Baleares niega la tarjeta sanitaria a un portador de VIH en paro

Hace un a?o que a ??igo L¨®pez le diagnosticaron VIH. Sus defensas a¨²n no est¨¢n en el l¨ªmite y los m¨¦dicos consideraron que por el momento no necesitaba medicaci¨®n. Sin embargo, s¨ª precisa seguimiento m¨¦dico. Y muchas pruebas. Ayer, en una de esas visitas a un ambulatorio de Ibiza, donde vive, el Servicio de Salud de Baleares le dijo que solo ten¨ªa derecho a la atenci¨®n sanitaria de urgencias. L¨®pez, en paro desde hace m¨¢s de un a?o, ha agotado la prestaci¨®n por desempleo y por lo tanto su derecho a la asistencia sanitaria gratuita. No tiene recursos. Hace un mes solicit¨® una nueva tarjeta sanitaria. A pesar de que la administraci¨®n balear a¨²n no le ha contestado -tampoco le dice si puede acogerse a la asistencia para personas sin recursos- le niega las consultas m¨¦dicas y las pruebas. "Tengo miedo de necesitar asistencia y quedar en desamparo", lamenta.

Salud rechaza que deje de asistir a ciudadanos si est¨¢n empadronados

Un portavoz del Servicio de Salud neg¨® que un caso como el que relata L¨®pez haya podido ocurrir. "Si est¨¢ empadronado y no es un desplazado debe tener acceso", dijo. La Consejer¨ªa de Sanidad de la comunidad tambi¨¦n rechaz¨® que personas en la situaci¨®n de este hombre de 40 a?os est¨¦n siendo discriminadas.

Pero este vasco que vive desde hace unos meses en Ibiza se empadron¨® en la isla hace ya tres semanas. "Lo hice precisamente para poder ir con normalidad al m¨¦dico. No puedo permitirme estar cogiendo el avi¨®n a Madrid, donde viv¨ªa antes, cada dos por tres. Ni econ¨®micamente ni por salud", dice L¨®pez, que ha trabajado durante a?os como supervisor cl¨ªnico. Fue al solicitar la nueva tarjeta cuando le dijeron que al agotar la prestaci¨®n no ten¨ªa derecho a la asistencia sanitaria, explica.

Lo constat¨® el lunes, cuando le negaron el acceso a una prueba m¨¦dica que ten¨ªa prescrita. Entonces reclam¨® al servicio de atenci¨®n al usuario. All¨ª, cuenta, le dijeron que como persona sin recuros s¨ª ten¨ªa derecho a la asistencia sanitaria, que llamar¨ªan al centro de salud y que volviera para hacerse las pruebas. "Acud¨ª, habl¨¦ con el m¨¦dico que se hizo cargo de la situaci¨®n y me atendi¨® sin problemas. Me hicieron las pruebas y me dijeron que pasara a por los resultados", relata. Sin embargo, al pedir la cita para los pr¨®ximos ex¨¢menes, el personal del ambulatorio le insisti¨® en que solo tiene derecho a la asistencia de urgencias, como plasmaron en gruesas letras rojas en su solicitud de renovaci¨®n de tarjeta.

"?Qu¨¦ pasa entonces con las pruebas que tengo que hacerme? Tengo miedo de que empiece a necesitar el tratamiento farmacol¨®gico y no se hagan cargo de ¨¦l. Lo necesito para vivir y no puedo afrontar su coste que puede alcanzar los 500 euros al mes", explica.

La de L¨®pez no es una situaci¨®n ¨²nica. Tampoco exclusiva de Baleares. Alrededor de 200.000 personas permanecen sin paraguas sanitario en Espa?a: parados de larga duraci¨®n a los que se les ha agotado la prestaci¨®n, personas que nunca cotizaron o afiliados a colegios profesionales no gozan de la asistencia sanitaria gratuita. Esta realidad cambiar¨¢ el 1 de enero, cuando la Ley General de Salud P¨²blica haga definitivamente universal la sanidad. Pero hasta entonces, las rendijas legales y la crisis hacen que situaciones como las de este vasco est¨¦n proliferando.