¨¢pida y eficiente posible. Voy a disfrutar de este premio y en unos d¨ªas pensar¨¦ en Wimbledon. El a?o pasado no se jug¨® y me gusta mucho la hierba. Tal vez pueda emplear la confianza de ahora para competir all¨¢¡±, prolong¨® satisfecho, pues la temporada va sobre ruedas: trofeo en Australia, trofeo en Par¨ªs.
Han llegado, en todo caso, despu¨¦s de otro periodo de dificultades. Hace m¨¢s de un a?o, impuls¨® una pol¨¦mica gira por los Balcanes (el Adri¨¢ Tour) que contraven¨ªa la realidad pand¨¦mica, saldada con una elevada cifra de contagios y una lluvia de cr¨ªticas. ?l tambi¨¦n contrajo el coronavirus. M¨¢s tarde, en septiembre, anunci¨® la creaci¨®n de una asociaci¨®n paralela (PTPA) en un desaf¨ªo a la ATP y posteriormente fue expulsado del US Open por dar un pelotazo involuntario a una jueza de l¨ªnea. ¡°Me siento triste y vac¨ªo¡±, se disculp¨®. En Australia protagoniz¨® un enganche dial¨¦ctico con Nadal y en el torneo oce¨¢nico se le acus¨® de fingir una lesi¨®n (rotura abdominal), consiguiendo abrir el ejercicio con un valioso triunfo.
Nunca pens¨¦ que fuera imposible alcanzar a Rafa y Roger. Ahora falta menos
Concentrado despu¨¦s en la arcilla, aterriz¨® en Roland Garros con un perfil moderado y en Par¨ªs ha completado estos d¨ªas una jugada maestra, rindiendo al espa?ol en su hist¨®rico territorio y coron¨¢ndose finalmente ante Tsitsipas. ¡°Nunca pens¨¦ que fuera una misi¨®n imposible alcanzar la cifra de Rafa y Roger [20 ambos]. A¨²n falta, pero ahora es uno menos. Estoy un paso m¨¢s cerca. Los tres competimos por este r¨¦cord asombroso y seguir¨¦ persigui¨¦ndolo, aunque quiero hacer mi propio camino y escribir mi propia historia¡±, dice sabiendo que entre ¨¦l y Nadal se han repartido 11 de los 12 ¨²ltimos Grand Slams; junto a Federer, 55 de los ¨²ltimos 64.
¡°Tengo conversaciones internas en mi cabeza. Hay dos voces: cuando vas dos sets abajo, una te dice: ¡®ya est¨¢¡¯; y la otra: ¡®puedes¡¯. He intentado animarme e ir poco a poco creciendo, porque sab¨ªa que mi tenis estaba ah¨ª¡±, expon¨ªa sobre c¨®mo le dio la vuelta a la final frente al griego. Habla Djokovic con el r¨¦cord de semanas (325) como n¨²mero uno ¨Cen marzo super¨® las 310 que defend¨ªa Federer¨C y como el tenista que m¨¢s ha facturado en premios (123 millones de euros) en toda la historia. Lo hace, adem¨¢s, como el jugador que m¨¢s majors ha ganado (siete, uno m¨¢s que Nadal) habiendo rebasado la treintena.
FIESTA EN CASA Y PREPARACI?N EN MALLORCA
Mientras Rafael Nadal recarga pilas en Manacor y el suizo Roger Federer regresaba a la hierba 700 d¨ªas despu¨¦s de su ¨²ltimo partido, con un triunfo contra Ilya Ivashka por 7-6(4) y 7-5, el serbio fue recibido por todo lo alto en su ciudad natal, Belgrado. Djokovic, que por la ma?ana se hab¨ªa retratado junto a la Torre Eiffel con el trofeo de campe¨®n, fue recibido con fuegos artificiales y tras unos d¨ªas de descanso comenzar¨¢ a pensar en Wimbledon.
Desde all¨ª, el grande brit¨¢nico anunci¨® que contar¨¢ con un aforo del 50% durante el torneo y que para las finales (10-11 de julio) ampliar¨¢ hasta el 100%. ¡°Siempre que se mantenga sano, veo factible que Novak gane el Grand Slam. Su gran objetivo al comienzo del a?o era ganar el oro ol¨ªmpico y los cuatro grandes. Hemos dise?ado un plan de entrenamientos para llegar en plena forma a los torneos que nos quedan para conseguirlo¡±, apunt¨® su t¨¦cnico, Marian Vajda.
De momento, Nole tiene previsto desplazarse a Mallorca para preparar all¨ª su asalto a Wimbledon, seg¨²n apuntan los medios serbios. Se ejercitar¨¢ en el Club Santa Pon?a, marco del Mallorca Championships ¨Cel ¨²nico evento sobre c¨¦sped que se celebra en Espa?a¨C, y posteriormente viajar¨¢ a Londres en busca de igualar el r¨¦cord de Nadal y Federer. El espa?ol a¨²n no ha confirmado si competir¨¢ all¨ª y el de Basilea concentra todos sus esfuerzos en ese objetivo.
Puedes seguir a EL PA?S DEPORTES en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.